Hasta que la muerte no nos separe.

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Hasta que la muerte no nos separe.

       Alejada del pueblo, encima de la colina más alta sobresalía una enorme mansión antigua, ventanas rotas, paredes exteriores llenas de arañazos, una parte del tejado rota, un invernadero con todo tipo de flores marchitas… Todo aquello aparentaba ser un lugar tenebroso en esta época pero… Hace cien años atrás relucía entre las demás casas, bellas ventanas que por dentro eran adornadas por marcos de cobre, paredes pintadas en color crema sin rastro de cualquier desperfecto, tejados en buen estado y el invernadero rebosaba de vida floral en su interior.

           En aquella hermosa mansión vivía una joven aristócrata llamada Sofie… Era una hermosa muchacha de cabellera morena lacia, unos ojos añiles y una tez delicada como la porcelana, su aspecto joven a pesar de tener veinticinco años brindaba a su favor pues muchos caballeros deseaban unir lazos con ella. Ella no deseaba casarse, quería ser libre como el viento en primavera, pero un día un nuevo sirviente llegó a la mansión para unirse al servicio, Sofie quedo prendada de él a tan solo una simple mirada de sus ojos verdes, su cabello al igual que ella moreno… Y él de ella desde el mismo instante en el que osó verla con su bello vestido verde pastel con volantes blancos.

          Aun que ella y él sabían que su amor era imposible, todas las noches se juraron encontrarse en el bosque hallado bajo la colina. Cumplieron así un mes justo hasta que un hombre de nombre John apareció en la mansión diciendo ser su futuro esposo por orden de su padre, la muchacha no pudo evitar a boda y mucho menos lo que sucedería después, pero aun que estaba sometida a un hombre a quien no amaba seguía encontrándose con el sirviente ocasionando un amor secreto y prohibido.

             Con el paso del tiempo el marido de Sofie empezó a sospechar las escapadas en las noches oscuras, a si que una noche tranquila decidió seguirla y averiguar qué era que lo que tramaba, observó tras uno de los árboles pues aquella bella escena de Sofie besando a su amado… John consumido por la ira corrió a la mansión a la espera de su vuelta, cuando esta lo hizo él la encerró de su habitación dejándolo a él fuera. Cogió su afilada y tenaz espada y buscó al sirviente, la joven Sofie gritaba ayuda pero nadie corría en su ayuda.

            John fue en busca del sirviente del cual su esposa le había hecho infiel, lo llevó a la sala de la chimenea y de un solo movimiento cortó las venas del cuello del sirviente haciendo que se desangrara en la sala, Sofie había encontrado la forma de salir de la habitación y recorrió todas las habitaciones de la mansión hasta que la halló, si encontró el cuerpo inerte y frío de aquel sirviente el cual ella amaba, sus lágrimas eran de dolor, su marido la miraba serio hasta que esta pide su espada, se niega pero ella le arranca la espada de sus manos y la clava en su pecho y así antes de que su corazón se parara se recostó junto con su amado y una última lágrima calló en el pecho del joven sirviente.

            En la actualidad se dice que en esa mansión en ruinas a plena media noche se puede observar en el salón la escena de la muerte de estos dos amantes y cuenta la leyenda que si vas allí con el ser que más quieres tu amor será eterno al igual que el de Sofie y el sirviente.

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