"Esta vez me quedare callado." [NamJin]

"Un efecto placebo." (Parte 10)

Un placebo es una sustancia que carece de un principio activo que sea beneficioso para la curación de una enfermedad, y a su vez, un efecto placebo crea un pensamiento en que esa solución es beneficiosa para el paciente cuando esté se convence a sí mismo de que es bueno para él, pero que no causa efecto alguno, más que el de la satisfacción psicológica del individuo.

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Desde que conocí a los padres de NamJoon, voy cada vez que puedo al hospital, a veces está su madre, raramente veo a su padre, y yo siempre estoy para darle apoyo a toda la familia Kim. Y a decir verdad, he creado lazos fuertes con la madre de Nam, me recordaba mucho a mi madre también, y siempre era agradable hablar con ella. NamJoon fue transferido a piso, y su estado era estable por el momento; su leucemia estaba muy bien controlada, pues era de las menos peligrosas, pero no se decía lo mismo de su corazón, el trasplante era completamente necesario, pero los aspirantes eran casi inexistentes, pero no perdíamos la fe.

Cada vez que nos veíamos, mimaba a Nam, siempre jugando con él, o dándole caricias, ayudándolo a asearse y a comer, la timidez de estar frente a sus padres actuando así fue disminuyendo con el paso de los días, estaba muy contento. Todo parecía ir en ascenso, ¿no?

Lamentablemente, mi vida personal no se encontraba bien, me la pasa estresado, muy ansioso, con actitudes paranoicas, aunque poco recurrentes. No importaba cuanto comiese, siempre terminaba asqueado y con más hambre que antes, mis mejillas comenzaron a desaparecer y cada vez me veía más pálido. No quería que Nam se diese cuenta, así que cada vez que iba al hospital, me maquillaba un poco para simular el color natural de mis mejillas, el de mis ojeras y labios, pero no importaba cuando bálsamo me pusiera, mis labios volvían a partirse.

Parecía que nada podía satisfacerme, lo único que me mantenía con cierta cordura era la compañía de Nam y su familia, pero los tiempos que pasaba solo, caía en el desasosiego, me hacía falta algo, algo que mi boca ansiaba probar, algo que no recordaba su rastro de sabor, algo que fue repentinamente necesario estos últimos meses, y necesito más de eso, quería ese sentimiento recorrer mis venas otra vez, quería volver a drogarme.

--Lo necesito. —dije recargando mi espalda en la pared y dejándome caer en el suelo, rascando mis manos con insistencia, haciendo que terminaran por arder.

No sabía donde podía conseguirla, ni si había alguien a quien podría contactar, así que no encontré otra manera, porque la necesitaba tremendamente, y sólo él sabía como encontrarla, Lee JaeHwan.

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No pasó mucho tiempo antes de que hubieran rumores sobre porque yo acudía al hospital donde NamJoon estaba internado, y la verdad, tampoco entendía como es que sabían que iba a ese hospital, pero la escuela ya estaba enterada, y mi vida era cada vez más agobiante, nadie sospechaba realmente que era Nam a quien yo iba a ver, pero las jovencitas preguntaban sobre si tenía una relación con alguien que estaba en aquel hospital, los jóvenes recriminando cada uno de mis movimientos, y los profesores manteniéndose al margen del asunto, incluyendo a Ken... Luego de que le agradecí sobre su auto, decidimos que lo mejor sería mantener nuestra distancia por un tiempo, eso llevo a que mis almuerzos volvieran a ser solitarios.

Pero ahora, debía hablar con él lo antes posible, no por nada que fuese personal, pero no podía seguir esperando.

—Jin-Sangsenim, ¿podría revisar nuestro procedimiento? —menciono una de mis alumnas, Myo Yang.

—¿Eh? Claro. —mis actitudes antipáticas y poco receptivas se notaban inclusive cuando parpadeaba. —Este punto de cocción no es correcto, revisen el documento entero otra vez.