te invito una sopaipilla × kookmin

04

— ¿Cuál de ellas es tu novia?

Habíamos llegado hace diez minutos al colegio de minas y este ya estaba rodeado de cabra chicas, para él. La Paula con la Jesica lo miraban con cara de asopas y la Jose ya lo tenía abrazado.

— No, yo estoy soltero.

El realidad, no me interesaba ninguna mina y no me hacía problema por eso. No quería una relación, andaba en la pura onda de enganches piolas y la libertad. Tenía 15 añitos, una guagua.

— Si el Kook es más pelao. — Habló la Jesica. Tenía el pelo rubio y bien largo, hasta como la cintura y siempre se le formaban rulitos en las puntas. Ojos cafés, tez blanca y muchas pecas. Un angelito, pero era peor que yo. — A la primera se arranca.

— Pa' que po. Si una vez tuve polola y me cagaron. — Fue una muy penosa historia.

Al rato apareció la Marcia, la que me caía más bien. Era super simpática conmigo y nunca se pasó rollos, se supone. Le gustaba el kpop, así que me mostraba las canciones nuevas y, aveces, los pasos más importantes o "nuevos".

— ¿Qué huea' estai haciendo acá? — Siempre tan tierna. Un amor.

La Marcia era muy diferente a la Jesica. Tenía el pelo corto y algo maltratado debido a que se lo pasa tiñendo. No tenía pecas y sus ojos eran lo que más resaltaba al ser muy grandes. Labios finos, al igual que la nariz. Alta y muy delgada, ya que tomaba clases de baile y eso era lo que hacia la mayoria del día.

— Traje un amigo, te vai' a morir.

Le apunté al JiMin y, de verdad, esta hueona se puso a gritar. Fue corriendo a su lado y se quedó mirándolo caleta de rato, peor que cuando me conoció a mi. Lo vi algo incómodo, así que me acerqué para salvarlo.

— Hola, me llamo JiMin.

Estaba a punto de llamar a urgencias, la Marcia estaba convulsionando.

— Es demasiado lindo, hueón.

Iba a soltar un "lo sé", pero me quedé callao'. En vola se pasaba cualquier rollo y ya tenía suficientes con los que yo tenía en mi cabeza.

— Es mayor que tú, asi que anda superándolo.

— No pareciera.

— Va en cuarto.

— Media huea'.

Aveces me hartaba cuando se ponía así, pero ahora como que se me estaba estrujando la guata. Lo único que quería era sacar a JiMin de ahí rápido. Lo volvería a traer cuando se calmaran, si es que.

Mi historia con las mujeres siempre había sido rara. Al principio les tenía cualquier miedo, pero gracias al Padilla — mi maestro — les perdí el temor cuando caché que se interesaban en mi. Ahora igual algunas me dan cuco, pero es cuando son muy fuera de mi alcance.

Mi primera y única polola me cagó. Dijo que lo había hecho porque yo era muy cabrochico y se estaba aburriendo. Era mayor que yo, así que obviamente me iba a encontrar pendejo. No me fui en la emo — aunque siempre he sido medio sad — porque no fue mi culpa y me quiero mucho.

Estuvimos como media hora y después nos fuimos juntos al paradero. La micro pasó rapidito y evité mirarle otra cosa que no fuera la cara todo el camino. Igual sus ojitos son muy atrayentes, cuando sonríe se forman dos líneas. Es muy lindo.

— JungKook — Me llamó mientras tiraba de la manga de mi camisa — gracias por llevarme a conocer gente y ser amigo.

— De nada, JiMin.

¿Es normal querer abrazar, con tantas ganas, a una persona que conociste hace menos de una semana?

Capítulo kk.
Tengo que meter relleno antes de lo weno😎
Gracias por leer.