Capítulo 22:Yo te protegere

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Espero que les guste este capitulo, no olviden votar y comentar. Y si hay alguna falta de ortografía lo siento mucho!!!!
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Jason

Alec ha estado nervioso todo lo que quedaba de la semana, hoy es domingo y mañana llegará la hermana gemela de Vanessa.
Alec simplemente no sale de su cuarto, no deja que nadie lo vea, menos yo, y casi no come. En serio me está preocupando.

En este momento estoy regresando del comedor a su cuarto para llevarle una sopa caliente. Dicen que lo caliente relaja.

*Toc Toc* toco la puerta suavemente, pero no escucho ningún ruido.

-¿Alec? Soy yo, dejame pasar.-Solo se escucho un pequeño susurró "entra".

Lo primero que vi fue a Alec envuelto en unas cobijan con un lápiz y su libreta. Por unos momentos había olvidado que también el lunes entrega su trabajo.

-Te traje esto.-deje la comida en la mesilla de noche a lado de su cama.-¿Ya tienes todo preparado para mañana? Recuerda que tienes que entregar el trabajo.-

-Si, terminé algunas de las historias que deje a medias, pero aún me falta mi último poema y el estrés no me deja pensar.-se recosto, soltando un suspiro de frustración.

-Mejor deja un rato la libreta y come algo.-agarre el plato y se lo puse en frente.

El se sentó y me miro.
-No tengo hambre.-susurro molesto.

Le acerqué más el plato a la cara.
-No desayunaste, tienes que comer algo y no voy a aceptar un no por respuesta.-

El sólo me miro. Pero después de unos minutos agarró la cuchara y empezó a comer. Era muy difícil tratarlo cuando estaba de mal humor.

Me puse de tras de el es hice que se recargará en mi. Al principio el trato de evitarlo, pero luego cedió. Si que es testarudo.

-Ya, no tienes que ser tan testarudo conmigo.-

-Lo siento, pero lo de Vanessa me tiene vuelto loco.-

-Te entiendo, pero por favor come y al menos has tus necesidades básicas.-

Termino el plato de sopa que le traje y lo dejo en su mesilla de noche.
-Haré lo mejor que pueda, aunque me este muriendo de los nervios.-

-No hay nada de que preocuparse yo voy a estar ahí para apoyarte todo el tiempo.-El vuelve a recostarse sobre mi y lo abrazo nuevamente por la cintura.-Nunca te dejaré solo.-

-Gracias.-lo dijo correspondiendo a mi abrazo.

Estaba ya más relajado, casi durmiendose cuando se paro de un brinco de la cama y empezó a escribir en su libreta.
-Hey ¿Que haces?-Me puse un lado de el.

-Digamos que ya se sobre que escribir mi poema.-Yo sólo lo veía mover rápidamente el lápiz por el papel. ¿A esto se le llamara "inspiración inesperada"?

-¿Sobre qué se te ocurrió?-Me acerqué más para ver lo que escribía, pero el lo tapó con la mano.

-Eres mi compañero tienes que esperar a que termine.-

-¿Y no puedo ser un compañero con derechos?-Quería besarlo me estaba provocando y lo sabia, nuestros labios estaban a nada de el contacto, pero una mano se interpuso en nuestro beso.

-No, no puedes. Y por ahora nada de besos, que se me va la inspiración- No se si sentirme dolido por sus palabras o...-No te enfades, cuando termine podrás besarme todo lo que quieras, pero es que si ahora lo haces mi mente quedará en blanco por tu culpa.- Lo dijo con una de esas sonrisas que sabe que no puedo resistirme.

A través de historias y poemas Donde viven las historias. Descúbrelo ahora