Aprendí a decir que no

Día 8

Hola guardián,
Esta época del año me encanta, es la mejor manera de describir unión, reencuentro y reflexión... Si, claramente estamos en invierno, celebrando la navidad, también año nuevo y no se, la vida me ha dado tantos giros inesperados, que ya no se que decir, ni que pensar, incluso ni siquiera que hacer...
Será mejor que empiece a decirte todo lo que ha pasado en las últimas semanas...
Para empezar, agradezco que sean vacaciones, porque realmente me hacían falta, liberarme de tanta presión, era más que necesario. ;) El único problema de que sean vacaciones y que ya no vaya a la escuela es que bueno... Dylan ya no me habla desde aquella última vez que salimos a comer, ¿aún lo recuerdas?
Para mí ha sido bastante difícil, al siguiente día, fui a saludarlo y el solo se levantó y se fue, no tengo idea de qué pasó, si dije algo malo, si hice algo que le molesto, realmente no lo sé. Además de que le he mandado infinidad de mensajes, sigue sin responderlos, le dije que estoy muy preocupada, que tan solo con que me dijera algo, lo que fuera, estaría bien... ¡pero no se que le pasa!
También hable con Ángeles, pidiéndole un consejo, realmente estaba desesperada y me dijo que lo mejor que podía hacer era dejarlo tranquilo durante un tiempo, que estaba segura de que las cosas se acomodarían solas... Yo le creo... además de que es mi mejor amiga, es mi mejor consejera y siempre ha estado ahí para mi y yo para ella, en las buenas y en las malas... Precisamente, se lo pregunté el día que nos encontramos, no tiene mucho, fuimos al parque que está cerca de la escuela y anduvimos en bicicleta un buen rato, y antes de regresar a casa, compramos un helado, lo comimos mientras caminábamos en silencio; nos la pasamos bastante bien.
Ah~ tantos sentimientos encontrados... esto es precisamente a lo que me refería.
Pasemos a otra cosa...mmm... claro, empecé hablándote de navidad y Año Nuevo, pero no entre en detalle, ¿quieres saber cómo me la pase?
Bueno, la respuesta es simple: INCREÍBLE. No lo digo por la comida o por los regalos que hubo en el intercambio, lo digo por... mi familia, a pesar de que casi nunca los veo y que no suelo platicar e interactuar con gente, bueno, son personas admirables (se que había dicho que no soy muy afectiva con mi familia, pero creo que después de esto, mi perspectiva puede cambiar un poco) mis tíos, contaron anécdotas impresionantes y algunas de ellas nos hicieron reír... tanto en navidad como en Año Nuevo, fue memorable compartir estas fiestas con ellos...
La mayoría de las veces mi papá decide que pasemos estas fiestas en una casa que tenemos cerca de la playa, y te voy a ser sincera, NO ME GUSTA IR. Podrás preguntarte ¿a quién en este planeta no le gusta ir a la playa? Y bueno, a pesar de que seguramente no soy la única, como ya lo dije, esta época se trata de unión y estar cerca de los tuyos. Y bueno, por fin papá accedió a que nos quedáramos, aunque no se veía muy contento durante la cena, no hablo más que con mamá y no comió casi nada... Eso realmente fue patético, pero no pude, ni puedo, ni podré decir nada, ¿por qué? PORQUE ES MI PADRE.
Ahora que mencione a mamá, bueno, ya está mejor de salud, salió del hospital, después de tres días, afortunadamente el bebé, está muy bien y la próxima vez que vayan al médico, por fin sabrán si es niña o niño... Hablando de niños... creo que te tengo que me tengo que ir, mamá me dejo a cargo (otra vez) de David y justo empezó a llorar, entonces tengo que ver que ocurre...
Te contaré más anécdotas, pero... luego
Siempre tuya,
Jess