No Me Abandones [One-shot] [Fedexfelix]

No me abandones

El cielo anunciaba que el atardecer estaba por ocurrir, en un árbol alejado de la colina un chico de cabello rosado con un tono más claro en las puntas se encontraba pensando, tristemente, ya que una noticia hizo que su mundo se viniera abajo, la persona que más quería, con la que había compartido sus mejores momentos ya no estaría, era cuestión de horas para que se fuera dejándolo sólo.

Mirando la pulsera que, para el, le regaló el amor de su vida no se percató de las pisadas atrás de el que se acercaban dejando ver a aquel que ocupaba sus pensamientos, con su cabellera rosa tan bien arreglada como siempre mientras que su camisa roja a cuadros y su pantalon azul marino con unos lindos tenis negros, se veía tan hermosos como siempre.
Fede miró al contrario un con una sonrisa algo fingida lo saludó.

-hey Félix- se levantó para poder quedar a la altura del contrario o eso intento- tu vuelo saldrá pronto no?...

-vine a despedirme- dijo el contrario mientras miraba fijamente los ojos zafiro de fede.

-oh..- contestó desanimado mientras se abrazaba a sí mismo con la mirada hacia otro lado- sólo cuidate, amigo...
Esas últimas palabras saliendo de su boca con un sabor amargo, el sabor de la despedida.

-fede...- Félix se acercó un poco más a el y lo tomó de los hombros- hablaremos todos los días..

Basta...

-siempre estaremos en contacto, nunca dejaré de hablar contigo

Deja de mentir...

-sabes que nunca te olvidare- Félix lo había tomado de las mejillas para que pudiera verlo a los ojos, la expresión de fede era demasiado dolorosa, sus ojos azules se veían opacos por las lágrimas que con mucha fuerza de voluntad trataba de ocultar, el contrario se dio cuenta de eso y su expresión se puso aun más angustiada, a él le dolía más dejar sólo a fede, trataba de convencerse de que sólo seria un tiempo pero tanto como el como el contrario sabían que no era verdad, pasaría mucho tiempo para que Félix regresará, sabían que en ese tiempo cambiarían muchas cosas, arían nuevos amigos y al pasar el tiempo dejarían de escribirse.

Era cuestión de tiempo...

Fedese sentó de nuevo mientras se recargaba en el árbol, Félix sólo lo miró y con un suspiro se sentó junto a el mirando el atardecer, sólo faltaban algunos minutos para que el sol se ocultara.

-¿y las chicas?...-pregunto el más bajo con el objetivo de romper aquel silencio incómodo que se había formado.

-fueron a despedirse hace unas horas- respondió el contrario mientras abrazaba sus rodillas- abby no paraba de llorar y lily me regaló su caja musical.

-¿la que nunca nos dejo tocar?- pregunto un poco divertido mientras miraba levemente al mayor.

-exacto,es extraño, antes me mataba si miraba esa caja- los dos rieron levemente,  olvidando aunque sea por unos minutos el dolor de la despedida.

Pero la despedida era inevitable, el sol se había ocultado y el mayor tenía que marcharse, sin decir ni una palabra, sin mirarse a la cara, ninguno de los dos tenían el valor de decir esa palabra adiós era demasiado doloroso.

Sin decir nada, comenzaron a caminar hacia la casa del mayor, en silencio los dos atesoraban sus últimos momentos juntos, cada paso que daban era un paso más cerca para el final que ninguno quería, el nudo en la garganta del menor le impedía decir palabra alguna, en cambio el mayor sólo quería detenerse y abrazar a su contrario, pero el valor para eso se había esfumado.

A pocos metros de llegar a la casa del mayor, fede no pudo más y se detuvo, no quería hacerlo, no quería verlo irse, el mayor lo miró angustiado, sabía lo que le pasaba a su amigo, pero sabía como ayudarlo, como consolarlo, las lágrimas rodaron por las mejillas de fede rompiendo el corazón del contrario, esto sería aun más doloroso.

-puedes irte a casa si quieres fede...- dijo Félix mientras limpiaba las lágrimas de su compañero.

-no quiero...- contestó, quería despedir a su amigo apropiadamente pero era demasiado para el.

-tienes que hacerlo- dijo el mayor mientras tomaba en brazos al menor en un cálido abrazo, pero, a la ves amargo, sería su último abrazo, de ahí jamás se encontrarían de nuevo.
Fede trató de protestar pero sabía que era en vano, sin decir una palabra miró a su amigo con lágrimas en los ojos y una tierna sonrisa y se puso en marcha a su hogar
No quería mirar atrás, no se atrevía, por su bienestar no debía hacerlo, pero estando a unas cuadras de la casa de su compañero, lo hizo, miró hacia atras aun sabiendo que eso lo dañarla más, y así fue, pudo ver a Félix subiendo las maletas a un taxi que había llegado por el, su pecho se contrajo tanto que sintió morir y sin pensar corrió, corrió de nuevo hacia donde estaba el mayor rogando a que no subiera ese taxi aun, quería decírselo, decir lo que nunca pudo y se guardó, un simple te amo amortiguaria la amarga palabra adiós pero fue demasiado tarde, Félix subió al auto antes de que fede llegará, y sin mirar atrás se fue.

Fede con el corazón a mil por correr y el nudo de su garganta al ver a su amigo irse lo debilitó, calló de rodillas metros antes de llegar a donde estaba, sus lágrimas brotaron de nuevo, quería gritar, desahogar todo el dolor que sentía pero no pudo.
Abrazandoce a sí mismo lloro sin importar si alguien miraba, son importar que pensarán, no sabían que su mundo terminó, no entenderían s dolor.
El nudo en su garganta se hacía aun más fuerte, sus sollozos no paraban, sin poder hablar sólo se repetía una y otra ves para sus adentro.

No me abandones....