Capítulo 15

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Me separo de Clarisse y le sonrío con tristeza, volteo la mirada y veo a Matthew saliendo por las puertas en las que anteriormente habían ingresado a Tamara.

- Buenas noches a todos - nos saluda a los presentes junto con un asentimiento de cabeza - Les informo que Tamara ya está lista para dar a luz así que Señor Colton ¿desea entrar a acompañarla?

- ¡Claro que sí! - le contesto mientras me coloco de pie rápidamente.

- Entonces sígame - dice antes de despedirse y decir que estarán informando cualquier novedad.

Entramos y una enfermera se me acerca pidiéndome el favor que me coloque una bata azul junto con un gorro, una vez estoy vestido con eso me dejan entrar a la sala de partos donde puedo ver tanto a Ethan como a Matthew junto con tres enfermeras más; también veo una camilla y en ésta está Tamara, cuando la veo suelto un suspiro al ver que está bien, me acerco a ella y le cojo la mano, ella voltea a verme y me regala una hermosa sonrisa, ella está sudando y me aprieta la mano.

- No puedo, no puedo Colton - dice mientras me aprieta la mano y cierra los ojos por unos segundos.

- Claro que si puedes Tami, eres la mujer más fuerte que he podido conocer - le digo mientras con la otra mano le acaricio la cara.

- Tamara necesito que empieces a pujar, ya es hora de que tus hijos conozcan este mundo - dice Ethan y veo como mi Tamara comienza a pujar al tiempo que me aprieta la mano - Ahora respira y vuelve a pujar - Tamara hace lo que el doctor le pide y de un momento a otro escucho el llanto de un bebé - Es un niño - dice mientras pasa a Adam a una de las enfermeras.

- El niño nació a las once y cuarenta y cinco de la noche - alcanzo a escuchar que dice una de las enfermeras mientras otra anota y comienzan a limpiar al bebé.

- Muy bien Tamara necesito que respires y trates de relajarte - escucho que dice Ethan a lo lejos, aunque realmente no le pongo cuidado a él sino a mi mujer.

- Tami, amor ¿cómo te sientes? - le pregunto un poco preocupado por la forma en la que respira.

- Estoy cansada, Colton no puedo, perdón

- Shhh shhh amor, yo sé que puedes, eres una mujer muy fuerte

- No lo entiendes Colton - hace una pausa y me aprieta de nuevo la mano - Estoy cansada de luchar.

- Si entiendo amor, lo entiendo completamente todo, no vas a tener que luchar sola, nosotros vamos a luchar juntos, a ti no te va a pasar nada - le digo mientras beso su frente y se me escapa una lagrima que logro limpiar antes de que ella se dé cuenta.

- Tamara vas a volver a pujar, es hora de que tu hermosa hija nazca

Mientras Tamara puja puedo ver como Matthew revisa unos monitores y le dice algo a una de las enfermeras.

- Así es Tamara, sigue pujando, ya casi terminamos - sigue diciendo Ethan y siento como Tamara me vuelve a apretar la mano, aunque esta vez con menos fuerza.

- Tamara, dale amor, tu puedes - le digo preocupado y besando su mano.

- Perdóname Colton, perdóname por no luchar - me dice mirándome a los ojos mientras estos se cierran.

- Tamara abre los ojos amor, no me hagas esto, no les hagas esto a tus hijos - le digo y le apretó suavemente la mano, ella abre los ojos y me sonríe - Eso es amor, tu puedes.

- Vamos Tamara, necesito que pujes una última vez - pide Ethan

Tamara hace lo que el doctor le pide y se escucha el llanto de mi bebé; todo se vuelve confuso y pasa muy rápido, escucho como Tamara me dice 'te amo' y deja de apretar su mano, comienzo a llamarla, pero ella no responde, también puedo escuchar como Matthew comienza a dar órdenes a las enfermeras y una de ellas se me acerca y me saca de la sala.

- Tamara no te puedes ir, no todavía, ¡no cuando aún te necesito! - sollozo arrodillado frente a la puerta que me separa de Tamara, siento unos brazos que tratan de levantarme, pero yo me suelto y al tiempo que me quito el horrible gorro escucho como un grito desgarrador sale de mi garganta.

No sé cómo logran calmarme, pero cuando vuelvo a estar calmado me doy cuenta que estoy sentado de nuevo en la silla plástica esperando a que algún doctor o enfermera me dé una noticia de Tamara, después de un buen rato recuerdo una cosa...

- ¿Qué hora es? - le pregunto a mi mamá que se encuentra a mi lado

- Es la una de la mañana - me responde al tiempo que dos enfermeras salen cargando a mis hijos.

Me levanto y voy directamente a ellas quienes me sonríen y me pasan a mis hijos con mucho cuidado.

- ¡Hola Adam! ¡Hola Ariadna! Bienvenidos a este mundo, yo soy su papá - logro decir mientras dos lagrimas se deslizan por mis ojos, y sé que una de ellas es de felicidad por tener a mis hijos aquí mientras la otra es de miedo de perder a Tamara - Es bueno que estén aquí con migo, aunque sería mejor si estuviéramos con su mamá para así poder decirle feliz cumpleaños, así como lo oyen, hoy su mamá cumple 26 años - levanto la mirada y veo que las enfermeras siguen frente a mí, aunque están llorando mientras me miran - Cuanto tiempo puedo estar con mis hijos - les pregunto.

- No mucho, realmente los teníamos que llevar a la sala de recién nacidos, pero decidimos que pasar a saludar al papá no era malo - me sonríen y me indican que ya se los tienen que llevar.

- Muy bien, ya nos veremos otra vez mi princesa - le doy un beso en la frente a Ariadna - Y tú campeón ya jugaremos más tarde - también le doy un beso en la frente y las enfermeras los vuelven a cargar para llevárselos.

- Feliz cumpleaños amor - susurro mirando hacia la puerta en la que se encuentra Tamara.

Me desperté en el momento en el que mi mamá comenzó a sacudirme, una vez me levanté vi el reloj de la pared y decía que eran casi las cuatro de la mañana, vi a los presentes y me di cuenta que el doctor Matthew me estaba mirando fijamente, me acerqué y pregunté por Tamara.

- En el momento en el que la niña nació, se presentaron ciertas complicaciones con el parto, como una hemorragia la cual logramos controlar rápidamente, sin embargo, a causa de que ella tiene leucemia sus defensas están muy bajas y más aún después de un parto de mellizos, lo cual generó que mientras su cuerpo trataba de recuperarse de la hemorragia que sufrió, ella quedara en estado de coma - vi que el bajaba la mirada y tragaba duro - Que entrara en coma podía ser bueno para que su cuerpo se recuperara, sin embargo sufrió un paro cardiaco y ella falleció - lo último lo dijo mirándome fijamente a los ojos.

- Tamara está muerta - susurre antes de caer de rodillas al piso.

¿FIN?


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