Él apareció cuando menos lo esperábamos...
...Un único ataque para distraernos de su verdadero propósito.
Un segundo y un par de susurros...
...Eso fue lo único que necesite para perder el control.
Nadie imagino lo que después pasaría...
...
Mire a los lados, pero todo lo que me rodeaba era blanco. Camine varios minutos buscando cualquier otra cosa, hasta que poco a poco las paredes comenzaron a cobrar formas y colores.
Estaba en el gremio.
Mi cuerpo comenzó a moverse solo y se dirigía hacia las puertas, donde todos parecían esperarme. Mi cuerpo los ignoro a todos y solo se centro en encontrar a una única persona. Al verla camine hacia ella, y antes de que pudiese defenderse la tenia agarrada del cuello con fuerza. Podía ver como poco a poco perdía el aire, y como sus ojos se iban cerrando.
-Vas a morir Lucy.- me escuche susurrar mientras aumentaba el agarre de su cuello.
Y entonces la vi cerrar los ojos por completo.
*** *** ***
-¡Noooo!- me desperté sobresaltado y respirando agitadamente.
-¿QuéocurreNatsu?- sentí su mano apoyada en mi hombro, y su mirada preocupada.
-No es nada Luce.- susurre intentando normalizar mi respiración.- Perdona por despertarte.
-A sido una pesadilla ¿Verdad?- pregunto seria.
-...Si.- suspire derrotado.- Pero no ha sido nada importante.- ella asintió.
Sabia que mis palabras no la habían dejado tranquila, por lo que la abrace con fuerza y la acosté junto a mí. Ella me respondió al abrazo, y diez minutos después estaba durmiendo de nuevo.
*** *** ***
A la mañana siguiente el ambiente estaba bastante tenso. Podía notar la preocupación de Luce desde lejos, y yo estaba tan metido en mis recuerdos que era incapaz de intentar animarla.
-¡Papa ya estoy listo!- Haru entro a la cocina con una mochila a su espalda.
-Muy bien enano.- le sonreí con cariño.- Desayuna y nos pondremos en marcha.- él asintió y obedeció de inmediato.
Vi salir a Luce de la cocina a paso rápido, y sabiendo que no podía dejar las cosas de ese modo suspire y salí de la cocina dispuesto ha hablar con ella. Y no me costo mucho por que la encontré sentada en el sillón, con los codos apoyados en las rodillas y la cara enterrada en sus manos. Me coloque frente a ella y me puede rodillas.
-Luce.- al escuchar mi susurro alzo la cabeza y la mire a los ojos.
Estaba llorando.
-No es nada, solo es que estoy un poco sensible.- dijo rápidamente mientras se quitaba las lágrimas y me apartaba la mirada.
-No es necesario que escondas tus lagrimas Luce.- cogí su cara con ambas manos y la obligue a mirarme.- Ni tampoco tu preocupación por mi.
-Natsu...- nuevas lágrimas comenzaron a caer.
-Gracias por preocuparte por mi.- susurre acercándome a ella para besarla.- Estaré bien.
-Hacia meses que no tenias pesadillas.- se lamento.- Y anoche...
-Eso fue por estar recordando.
-Entonces... ¿No será mejor no recordad?- coloco una mano en mi mejilla.- Si recordad te hace daño... es mejor que lo guardes.
-Eso seria continuar huyendo Luce.- le dije serio.- No puedo seguir huyendo de mis recuerdos por siempre.
-Natsu.- se lanzo a mis brazos y me rodeo con fuerza enterrando la cabeza en mi cuello.
-Es hora de que supere el pasado y pierda la culpa.- apreté mi abrazo.- ¿O no eres tu la que siempre dice que tengo que perdonarme?
-...Si.- susurro en mi cuello.
-Pues eso es lo que are.- le dije.- Estaré bien.
-Vale.- se separo de mí y vi como sonreía.
-Regresare a casa.- termine por decir antes de darle un beso. Ella rodeo mi cuello con ambos brazos y me devolvió el beso.
-¡Papa!- escuchamos gritar. Ambos nos separamos riendo.- ¡Ya desayune!- Haru entro al comedor seguido de Happy.
-Pues vámonos.- dije riendo.- La misión nos espera.
-¡Si!- grito entusiasmado.
-Protege a Luce Happy.- dije acariciándolo en la oreja.
-¡Aye!- respondió sonriendo entusiasmado.
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-Regresaremos en unos días.- le dije a Luce abrazándola.- Cuídate.- le di un ultimo beso y salí de la casa con Haru a mi lado.
*** *** ***
-Papa tienes que seguir con la historia.- me recordó Haru cuando llevábamos varias horas caminando.
-Esta bien.- suspire sonriendo.- ¿Por donde nos quedamos?
-Mama te llevo a casa.- dijo rápidamente.- ¿Qué paso después de eso?
-Que todo comenzó a torcerse.- dije con tristeza. Él me miro confundido, pero se mantuvo callado para que yo pudiese continuar hablando.