Él es el típico chico de las risas, el que hace reír a todos.
¿Cómo resistirse a él?
¿Cuánto tiempo podré aguantar no caer por él?
Resistir... Aguantar... Definitivamente no creo que dure por mucho tiempo porque yo realmente ya había caído por él c...
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Capítulo 7
Los lacayos alias Taeyang y Chanhee me llevaron a rastras al salón de ensayo, literal... donde el resto que no había entendido y lucia confuso también se enteró de lo sucedido, en realidad yo solo miraba al par de hermanos locos que me gastaba, suspire con fastidio ya que no me dejarían ir de aquí hasta no sacarme la información que ellos consideren aceptable y siendo tantos ¿Cómo huir? ¡Ayuda! ¿Si grito que ganaría? Cero pases de visita... Enserio que no quiero hablar y menos con Dawon aquí presente.
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Lo que le siseaba al par a mis lados no era nada lindo... y estos solo tienen la desfachatez de reírse.
-Deja de murmurar cosas que no puedo escuchar y siéntate allí señorita, sin resistencia- me acuso mi hermano mientras fulminaba con la mirada a los que se supone son mis amigos quienes me soltaron.
-Ya ya~ - refunfuñe -Ya me siento- lo hice –cálmate un poco, no me alces la voz que sabes que no me gusta- pedí ya que sus ojos esta algo sobresalidos de la molestia, enserio que el con su sobre protección era única, mejor no hablo de la cara de su mejor amigo a su lado -¿Qué es lo que ocurre?- pregunte fingiendo ahora inocencia, si no puedes con el enemigo ¡finge demencia o únete! -¿Por qué me ven así? ¡Yo no hice nada! ¡Lo juro! Solo salí con Taeyang un momento, fuimos por agua- actué lo mejor que podía siendo intimidada por nueve pares de ojos –ya bueno, esta bien. Si. Yo fui-Arme una vieja confesión -simplemente tenía hambre y lo único que encontré fueron las galletas de Jaeyong oppa y pues~ me las comí ¡Lo Siento!-
-¡Que!- grito el implicado buscado a sus ahora inexistentes galletas en su mochila -Mis galletas no~ - lloriqueo cuando efectivamente no las encontró ¡ups! –Niña me las debes- asentí volviendo a decir "lo siento", haría que el Maknae pagara por ellas.
Chani se rió leve, en realidad él se las había hurtado no yo, pero es cierto que me comí la mitad de ellas y no había dicho nada. Pero claro él es un lindo bebe en el que todos confían y creen, así que es mejor echarme la culpa y si con eso logro que olviden de lo demás, mejor.
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