Intenté separarme de el pero no pude, me tenía sujeta por la cintura.
-De aquí no te vas ratona.- Me dijo mientras besaba mi cuello.
-Para, nos van a ver.
Le di un último beso y me fui, sentí como alguien me silbaba, me giré y vi que era el, le saqué la lengua y me guiñó un ojo.
Llegué a mi casa y vi a mi madre con mi padre sentados en el sofá. No sabía que era esto pero no me gustaba nada.
-Hola.-Saludé a mi padre con dos besos y un abrazo ya que no lo veía desde que nos fuimos de Berlín.
-Hija, te vienes a Berlín conmigo.-Me dijo.
Miré a mi madre vi que estaba llorando y empecé a llorar.
-Yo no me voy.
-Hija tienes que...
-No me voy a ir, eso es un infierno y no quiero pasar por lo mismo.-Grité interrumpiendo sus palabras.
-Nos vamos pasado mañana.-Dijo serio y salió por la puerta.
No paraba de llorar, no me quería separar de Zayn y mucho menos de mi madre.
Llamé a Zayn llorando se lo expliqué todo, notaba su voz entre cortada, sabía que estaba a punto de llorar y me fastidiaba que fuera por mi culpa.
-¿Cuando te vas?-preguntó.
-Pasado mañana.
-¿El día de mi cumpleaños?
-Si.
De que terminé de hablar con el mi fui a dormir, no tenía ganas de nada, mi madre me habia intentado consolar pero no sirvió de nada, voy a pasar por lo mismo otra vez sólo que esta vez no estará ella para cuidarme.
Al día siguiente me desperté temprano, mi madre estaba haciendo su desayuno ya que se tenía que ir al trabajo.
Me estaba peinando un poco cuando llamaron a la puerta, bajé a abrir, de que vi a Zayn me lancé sobre el.
-No te vayas.
-Lo siento pero no puedo hacer nada.
Me bajé de sus brazos y lo invité a pasar. Me fui a vestir ya que como me acababa de levantar estaba en pijama.
-Bonita habitación.
Me giré y vi a Zayn recostado a la puerta. Le sonreí y pasó hacia dentro, me agarró de la cintura pegandome todo lo que pudo a el, me besó con fuerza hasta quedarnos sin aire, me subí en el y mordí su labio inferior, me agarró más fuerte del culo y yo me subí un poco más arriba, me tiró en la cama, le quité la camiseta y el me quitó a mi la mía, comenzó a besar mi cuello, yo con mi dedo recorrí cada parte de su pecho, toqué sus abdominales y llegué al cinturón, se lo quité y le bajé su pantalón, llegué a sus boxers y el se los quitó.
-No sabía que tenías eso ahí.-Bromeé.
-¿Te lo esperabas de otra manera o qué?-rió.
El también me quitó mi pantalón y mis bragas, no estaba nada nerviosa, era mi primera vez y no tenía miedo, sabía que no iba a pasarme nada por hacerlo. Enseguida noté algo en mi, que aparecía y desaparecía en mi interior. De que acabamos se tumbó a mi lado.
-Que ¿te ha gustado?-Se incorporó para mirarme.
-Me ha encantado.
Nos vestimos y bajamos a desayunar. Al rato fuimos a dar un paseo, lo notaba triste y eso me entristecía a mi.
-No te preocupes, te llamaré todos los días.-Dije parandome en seco.
-No me preocupa eso, lo que me preocupa es que vuelvas a pasar por todo otra vez.-Se puso delante mia.
-No me harán daño, se que a miles de kilómetros os tengo a ti y a mi madre y eso me basta.
-Prometeme que no lo harás otra vez.
-¿El qué?
-No te hagas daño.-Dijo cogiendo un mechón de pelo y entrandolo detrás de mi oreja.
Mierda. Zayn habia visto mis cortes, no sabia como explicarselo pero pasé por tanto que no me quedaba otra que hacerlo.
-Te lo prometo.-Lo besé.
El día se pasó rápido, fuimos a mi casa a hacer la maleta, mi madre hoy habia llegado más temprano. Se puso a hacer la cena.
-A ver ¿Me llevo todo o sólo lo imprescindible?
-Llévame a mi.
-Si pudiera te llevaría.-Lo besé.
Hicimos la maleta y bajamos a cenar, mi madre nos preguntó que si estabamos juntos, le dijimos la verdad aunque no le contamos que en "secreto".
-Ahora vuelvo.- Me levanté de la mesa y fui hacia mi habitación.
Le tenía un regalo a Zayn ya que no iba a estar en su cumpleaños se lo di antes.
-Este es tu regalo de cumpleaños.-Le dije.
-Oh muchas gracias.
Le habia comprado un cazadora negra de cuero y una pulsera que tenía una pieza de puzzle que yo tenía igual.
Al rato Zayn se fue, le pregunté que si vendría al aeropuerto a despedirme pero me dijo que no porque no le gustan las despedidas y verme ir le destrozaria. Nuestro último beso en un tiempo fue muy tierno, estuvo lleno de lágrimas, un último abrazo y adiós, Zayn se puso el gorro de su sudadera, se metió las manos en los bolsillos de su pantalón y se fue cabizbajo.
Al día siguiente vino mi padre a por mi y a por mi madre temprano.
-Papá ¿por qué me tengo que ir?
-No me gusta nada de este sitio.
-¿No te gusta Zayn verdad?
-No.
-Pero a mi si. Y no entiendo por qué me tienes que separar de el cuando el es todo lo que tengo junto a mi madre, el a estado conmigo desde que llegué, no te imaginas lo que me quiere, si piensas que es mala influencia te equivocas.- Le dije a mi padre llorando y el se calló.
En el aeropuerto me despedí de mi madre, estábamos llorando y nos abrazamos.
-Ten cuidado.-me dijo.
-Te quiero mamá.-La volví a abrazar.
Estábamos a punto de pasar por la puerta que nos llevaría a donde estaba el avión hacia Berlín cuando alguien gritó mi nombre, me giré y vi a Zayn al lado de mi madre, apoyado sobre sus rodillas, parecía algo cansado, miré a mi padre el que asintió con la cabeza. Salí corriendo hacia Zayn abrió sus brazos con una gran sonrisa para cogerme, salté a sus brazos y lo besé.
-Feliz cumpleaños-Le dije.
-Gracias. Te quiero.-Contestó.
Me bajé de sus brazos, vi que mi padre vino hacia nosotros con las dos maletas.
-Pequeña, quédate.-Me abrazó.
-Gracias papá, te quiero.
