II

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Inicio del juego.

Chanyeol por instinto era posesivo. Desde que tiene memoria lo es. Y esta no era la excepción.

Cuando iba llegando a su último año de preparatoria en su Ferrari nuevo, fue cuando lo vio.

Al chico más hermoso que pudo haber visto en su maldita vida de mierda. Iba con pasos lentos y aburridos, con el uniforme incorrecto, llevaba el azul marino en lugar del verde esmeralda de mierda, eso llamo la atención de Chanyeol. Pero lo que logro tenerla al cien por siento fue su hermoso y redondo trasero.

Siempre pensó que aquel uniforme de la escuela a la que asistía era horrible, pero ese termino quedo atrás al ver a aquel muchacho con esos pantalones grises.

Uff, ¡El mejor uniforme en toda la escuela!

Colocó su auto del otro extremo en el estacionamiento, de donde el chico castaño paro su golf negro. Y lo siguió.

Mientras caminaba algo apartado de él para no ser notado, vio que muchos estudiantes que ya se encontraban ahí se quedaban viendo al chico, bueno más específico: su trasero. Y no los culpaba él mismo lo hizo también. Pero ahí es donde entra ese sentimiento de posesividad en él. El sentimiento se expandió por todo su pecho hasta convertirse en ira.

¿Por qué esos imbéciles veían algo que él vio primero?

No. Ellos no tenían el derecho. Así fue que se acercó a un grupo de chicos que no dejaba de verle el trasero al niño lindo de Chanyeol, mientras comentaban cosas sucias que podrían hacer con el, lo que hizo que le hirviera más la sangre al alto.

-¿Qué le ven a mi chico?

Hablo con voz suave, casi amenazante. Los chicos dieron un respingón del susto y se voltearon, y Chanyeol podía jurar que uno de ellos casi se caga en los pantalones al ver que era él quien les hablaba.

-Les he hecho una pregunta.- esta vez su voz fue mas fuerte y dura- ¿No van a responder?.

Cuando comenzó acercarse, uno de ellos habló por los demás.

-¿E-ese era tu chico?-Chanyeol asintió sonriendo de lado como un verdadero hijo de puta- Y-yo...¡digo! N-nosotros- se corrigió rápidamente cuando recibió un codazo de uno de sus amigos- No lo sabíamos. L-lo sentimos.

Chanyeol en un movimiento rápido lo agarró de su saco y lo estrello contra la pared.

-Nunca, escucha bien. NUNCA más vuelvas a mirarlo- susurro lo suficientemente alto para que sus demás amigos lo escucharan también, luego se volteo hacia ellos- ¿Les quedó claro?

No nada más los otros chicos asintieron como idiotas, si no también las demás personas que se encontraban ahí. Satisfecho soltó al pobre imbécil que tenía acorralado contra la pared y se fue a buscar al chico de lindo trasero, pero cuando lo encontró iba caminando con en idiota de Oh, lástima, ese tipo no le tenía miedo.

Tampoco Chanyeol le temía, pero la tía del tipo era su secretaria así que no quería meterse en problemas y perder un año más la preparatoria.

Antes de irse a su escondite para saltarse las clases escuchó la risa del chico.

Hermosa.













Acostado en el pasto, entre arbustos Chanyeol ya se estaba durmiendo, y distraídamente volteo su cabeza a la ventana de su salón. Desde su escondite podía ver perfectamente al niño bonito siendo regañado. Sonrió mentalmente por lo lindo que se veía avergonzado. Pero sonrió realmente cuando lo vio sentarse en donde él se sentaba, bueno al lado de este. Por esta ocación le sedería su lugar al lado de la ventana al chico

Cruel (ChanBaek/ M-preg) [PAUSADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora