Idea (Ziall)

Capítulo 4.

Sencillamente no podía concebir que alguien estuviera llamando a esas horas de la noche, sin embargo, no tenía mucho que reclamar; por dormir siesta durante la tarde había perdido todo el sueño que debería tener en la noche y estaba dedicando esas horas de insomnio, para completar un reporte de historia que había dejado inconcluso.

Algo contrariado, caminó hasta su mesita de noche, tomó el móvil que vibraba incesantemente sobre ella y sin mirar quien llamaba atendió con un cortante "¿hola?" que fue respondido por una profunda voz. Su cuerpo se tensó. Reconocería esa voz hasta debajo del agua.

- Niall – sollozó la otra persona – explotó la bomba.

- ¿Zayn? – La voz de Niall se tornó suplicante - ¿A que te refieres? – preguntó con temor de lo que el moreno pudiera responderle.

- Mi mamá – sollozo – mi mamá tiene un amante.

Esa última oración, remitió a Niall a algunas semanas atrás. Como cada fin de semana en que su padre se iba a trabajar la tierra en su terreno, Zayn se había ido a dormir a la casa Horan. Fue en una de estas visitas en que, cansado de algunas cosas, abrió su corazón y le contó al rubio sus pesares, sus temores y la gran sospecha que le daba vueltas en la cabeza. Le contó del extraño comportamiento de su madre, las llamadas, la forma en que colgaba el teléfono cada vez que él aparecía en su habitación, los mensajes, las horas en que se ausentaba de la casa. Todo cuadraba y esa noche, los peores temores de Zayn se habían confirmado; su madre tenía un amante y cansada de todo, se lo había enrostrado al padre del moreno mientras sostenían una de sus habituales peleas.

- No sé qué hacer – volvió a llorar Zayn, sacando a Niall de sus pensamientos.

- ¿Cómo está tu padre? – indagó el castaño

- Destrozado.

A pesar de que no conocía al resto de la familia de su amigo, Niall se pudo hacer una imagen de lo que ocurría y tembló. Su corazón se aceleró al pensar en un Zayn vulnerable y ante cada sollozo del moreno, silenciosas lágrimas rodaban también por su mejilla.

- ¿Quieres venir a mi casa? – sugirió el rubio

- No... por ahora – suspiro – creo que debo quedarme aquí.

- Entiendo.

- Pero quiero verte

El alma de Niall saltó dentro de él y entre toda la tragedia, no pudo evitar sonreír.

- ¿Tienes tiempo el martes? – concluyó Zayn, aguardando la respuesta de su amigo.

- Claro.

- Entonces nos vemos ese día... - a través de la línea se escuchó como tomaba aire – gracias Niall.

- Zayn.

- ¿Si?

- Te quiero.

Estás dos palabras golpearon a Zayn

- Y yo te quiero a ti. Gracias por estar. Adiós

- Adiós – repitió Niall, colgando.

Se arrojó sobre la cama tratando de discernir qué era lo que ocurría en su interior. Pena y alegría. Un mar de pensamientos y sentimientos se mezclaban en su ser, tantas emociones hacían que el estómago se le juntara con el alma y suspirando profundamente, una palabra escapó de sus labios – Agridulce – murmuró el rubio, catalogando por fin, la conversación que acababa de tener con Zayn.

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nota: no me pude resistir con el gift :v