Capítulo 5

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ZAIRUS: sé que a lo mejor no lo comprenderás pero es mejor para los dos que dejemos de hablar, es más lo mejor será que te olvides de mí, de lo que hemos hablado y sobre todo de que te salve. Fue un placer conocerte, pero ahora mismo es mejor que desaparezca de tu vida y tu de la mia. Que seas feliz Caperucita.

   ¿Ehh...? ¿Hola...? Me acaba de dejar y sin haber empezado nada. Esto es un nuevo record para mí, me habían dejado al par de meses, a la semana, pero sin haber empezado... ¡¡JAMAS!! Le intento enviar mensaje, lo llamo para saber qué ha pasado, ¿por qué ahora tan de repente aparece una novia de la cual no me había hablado y me dice que por el bien de los dos que ni me acuerde de él? Me siento impotente y encima estoy en el servicio del trabajo escondida ya que estas palabras me han hecho llorar y no sé por qué.

    Una vez salgo de mi trabajo y me dirijo a donde está aparcado mi mecherito, me sorprende el sonido desesperado de algo pequeñito dentro de unos matorrales justo al lado de mi coche. Me agacho, veo un pequeño cuerpecito con dos ojos gigantescos de color grises. Es un pequeño gatito, que consigo que salga de su escondite gracias a que el mensaje de "mi querido amigo" no me dejo muchas ganas de comer. Le voy poniendo pequeños trozos de jamón serrano como incentivo, cada vez que sale le doy un poquito, hasta que llega un momento en el que está pidiéndome caricias y mimos. En ese mismo momento decido que me lo voy a llevar a un veterinario para ver si tiene alguna identificación, y si no, le haga su primera revisión.

     Después de salir del veterinario, el cual me ha dicho que Shadow esta genial y parece no tiene dueño. De paso le he comprado su casetita para dormir, un rascador (para que no me destroce los muebles), un trasportín, un arenal y unos juguetes para que se entretenga. Ya sé, ya sé, este mes me estoy quedando sin ahorros entre la llamada a Alemania, mis medicamentos, el coche, y ahora el gato me voy a quedar pobre, pero creo que por darle un capricho a un animal y a mí no me voy a morir.Llego a casa con todas las bolsas y Shadow, Lena y Daila están en el sillón viendo la televisión y tecleando en sus ordenadores y móviles.

-Hola Chicas. Lo siento por no preguntar, pero tenemos un nuevo inquilino en casa.

–¡¡¡¿¿QUEE...??!!!- Ambas se sobresaltan.

     Dejan todo lo que están haciendo para poder mirarme a mí y a nuestro nuevo compañero de piso. Se les notaba mucha tensión en sus caras.

–Os presento a Shadow el gatito- digo mientras lo saco de su trasportín y se los enseño.

       Las dos al verlo se enamoran  de él y no ponen ninguna pega en que lo adoptemos. El resto de la tarde estamos acomodando sus cositas y jugando con él hasta que tocaron el timbre y nos dimos cuenta que era Alai y Kenneth que venían al viernes de tortitas. Este viernes de tortitas también venían los chicos, raro pero cierto. Este día ellos preferían para ir a ver el futbol o el tenis o algo de esto. Ya solo faltaban por llegar Brais y Ronald que me puedo imaginar que las chicas le habrán dicho de ir a comprar antes de venir para casa. En lo que llegan empiezo a cocinar las tortitas.

    Mientras termino de preparar la masa, miro mi brazo, solo le quedan sombras de lo que paso, el verlas me hacen pensar en Enzo y eso me entristece. Las chicas no sé en qué momento se han puesto a mi lado, pero han visto que no estoy del todo bien. Hablamos de todo lo sucedido con Enzo y cada vez las veo más decididas a sacarme mañana todo el día por la ciudad.

-No puedo estarme todo el día por fuera, Shadow me necesita.

–Chicos ¿Mañana hay futbol verdad? Si compramos el partido ¿os quedáis cuidando al gatito todo el día?-Pregunta Daila desde la cocina.

     Se reúnen y empiezan a cuchichear como si estuvieran tramando un gran plan.

–Si ponéis que podemos traernos la play, pizza y cerveza en la oferta está hecho cuenten con nosotros.

–Perfecto, pero nada de destrozar la casa que me los conozco- les señala Daila.

      La última vez que se quedaron solos en nuestra casa, la cocina era un verdadero desastre, el sillón estaba todo lleno de manchas de comida, cuadros por los suelos, vasos rotos y del baño mejor ni hablar.

–No me fío de ellos- digo en voz baja para que solo me oigan mis amigas.

–Fíate de nosotras si hacen algo nosotras nos encargamos, te lo prometo.

*********

    Hemos estado todo el día de compras, spa y peluquería y la verdad que el resultado es impresionante. Estoy guapísima, y no es porque sea yo,  pero mi peinado de hondas al agua es perfecto, mi maquillaje resalta mis ojos castaños, el vestido es muy feme fatale y los tacones es que son espectaculares. Me siento muy, pero que muy atractiva hoy. Mis amigas también están geniales. Los chicos cuando las vieron casi no nos dejan salir solas. Me reí bastante viendo las escenas de "yo voy contigo" "que no, que es noche de chicas".

     Para ir a la discoteca preferimos ir en taxi así ninguna tendría que abstenerse a beber. Desde que llegamos vamos a por unos cócteles y bailamos todo lo que podemos y mucho más. Cuando ya estoy por mi cuarto margarita un hombre robusto con el logo de SECURITY en la camisa nos indica que podemos pasar a la parte VIP. Aquí nos invitan a una ronda de cocteles. 

–Disculpa ¿Quién le ha pedido esta ronda?

     Le pregunto a la camarera, que me señala a un hombre muy atractivo que está a un par de mesas de nosotras. Este al ver que le miro levanta su copa y yo le hago el mismo gesto.

-Nena ese hombre no está nada mal-Me dice una de mis amigas

– ¿Por qué no vas y hablas con él?- Me sugiere Lena

–Sabéis que os digo, que voy a ello ¿Total que pierdo?

       Mientras digo esto me doy cuenta que estoy un poco ebria, por eso puede que haga alguna locura. Llego a donde está el chico que nos ha invitado, por lo que veo es mucho más atractivo de cerca, este se levanta y mirándolo con ojos seductores digo:

–Buenas noches ¿Cómo te llamas?

–Me llamo Lionel ¿Y us....

       Le beso en los labios, como dije ya estoy haciendo locuras. Al principio se quedó asombrado pero al cabo de unos segundos, me apretó más contra su cuerpo musculoso, y profundizó más el beso. Una vez terminado le respondo a lo que supuse era su pregunta.

–Me llamo Sibisse. Gracias por las copas y espero que no te molestara el beso, ni creas que es por las copas, es porque eres guapísimo y con esos ojos azules y todo tú- digo de carrerilla casi sin respirar con una mirada lasciva que recorre todo su cuerpo de pies a cabeza-Todo tu eres un pecado. Y creo que me he pasado de copas porque no sé ni donde queda mi vergüenza, lo siento creo que será mejor que me vaya, que si no pierdo todo mi sexapil con tanto hablar.

     Lionel se empieza a reír y no sé si es por mi palabrería o que tengo algo en la cara. Empiezo a tocarme la cara preocupada para asegurarme de que no es lo segundo. Como leyéndome el pensamiento me coge una mano

–No tienes nada en la cara no te preocupes, estas preciosa. Y no, no me ha molestado tu beso, ¿te cuento un secreto?-afirmo con la cabeza mientras esos ojos azules me siguen mirando muy atentos- si no lo hubieras hecho tú, te hubiera besado yo-me dice con una sonrisa en los labios-y otra cosa, me gusta la gente que me dice las cosas, así no me tengo que imaginar lo que están pensando.

     Dicho esto se lleva mi mano a su boca y la besa caballerosamente. Siento que mis mejillas se sonrosan rápidamente. Últimamente los hombres que conozco son muy de la antigua escuela, salvan damas en apuros, piropos recatados, besos en la mano...Un hombre de seguridad llega y se disculpa por interrumpir le dice algo al oído y le responde que enseguida va a dar con él.

–Bellísima, me tengo que ir, pero antes, me podrías apuntar tu número de teléfono para podernos ver en otro momento-me dice tendiéndome un móvil de última generación desbloqueado.

Una vez se loapunto y le devuelvo el móvil me da un casto beso en los labios y me prometeque me llamara lo antes posible. De estos hombres ya no quedan.

Sibisse (pausado)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora