Marvel Christmas Calendar

The Babysitter Soldier [Bucky ft Spiderman]

Etiquetas: Humor absurdo
Parejas: Stucky/Stanner. Science Family.
Resumen: Peter necesita consejos, pero al único que tiene a mano es a Bucky. Su tío (y ahora niñero) Bucky. Peter está aburrido y Bucky... Él solo quiere que el chico deje de hablar.

Decir que estaba preocupado era quedarse corto. Estaba aterrado. Sabia que era una mala idea, no, una pésima idea. Y él sabía de malas ideas, había hecho muchas estupideces, y había convivido con Steve durante mucho tiempo. Eso te hace un experto en malas ideas. Debería haberse negado, debería haber negociado con Steve. En ese momento parecía más atractiva la idea de dispararle a terroristas... Debería haber aceptado esa invitación de Nat a la fiesta de navidad cuando tuvo oportunidad.

Dios, ahí estaba la puerta. Sólo tenía que golpear con los nudillos. Los de su mano humana. Después de desprender y romper más de una docena, había aprendido esa lección.

Escuchó voces en el interior, pasos, movimiento ajetreado. Cambió el peso de un pie a otro a causa del nerviosismo. Seguía siendo una mala idea estar ahí. ¿A qué clase de persona se le ocurría confiarle una tarea como esa? A Bruce, por supuesto. ¿Y él por qué había aceptado? Porque fue amenzado con quedarse un mes sin sexo si se rehusaba. Maldito Steve.

La puerta se abrió.

— Barnes —ahí estaba Tony. Hizo un gesto como si sintiera dolor físico. Bucky entendía, él estaba igual—. Quiero dejar claro que...

— ¿Esto es una pésima idea y no lo harías si no estuvieses forzado por las circunstancias? —completó por él.

— Eso y que...

— ¿Harás que todos paguen caro el haber estado convenientemente ocupados y haberse negado esta noche?

Tony lo miró, tenía los labios separados como si fuese a hablar, pero no dijo nada. Asintió y se hizo a un lado para dejarle paso.

El piso de Stark era muy diferente al que él compartía con Steve. No estaba sorprendido, la verdad. Ya se esperaba el lujo y la extravagancia, pero aún así era muy impresionante. Se sentía un poco fuera de lugar, incómodo estando ambos de pie en medio de la sala sin decir nada, ambos lamentando la situación. Sí, bueno, al menos agradecía que Bruce apareciera antes de que todo terminase siendo aún peor.

— James —saludó con amabilidad, una sonrisa en su rostro. Iba con esmoquin, igual que Tony, pero en Bruce era algo nuevo. Se veia raro, pero bien. Evitó verlo demasiado, no necesitaba ganar más puntos negativos con Tony, gracias—. Gracias por aceptar venir, de verdad.

Si, bueno, no es como si le hubiesen dejado opción. Siete décadas sin sexo habían sido suficientes como para verse sometido a sumarle un mes extra por rehusarse a un pequeño favor.

— No hay problema, estaremos bien.

— Eso espero —intervino Tony—. He decidido confiar en ti.

Una pésima decisión. Terrible en serio. Pero bueno, Tony Stark no se caracterizaba por sus buenas decisiones.

— Los números de emergencia están anotados en el refrigerador, hay comida en las alacenas, y si realmente es importante también están nuestros números —enumeró Bruce—. No tienes que hacer mucho, sólo evita que se meta en problemas y no dejes que salga de la torre.

Bien, eso parecía sencillo. Pudo matar a un presidente... dos, ¿tres? Demonios, había matado a más presidentes de los que había elegido de forma electoral... Como sea, en comparación a eso, la tarea era pan comido.

— Bien, puedo hacerlo —dijo con convicción. No trataba de convencer al matrimonio de científicos, sino a si mismo.

— Bien —Tony suspiró. No parecía convencido de irse— Bien...