La Casera Y El Inquilino

Capitulo 8

SORPREEEEESSSAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA, les dije que no se alejaran mucho ;)

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Capitulo 8

Ronald (Ron)

Si no llegábamos pronto al apartamento siento que me desplomare, tengo la increíble necesidad de abrazar a Yul, luego de que Bill hizo, solo quiero estar con ella, necesito estar con ella. Al menos ya me asegure que a Bill no le den ganas de volver a tocarla o acercarse a ella.

Después de que nos fuimos del apartamento, pusimos al tanto a Carl y a Josh, aunque John se había encargado anteriormente, yo les conté lo que había sucedido en el parque semanas atrás. Al momento en que Sam había recibido la llamada de Yul, había mandado a uno de sus hombres a seguirlo y vigilarlo. Todos somos ex compañeros de fuerza, servimos juntos, y permanecemos juntos. Sam tenia una compañía de seguridad y vigilancia, Carl y Josh aunque trabajan para el de ves en cuando, también se encargan de trabajos de protección personal, como guarda espaldas, son un dúo bastante peculiar, luego Jonathan y yo que somos pilotos.

Luego de explicar todo y planear como haríamos pagar a Bill, empieza la acción. Nos dirigimos a la casa de Bill, donde lo tenían vigilado, Sam nos proporciono el equipo necesario para mantenernos comunicados en todo momento, a pesar de que todos teníamos portación de armas y sabíamos cómo usarlas a la perfección, decidimos que no eran necesarias. Dividirnos y entrar a la propiedad sin ser vistos era el primer paso, a plena luz del día nos pudimos infiltrar en la casa sin ser vistos, y para la mala suerte de Bill, escogió el peor día para beber y no tener los sentidos bien estables. Lo encontramos viendo televisión, habían varias botellas de licores en el suelo y la mesa de centro era un asco. Sentí tanta repulsión que John tuvo que sostenerme para no arrojarme y golpearlo.

Carl y Josh se encargaron de dormirle con una llave al cuello, el muy idiota ni cuenta se dio de nosotros, lo cargamos y lo llevamos al sótano. Yul me había contado varias veces que lo mas que le dolía del divorcio había sido su casa, porque le encantaba. Mientras Sam vigilaba, Josh y Carl lo amararon y John se encargaba de que yo no lo matara.

Una hora después el idiota despertó, y estoy seguro que prefirió haberse quedado dormido. Al darse cuenta que tenia a cinco hombres enojados frente a el, se puso realmente pálido y se asombro al ver mi cara. Un poco de acción, los chicos se encargaron de hacer las preguntas, recibir respuestas y dar algunos golpes, mientras yo estaba recostado de la pared del fondo, lejos de el, como John me pidió. Los chicos lo prepararon bastante bien para mi turno de hablar, ya estaba llorando como bebé y yo no le había hecho nada.

-Escúchame bien Billy- dije imitando la voz de Natasha al decir su nombre.- Esto que acaba de pasar es solo una pequeña advertencia de lo que puede pasar si te vuelves a acercar, hablarle o atreverte a tocar a Yulian, por qué será lo último que hagas. Esta vez fueron ellos, porque sabían que yo no me controlaría, pero si hay una próxima, seré yo quien me haga cargo. Te matare Billy.- al ver su cara de miedo, sentí una gran satisfacción.- No, mejor aún, me encargare que todos sepan lo poco hombre que eres. Te juro por mi vida que vas a desear no haberla tocado nunca, sentirás asco de ti mismo al verte en el espejo, me entendiste.- No se atrevía a verme a los ojos, sostuve con fuerza su cabello, alzándolo para que me mirara.- ¿Me entendiste? Quiero oírlo.- le grite.

-Si... si lo entendí.

Salimos de la cosa como mismo habíamos entrado, sin que nadie se diera cuenta de nuestra visita. Cuando estábamos en el auto, devolvimos todo el equipo a Sam y pude ver mi teléfono, tenia llamadas de Yulian, Gloria y Bell, se que estaban preocupadas, también habían mensajes, estaba escuchando la conversación de los chicos, mientras leía los mensajes.