Blood Of Roses

Capitulo 6 - Ya no estaba en este mundo...

No me dio tiempo de dejar la rosa en la mesita de la entrada, así que decidí llevármela.

Me encamine directo a la preparatoria. ¿Quien me la habrá dejado? ¿Se habran equivocado de casa? ¿Quien seria tan tonto para dejarme una rosa?

Un roce en mi mano me saco de mis pensamientos,me gire bruscamente y me encontré con aquellos hermosos ojos color gris con un brillo que antes no había visto.
-¿Te asuste?- pregunto en tono un poco burlón pero con ese tono cálido y con dulzura.
-Si-me límite a contestar,baje la mirada-Perdón.
-¿Perdón por que?- dijo sonriendo y con mueca de duda.
-Por asustarme- lo mire de re ojo y volví la vista al suelo.
-No tienes porque disculparte-me tomo de la barbilla, hizo que su mirada quedara con la mía, me regalo una sonrisa, fue deslizando su mirada por desde mi cara hacia mi mano en donde traía la rosa y su sonrisa crecio aún más.-Que bonita rosa- la tomo y la acerco un poco a su nariz-¿Quien te la dio?-arqueo una ceja y dirigió su mirada hacia mi por un momento para después regresar su mirada hacia la rosa.
-Si, es muy bonita- caminamos, mi mirada estaba clavada en el suelo observando cada uno de mis pasos evitando el no tropezar me con mis propios pies, subí lentamente la mira y pude observar su perfil mientras el miraba la delicada rosa en sus manos y como los rayos acariciaban su delicado rostro-Se han de haber equivocado, pues la nota no decía quien dejo la rosa.
-¿A que te refieres con que se equivocaron si eres la chica más bonita que he conocido?- frunció el seño.
Pare en seco cerca de un árbol y me recargue en él-No creo que nadie me deje a MI una rosa afuera de mi puerta, no soy...como dices bonita o algo así, soy todo un desastre de persona- me encogí de hombros.
-Te equivocas- aseguro su tono, yo lo mire confundida, bufo tiernamente-¿Quieres ir a la escuela o nos vamos por ahí a distraernos un rato?.
-Vamos a distraernos-la verdad no tenía ganas de ir a la escuela pues ¿Para que ir? si de todos modos casi todo el mundo en aquella estúpida escuela me molesta y se burla de mi- y al rato regresamos por tu hermano ¿No?- arque una ceja tratando de adivinar su respuesta.
-Claro, le mandaré mensaje a Asher para que nos espere a la salida y para que invente algo a los profesores acerca de nuestra inasistencia- me guiño un ojo y ladeo una sonrisa, saco su celular de su bolsillo y empezo a textear, termino de hacerlo bloqueo el celular y lo guardo, para después comenzar a caminar de nuevo.
Hablabamos cosas trilladas Alec y yo, no se pero me sentía protegida junto a el, como si no existiera lo demás del mundo, como si una tranquilidad invadiera mi alma...
Pasábamos por una calle llena de árboles, era otoño y las hojas color marrón rojizo caían al compas que el viento les marcaba.
Era ¿Perfecto?, si perfecto estar un rato con él, quedamos en silencio en lo que pasábamos debajo de los árboles, el viento rosando mis mejillas, las hojas callendo, totalmente tranquilo y relajante al igual que el silencio que había.
-No cumpliste tu promesa-lo mire desconcertada, vi que una de mis mangas y la tenía bastante arriba para dejar al descubierto mis heridas.
-Yo... -balbuce ¿que es esto que siento? mi corazón se aceleró, nunca antes lo había hecho ¿Que es esta sensación? siento como se me hiciera un nudo en el estómago.
-No importa, sabía que no lo ibas a hacer- bajo la mirada y sus rizos cayeron por encima de su frente evitando que viera sus ojos y lanzo una pequeña risa por lo bajo.
-Yo... no..-respire- yo no puedo dejar de hacerlo-Deje de mirarlo y dirigí mi mirada a lo mas espeso de un poco de la niebla que cubria el pasto y el tronco de los árboles de aquella calle.
-Lo se, cuando comienzas ya no puedes detenerte- Dirijo nuevamente mi mirada a su rostro y vi como su mirada se oscureció y estaba viendo en la misma dirección que yo miraba hace un momento hacia el fondo donde se encuentra aquel lago que en estas fechas el follaje comienza a cubrir sus aguas y comienza a cristalizarse, su gesto se volvio frío e indiferente- tienes muchas cosas porque hacerlo y yo no soy nadie para poder juzgarte, pero no me gusta que lo hagas. -Me tomo de las manos bruscamente ejerciendo un poco de presión en mis heridas y sus mangas de su chamarra subieron dejando ver una cicatrices elevadas parecidas a las mías pero ya con bastante tiempo mi mirada seguía clavada en sus heridas. El notó que las miraba y bajo de inmediato sus mangas soltando me la mano -Ya es tarde, será mejor que vayamos por Asher- ese tono frio pero además se notaba como tenía un nudo en su garganta, como si quisiera desahogar todo aquello que su alma a mantenido en secreto todo este tiempo, empezó a caminar y yo iba a atrás de el a cierta distancia para no incomodar lo- Camina a la par mía no te quedes atrás-me pareció más como si me estuviera dando una orden pero de inmediato corri con pequeños pasos la distancia que nos separaba me puse a su par, caminamos y caminamos pero nadie dijo nada hasta llegar a la entrada de la preparatoria.
-¡Hey! ¿donde estaban?- Asher se acerco a nosotros de manera inmediata.
-Fuimos a dar una vuelta pero ya vámonos.-su indiferencia seguia ahí.
-Ok, que linda rosa Ivie-dirigió su mirada a la rosa en mi mano- se parece a la que ayer compraste tu Ale...-Alec arqueo una ceja.
-Si las que compre ayer, para mamá-Asher asintió-Bueno ya vámonos.
Se alejaron sin decir una sola palabra, sin despedirse, lentamente iban alejándose en la calle,hasta perderlos de vista.
Empece a caminar hacia mi casa, sentí como me tomaron por el brazo, haciendo que girara.
-Hola hermosa- era Jack- ¿Y esa rosa?- dirigió su vista a mi mano.
-Ah....-balbuce- la dejaron afuera de mi puerta.
-¿Quien?
Me encogí de hombros- no lo se solo apareció en mi puerta esta mañana.
-Tirala-ordeno
-¿Que?-mi tono se elevo, con una mueca de indignación-¿Por que debería?
-¡Que la tires maldita sea!-Alzo sus manos al cielo haciéndolas caer a sus costados.
Entramos discutiendo a mi casa, se acercaba amenazadoramente sobre mi sin para de gritarme, llegamos al jardín trasero.
-¿Que significa una estúpida rosa, tonta?-nunca me había llamado así, no conteste.-¿Porque no contestas?
Estaba en la orilla de la alberca, me dio un pequeño empujón, resbale y cai adentro en la parte de las escaleras, me golpee con un escalón la cabeza y el no hizo nada por sacarme, el agua se empezo a tornar rojiza, y el ya no estaba, tenía que salir, ¿Pero porque salir? ¿No serían todos feliz si yo no estuviera?, deje que mi cuerpo cayera lentamente al fondo, sin luchar por seguir. Solo dejándome llevar, veía como las pequeñas burbujas de aire salian por mi boca, toque el fondo, y me quede ahí, total a nadie le intereso, todo se empezo a tornar borroso y sentía como mi estómago se llenaba lentamente de agua, cada vez mas rojiza el agua, hasta tornarse de color rosado un lindo y tierno color rosado.
Se escuchaban gritos diciendo mi nombre, sentí como las pequeña olas que se formaba acariciaban mi piel, pues alguien se metió al agua pero yo ya no estaba en este mundo.