Comienzos

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Hulaa cachorros. aquí les dejo el capitulo. a Leer



Aquella mañana el frío era muy insoportable debido a que en el lugar donde se encontraban estaba, no solo en el bosque, sino que también bajo tierra hacia que el frío se sintiera mucho más. En el comedor todos se encontraban desayunando y repasando algunas cosas.

–Bien... –Hablo el Zetsu mientras leía unos documentos–, he revisado la lista del salón y los que estarán con Menma serán: Naruto, Yahiko, Shikamaru, Konan, y Sakura. En el salón de Uchiha Sasuke estará: Hinata, Hidan y Sasori. En el salón de Uchiha Itachi estarán Deidara y Kakuzu. Por ahora no se ha hecho modificaciones en la lista. Los que no estén con Naruto tienen la tarea de cuidar, con moderación claro está, a la familia de Madara y por supuesto, la de él. Comenzaran clases en una o dos semanas cuando mucho...

–Me siento mal de saber que Kakashi y Kisame no estarán con nosotros –Opino Hinata un poco triste

–No tienes que ponerte así –le animo Kisame–, a nosotros nos toca la universidad. Es cierto que hay cosas que debemos hacer pero no hay que dejar nuestro futuro de lado así que esfuérzate en clases

La peli-morado le devolvió la sonrisa

–Muy bien mocosos –Hablo Madara. Este se puso de pie y encendió una gran pantalla que había en la sala–, como ven aquí -Señalo a un punto en específico de la pantalla–, los planes están hechos tal cual. Tanto Minato como Fugaku y Mikoto recibirán un aviso de trabajo y estoy 100% seguro de que aceptaran... –la última palabra lo menciono pensando en Naruto. Ya sabía que este haría algo para que su padre aceptara–, debemos movernos en todo este tiempo que tenemos libre; Se realizara un baile donde asistirán muchas personas importantes, en la cual los Uchihas y Uzumaki estarán invitados. Obito y yo asistiremos y nos haremos cargo de unas cosas.

–Bueno –dijo de pronto Shikamaru–, ya que tenemos una semana libre debemos continuar con nuestras investigaciones, sabemos que el seguidor de Orochimaru vendrá antes para poder investigar no solo a los Uchiha sino también a los Namikaze, y para ello...

-Debemos hacer que la gente los reconozca y los vean importantes para que se les haga difícil ponerles una mano encima –Completo Kakuzu.

–Bueno... –Dijo Sakura, por fin uniéndose a la conversación–, que sean buscados o no, no es mi problema, ellos merecen una mejor vida.




El aroma que se esparcía por aquella pequeña casa era muy suave y dulce. El olor a miel se mezclaba con el chocolate de una manera increíble, atrayendo a un rubio pelo largo y uno corto. Ambos se distrajeron de sus labores para dirigirse a la cocina y observaron a un rubio mayor con un delantal blanco que estaba depositando en un gran tazón, galletas de chocolates y en una jarra leche con miel.

–¡Luce delicioso papá! –Exclamo un rubio justo igual a él, aunque con una triste mirada–, pero ¿está bien que cocines galletas? No podemos permitirnos este tipo de lujos.

–Está bien Menma –le sonrío su padre mientras veía a sus hijos comer– necesitamos de vez en cuando esto, también estoy contento de que obtuvieran becas para la mejor academia de Japón. Estoy seguro de que ustedes serán muy exitosos

–Ya me voy –Anuncio Deidara después de comerse otra galleta. Estaba por darse la vuelta cuando fue tomado por la muñeca, alzo la vista hacía su padre que acerco su mano y echo su larga melena hacía atrás, dejando el cuello de esté al descubierto–, q-que...

Jugando a las escondidasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora