SAYA

Ella

Estaba sentado, en una esquina hasta el fondo del salón. Era la ultima clase, faltaba una hora para terminar y el profesor de Etica no paraba de hablar acerca de la moral.  Me importaba poco lo que diga, ya que en pocas palabras ya había pasado su materia. No le debía ni a el ni a nadie de los otros docentes. 
Como dije, poco mi importa. Miro por la ventana y observo como el jardin del Colegio es regado por esparsores automaticos. Los pajaros en los arboles, cantando y aleteando... a veces los envidio por su libertad.

El profesor no se calla, el aula esta en completo silencio a exepción de la persona antes dicha. El tiempo se hacia una eternidad, pareciera que el reloj se quedara sin baterias y al grupo le valiera el pasar del tiempo. Pongo un audifono en mi oido izquierdo de forma que no se note. Me pongo la capucha y asiento la cabeza en la paleta de la silla.

Suspiro, ¿que otra cosa podría hacer?. No hay mucho que decir en cuanto al día, ha sido muy aburrido. Lo unico interesante que a pasado fue cuando un compañero casi se pelea con otro solo porque le estaba hablando lindo a su novia. Absurdo al parecer si me lo preguntan...

Ya pasaron quince minutos, el profe dejó de explicar, el salón ya no esta tan silencioso. Todos hablan acerca de el proyecto que dejó el maestro. Unos se levantan a preguntarle, otros se quedan pensando, parece un mercado el lugar. 
Un compañero se me acerca.

- Oye, Alex. ¿Tienes equipo para el proyecto? - pregunta.
- No, ¿de que trata?...
- ¿No lo oiste?, el profesor quiere que hagamos algo para expresar el concepto de la moral.
- Ah ya...
- ¿Quieres estar en nuestro equipo?...
- Em (suspiro), si, porque no.

El tipo me agradeció, dijo que luego nos pondremos de acuerdo con eso. Yo me puse el otro audifono. El profesor me empezó a ver con mirada seria, fria, penetradora... mierda, pensé...

- Alex, podrías venir un momento por favor.- exclamó.

Acto seguido, tuve que levantarme y dirigirme a su escritorio.

- Digame, Profesor.- dije.
- Chico, durante todo el semestre, te e visto serio, veo que eres cruel con todos y casi no hablas. Dime, ¿tienes algún problema familiar o algo asi?
- No, señor... 
- Siendote sincero, me preocupa tu estado.
- No hay nada de que preocuparse, Maestro.

A decir verdad, todo andaba bien, mis padres estan discutiendo el divorcio, provablemente peleen por mi tambien. Mi abuelo murió, la escuela es aburrida, me odian en mi vecindario... como dije, no pasa nada.

- Chico, ¿estas seguro no sucede nad...
- ... se lo aseguro, profesor. Todo esta bien.
- Bueno, confio en ti. Puedes retirarte.

Volví a mi asiento... me pueso los dos audifonos y la capucha. Me recosté en la paleta de la silla y esperé aque terminara la clase.

Al cabo de un rato, las clases ya habían terminado. El maestro se retiró y los del turno vespertino estaban esperando a que salieramos del salón. Me levanté, agarré mi maldita mochila y salí.

En la entrada del colegio, suele haber muchos estudiantes cuando es la una o dos de la tarde, pues saliendo los matutinos entran los vespertinos. Yo tenía que esperar a mi padre, pues el siempre me lleva a la casa, hasta entonces, permanesco sentado en las bancas.

Es gracioso... el profesor hace rato me dijo "confio en ti". Lo mismo me dicen mis padres, pero la diferencia es que puedo sentir que por el tono con el que ellos lo dicen... no es cierto.

Pasaron treinta minutos, no llegaba mi padre. Empiezo a desesperarme, ya casi no hay estudiantes. Cuando de la nada, apareció una chica... por alguna razón me ipnotisa, tiene algo... pero no se que es. Casi al instante, ella me ve... se da cuenta que la estoy viendo. Intento voltear, pero ya no importa pues me descubrió. Me sonrie y entra al colegio.... yo solo la veo irse a su salón.

Me pongo a pensar en lo ducedido... ¡¿que fue eso?!...

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Continuará... Eso espero 😓