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—Tonto y la conchetumare, déjate de tomar esas pastillas culias.

El Nico, me empezó a retar, otra vez...

—Pero es lo único con lo que me siento bien.

—Sí, pero te vai a terminar matando, aweonao.

Aparecieron el Jaime y el Edgar, el Bestia faltó por razones que desconozco.

El Edgar me ignoró mortalmente, le hice una seña al Nico, pero creo que tampoco sabe qué le pasa al Edgar.

Anda muy raro.

La Sofía no deja de mandarme mensajes con emojis culiaos de corazón.

Siento que juego con ella.

Soy una mierda.

—Házlo por tu enamorada. —Añadió el Nico, y el ambiente se puso asquerosamente tenso.

El Edgar frunció el ceño.

—El amor lo puede todo dicen. —Dijo con mal humor.

¿Qué?

—Pero weon, si saben que no me gusta.

Puse los ojos en blanco.

—Entonces si no la queri, ¿Por qué chucha estai con ella? —Preguntó el Edgar con una seriedad que nunca le había visto.

Me llegó a dar miedo verlo tan bélico.

—Oye Edgar, tranquila vieja. —Le dijo el Jaime, y el Edgar lo miró nomas, y clavó su vista en el suelo.

¿Qué onda el Edgar? ¿Algún día descubriré qué le pasa?

Desde que supuestamente "estoy pololeando" con la Sofía anda muy distante conmigo, no me habla, anda medio pesao, qué wea.

Suspiré, tomé la mochila y le hice una seña al Nico para que me acompañara.

Se paró, le dijo a los chiquillos que íbamos a comprar, y nos fuimos de ahí.

—¿Tú no cachai que onda el Edgar?

El Nico me miró con cara de perro.

—Puta que eris weon, Naiko por la re chucha. ¿Sabí qué? Intoxícate entero culiao.

Me empecé a reír. Nico culiao pesao.

—Ya po, tírate unas pastillas y la hago.

—Acá tení peazo' de pastilla, bastardo culiao. —Me dijo todo serio, y me hizo un Pato Yáñez.

Tengo amigos cagaos de la cabeza.

—Ya po negro culiao, suelta la pepa.

Puso los ojos en blanco, y suspiró.

—Puta mi niño, no sé si es algo que deba contarte.

—Nico ya po, el Edgar anda raro, y tú lo conoces mucho mejor.

Me mandó un pape de aquellos.

—Antes de decirte, debo advertirte. ¿Estai seguro de que quieres saber?

Asentí.

Me miró un rato, y eso me puso bastante nervioso.

—Sé sincero pendejo culiao. ¿Te gusta la Sofía?

—Puta, es linda pero...

—Te dije que fuerai sincero weon.

—No me gusta. —Dije, con un sentimiento culiao de culpabilidad enorme. —Pero no la quiero dañar y decirle eso.

—Ah, weno. —Dijo, exactamente como lo dice el Jaime. —Entonces estai preparao pa lo que se viene. Sé fuerte Naiko weon.

—Puta culiao, ¿Me vai a decir o no?

—Te meo culiao. ¿Cómo eri' tan weon Naiko? ¡Le gustai al Edgar! ¿Cómo no cachai esa wea? —Gritó. Lo bueno es que no había mucha gente.

Lo miré con una cara de weon auténtica, de primera clase la wea.

—¿Me estai webiando?

El Nico me volvió a pegar. Tan simpático que salió. Un amor de persona el conchetumare.

—No. Le gustai. Es increíble que todos cachemos menos tú. Parece que te falla el cerebro weon. Lo emo te tiene aweonao.

Y puta, en ese minuto necesitaba la docena de pastillas.

No supe qué wea decir. Estoy dañando  dos personas que me quieren...

Soy una mierda de ser humano.

—¿Naiko?

No di más, y me tiré encima del Nico y empecé a llorar como María Magdalena.

—Weon, soy una mierda de persona, debería estar muerto, por la chucha.

El Nico me pegó sutilmente mientras me sobaba la espalda. Tenía un nudo en la garganta, en el pecho, en la guata, y en todo cuanto fuese posible tener un nudo.

A m a r g u r a .

"¿Poco ánimo.

Su hijo tiene claros síntomas de depresión. ¿Se aisla con frecuencia de usted? Es claro, el joven no está en un buen momento, es depresivo. Le voy a recetar estas pastillas, y por favor, procure que su hijo las tome de manera responsable. Si no lo hace, va a terminar muerto por intoxicación."

No quiero seguir ni un minuto más en esta mierda, no valgo nada, y a nadie le haré demasiada falta.

"Nicolás, pasa. Vas mejor. Recuerda tomarte tus pastillas. ¿No te has sentido aliviado? Cúentame lo que te aqueja, o lo que te incomode, nada saldrá de acá. Haz cosas que te gusten para despejarte. Relájate, vas a superar todo esto, yo creo en ti. Nos vemos Nicolás, cuídate, y tómate las pastillas."

Ahora sí que me intoxico entero weon.

•••

Wena madarfakars.

Si está corto...

SHUPAME LA PISHULALAAA

Y NO ME LA SOLTI MAH.

Nah.

No tenía ideas.

Te pillamos po compadre.

Weno cabritas, las dejo en suspenso.

Xao.

Xupen la tula.

Pixula con pan, pixula con pan, hot dog, hot dog.

-Cami.

emo; ednaikoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora