Cedrix freno frente la casa de Magali, volteo a verla y ella observaba todo a su alrededor, como buscando algo. Ella no era tanto, sabía que algo pasaba y eso le gustó, era muy despierta. Apago el auto, bajo y fue a abrirle la puerta, ella se lo agradeció, pero fue más rápida en ir dentro de la casa.
Era obvio, estaba preocupada. Él también lo estaba. Vio sobre su hombro, cada casa, cada árbol o arbusto, entonces fue dentro. Debía ir planeando.
— ¿Dónde están mis padres? — la pregunta de Magali lo hizo ir más rápido, frente de ella está Rubí.
— Están en el sótano, Cedrix dijo que los pusiéramos ahí.
— ¿Y Greco? — Magali pasó de la hembra, caminando al sótano.
Cedrix la siguió, no la habia visto ser así. Preocupada, nerviosa y en alerta, cómo sí estuviera en un campo que no conocía o estuviera a punto de perder todo, tal vez lo último se acercara mucho a la realidad. Sí es que él era alguien especial para ella.
Bajo los escalones, al final de estos estaba Lua y a su lado Deo, pero ella parecía no estar a gusto con el joven cerca. Solto un suspiro, le tomó la mano a Lua y la llevo con él, alejándola del hijo de Leo. En ese momento no queria más tensiones y problemas.
Magali estaba frente de sus padres, tenía a Greco en brazos y ella parecía estarles platicando una versión un tanto falsa, sí no era así entonces ¿por qué sonreían los padres de Magali?
— Y es por eso que he estado trabajando más de la cuenta, pienso darles su regalo de aniversario por adelantado. Irán a una isla muy espacial. — ¿Acaso se refería a Esa isla? — Yo me encargaré de cuidar su casa, la mantendré limpia gracias a estos chicos de intercambio. Estaremos en contacto.
— ¡Eres la mejor! — grito la madre de Magali, lanzándose a abrazarla. — Prepararé las maletas.
— No se preocupe por eso, el paquete que eligió Magali viene con cupones para cambiar por ropa. — comento Shark, sonriendo cómo todo un niño bueno haría. — Nada más permitan que llegue el taxi, este los llevará al aeropuerto.
— Si, — Lua se soltó de él con delicadeza, camino hacia el padre de Magali, extendiendo un sobre. — sólo entregue esto y podrán abordar sin problema.
— ¡Vaya! Muchas gracias, jovencita. — Se rió el hombre, tomó la mano de su esposa. — Estaremos arriba esperando el taxi, con su permiso. Magali, — la volteo a ver. — gracias.
— No hay de que, sólo vayan y disfruten.
— Ten por seguro que lo haremos.
Ambos humanos subieron, los nuevos también junto con Deo, sólo se quedó él con ella. Y el crío demonio llamado Greco.
Vio los hombros de Magali temblar y se odio por eso, tanto que quería alejarla del peligro y siempre la atraía a uno nuevo. Dio un paso a ella, le pasó una mano por la mejilla y se sintió aliviado al no recibir un golpe de parte de Greco, este parecía sólo querer cuidar a Magali.
Quiso decirle que lo sentía mucho, que lo mejor era que volviera a Fénix y ellos le dieran refugio hasta que todo acabará, pero no podía. No la quería lejos.
— Lo lamento, te prometo que no dejaré que te pase nada. Ni a ti ni a Greco, voy a protegerlos. — era una promesa, está vez haría todo por no romperla.
— Está bien, Cedrix, sólo no... — solto un suspiro. — no te presiones demasiado.
— Lo intentaré.
Le tomó la mano, bueno, no iba a perder más tiempo del que ya había hecho. Subió las escaleras con ella tras de él, viendo a Deo en la cocina y a Lua en la sala, a su lado estaba Rubí. Shark paseaba ansioso de ventana a ventana, tal vez lo mejor era cerrarlas o bloquearlas con madera, pero en ese caso no tendrían por donde salir.
Tal vez lo mejor era tomar carretera, aunque un lugar encerrado para críos hormonales no era lo mejor. Hizo una mueca. Debía planear algo pronto.
→×←
Cuando el taxi desapareció en la distancia sintió como por fin podía respirar, no lo quería en peligro, tampoco a su papá aunque no había día que no pelearan. Volvio dentro de la casa, sonriendo al ver como Greco jugaba a las luchas con Shark.
— Se llevan bien. — río bajo al ver a Cedrix fulminando con la mirada tal escena. — ¿Por qué conmigo no?
— Shark y Rubí fueron los primeros en llegar a la casa de Forest y Lucy cuando... bueno, ellos rescataron a Greco junto con Kuzimu. — se abrazo a si misma. — Gracias a ellos Greco está aquí y no quedó en un estado de shock fuerte.
— Es un crío bastante fuerte, él hubiera podido con todo.
— Pero es un crío. — lo volteo a ver. — No tubo que haber pasado por lo que pasó, eso... estuvo mal. — cerró los ojos, él se quedó viéndola. Era bastante guapa. — Necesito darme una ducha, te los dejó a cargo. — abrió los ojos, le sonrió y palmeo el pecho, riendo bajo. — Serás el papá y yo la mamá.
Con ese comentario se alejó, yendo a la planta de arriba y ¿él? Él se quedó ahí parado con el corazón corriendo a mil, ella... era única. Especial.
Volteo a ver a los chicos, estos le sonrieron, incluso Greco, y comenzaron a reír. Él sólo les gruño y se fue a la cocina, junto a Deo, el joven seguía con la mirada clavada en Lua.
— ¿Por qué acostarte con humanas si la tenías a ella? — fue directo, al grano. Ni habia de otra forma.
— Algo no... no puedo.
— ¿Qué no puedes? ¿amarla? — arqueo una ceja. — Lua es increíble e inteligente, un poco inocente, pero es lindo.
— No es eso, es... — Deo se pasó las manos por el cabello. — Cuando estoy con ella recuerdo el cómo... el cómo ese cabrón la toco, como la hizo llorar y gritar, la violo enfrente de mis ojos. Me siento asqueroso por tocarla, creo que la lastimó, pero...
— La lastimas más siendo así, tratándola de esa forma y llevando esa marca en el cuello, sé que es difícil dejar unas cosas atrás Deo, pero ella lo vale. Desde que nació fue tratada cómo una puta, sólo la respetaron cuando era pequeña, pero el respetar no quiere decir que no la golpearon o drogaban, fue usada. ¿No crees que lo que estás haciendo es similar? El irte con humanas y volver a su lado como si nada hubiera pasado, pero exigiendo que ella no haga lo mismo, es peor de lo que Señor le hizo.
— ¿Por qué?
— Porque ella no lo quiso, le enseñaron a protegerlo, le enseñaron el complacerlo, pero sólo para no ser abusada. Esa era su recompensa. — gruño bajo, eso mismo le habían hecho a él. — A ti te quiere, siente algo por ti algo muy especial y eso es lo que la está lastimando, que a pesar del gran cariño que te tiene tu vayas y busques a alguien más.
Deo solto un resoplido, salió de la cocina y de la casa, cerrando la puerta de golpe. Cedrix observó a Lua, su cara preocupada y sus ojos llenándose de lágrimas, se levanto, pero no fue muy lejos. Rubí la sujeto de la mano y negó con la cabeza.
Greco se safo de un agarre “Mortal” de Shark y corrió hacia con Cedrix, ocultándose tras de él. ¿Eso era confianza? Si, lo era y se sentía bien, tomó a Greco en brazos y corrió con él, jugando un muy improvisado “Corre que te pillo”.
Él era el Papá... sonrió, abrazando a Greco y sorprendiéndose cuando esté le correspondió el abrazo.
Magali era la mamá y él los protegería a todos.
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Cedrix (Nuevas Especies 11)
FanficÉl hizo todo lo humano posible por reparar los errores que había cometido, lo logró y ahora sólo le queda esperar el tan deseado momento: la muerte. Pero esa meta la ve muy lejos cuando es raptado por la belleza que lo atormenta en sueños. - Heces e...