Capitulo 10: Planes

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Todo él fin de semana la pasamos súper. Hicimos fiestas, las chicas fuimos de compras, los chicos a los juegos mecánicos que acababan de llegar, hicimos campamentos, pero no duramos ni media hora, porque a Carla le daba miedo él exterior. Una amiga rara, pero entendible.

Regrese él lunes a casa, agotada, pero contenta por la pequeña distracción que los chicos me dieron. El martes tenia clases así que necesitaba descansar lo suficiente. La doctora me recomienda ocho horas, pero mi pequeño cerebro me recomienda unas quince, máximo. No era aragana, pero si me estresaba. Y como siempre dice Alice: "El que duerme mucho no es porque sea Perezoso, solo que cuando duermes es la única manera que tienes para olvidarte de tus angustia y preocupaciones. Tu único momento de descanso." No lo niego, es cierto.

Aveces yo deseo tener un botón tiempo y pararlo por lo menos cinco minutos. La vida se va tan rápido, que no logró comprender lo qué pasa. Y cuando duermo, es como si quisiera ser la bella durmiente y jamás despertar. Ni siquiera por un príncipe... porque no existe. Como sea, mi punto es que dormir es lo mejor del mundo.

Llegue a mi cuatro y tire todas las maletas. Me tire a la cama y tome una siesta. Una larga siesta.

(***)

–Jane, arriba, vamos despierta- me despertó Alice de mi profundo sueño. ¿Que rayos estaba haciendo en mi cuarto? En mi hora de dormir.

-¿Que queres?- conteste enfadada y abostesando.

–Bueno, dormistes casi todo un día, y...

–!!Jane!!– un grito hizo que abriera los ojos como platos, Alice se tapó los oídos. Me tape con la sabana y sentí como alguien se tiraba encima de mi estomago, que casi me hizo quedar sin aire.

Me quite la sabana y allí estaba ella. La niña mas dulce, alegre y amable.

Mi hermanita

–Amy, hola– la abrace y me devolvió él gesto.

-Hola, y mi abrazo- dijo Alice extendiendo sus brazo.

–Jaja.... Tedi tres abajo– dijo la pequeña sentándose. Y la sonrisa de Alice desapareció, y reí.

– Y que haces aqui ¿No tienes clases?– pregunte sentándome.

–Si, pero estoy en vacaciones y papá me dejo venir a verte a ti y a mamá– respondió jugando con sus dedos. La hacía ver tan tierna.

–¿Acabas de llegar?– pregunte viendo sus grandes ojos azules.

– Si– afirmó. La tome en mis brazos para bajarla y baje las gradas con ella y Alice detrás de nosotras. Llegue al living y se encontraba mi padre con una mujer a su lado, era rubia, y parecía modelo de televisión, era bella. Busque con la mirada a mi madre. Baje a la pequeña y le indique que se fuera con mi padre.

Disimuladamente para que mi padre no me mirara fui a la cocina, donde allí se encontraba mamá cruzada de brazos y viendo, estática, afuera de la ventana. La entiendo todo esto no es nada fácil para ella.

-¿Ya lo vistes?- asentí, sin que ella me viera.

Agacho la cabeza y se llevo la mano a la cabeza. Me acerque a ella y tome su hombro y ella giro. La abrace y pude sentir su suave y delicioso aroma. La mire y ella estaba sonriendo.

-Vamos a saludar- dijo y me tomo de la mano. Y cruzamos la pared que dividía él living y la cocina. Estaba sentados todos hablando y silenciaron cuando entramos. Las miradas si fijaron en nosotras y mi padre se levanto. Sonreí y me acerque a él y lo abrace. Saludo a mi madre con un apreton de mano.

Un Amor Musical /EDITANDO/Donde viven las historias. Descúbrelo ahora