One-shots 《Scorly》

Love me like you

Maratón Nochevieja 8/8

《 Sacada de: Potterfics 》
《 Autor/a: MajoNutella 》

Un beso.

Las mazmorras del colegio eran frías, pero eso lo hacia más a acogedor en un sentido espeluznante.

-Sabes que te amo, Lily-el chico la abrazó, suplicando sin palabras que se quedara. No iba a hacerlo, no podía hacerse eso a si misma.

Estar con él era caer bajo, o al menos eso parecía a sus ojos. No era ninguna arrastrada y no iba a permitir que nadie cambiase eso; ni siquiera Scorpius Malfoy.

-Otros pueden amarme más-sentenció Lily, fría. Sus palabras fueron como una puñalada al corazón del chico.

La pelirroja observó cada centímetro del lugar; por alguna razón los recuerdos iban y venían como pequeños flashes.

No entendía porque siquiera estaba ahí; esperando que él apareciese y se fijase en ella.

Ya era demasiado tarde, había cometido muchos errores.

-No era mi intención en realidad-Ahí estaba de nuevo la misma vieja excusa. Lily suspiró enfadada y dolida, ¿como era posible que con solo esa mirada ella lo rompiera por completo?

-No tienes que explicarme nada, Malfoy-El dolor brotaba de cada palabra que decía. Lo miró con desdén e intentó que las lagrimas no se le escapasen-Nosotros nunca fuimos nada-.

Se dio vuelta en la camilla de la enfermería, dándole la espalda

-Es que no entiendes, Potter-susurró Scorpius-Nosotros somos todo-

Scorpius caminó hacia el altar, el traje le sentaba a la perfección.

Sus ojos grises barrieron por el lugar a medida que avanzaba, buscando a la persona con la que realmente debería haber estado haciendo aquello.

Casarse le asustaba, y Rose no le daba la seguridad que Lily le brindaba.

Rose nunca iba a ser ella; pero estaba seguro que podía llegar a amarla con el tiempo. Estaba seguro de que ambos podían hacer que aquello funcionase.

La sangre le hervía, y los celos iban en aumento a causa de aquella escena. Se estaban besando justo en frente de sus narices.

Caminó hasta la pareja y empujó al chico con fuerza, provocando que se golpease contra la pared.

-Eres un idiota, Scorpius-Lily rodeó al rubio y corrió a socorrer al recién golpeado.

Scorpius gruñó por lo bajo, completamente enfadado. Claro que Lorcan Scarmander no pensaba quedarse de brazos cruzados, se tiró hacia el chico Malfoy y comenzó a golpearlo.

Los alumnos no tardaron en rodear a ambos rubios, mientras que la pelirroja intentaba separarlos.

-Desmaius-Y ambos cayeron dormidos.

Ahora era Rose quien caminaba hacia el altar, del brazo de su padre.

Estaba emocionada, eso se podía notar en cada una de sus facciones.

Lily deseó que Dominique estuviese allí, para no tener que atravesar todo eso sola. Sin embargo volar desde Francia embarazada era algo bastante complicado, y todos sabían que a Dominique no le agradaba demasiado la idea de aquella boda.

-Te amaba Scorpius, se que en algún momento lo hice-Lily lo observó desde el balcón de la mansión Potter.

-¿Y ahora?-Scorpius la observó, con las lagrimas cristalizandole los ojos-No puedes dejar de amar tan fácil, Lilu-

Lily negó con la cabeza, apretando los ojos con fuerza. Aquello era verdad, no podía.

-O quizás nunca te ame-mintió Lily, a la vez que se metía de nuevo a su habitación y cerraba las puertas del balcón.

Se levantó de su asiento, aunque sabia que la ceremonia apenas y habia comenzado. Todos la observaron.

La sonrisa de la señora Malfoy la alentó desde los primeros asientos, aquello parecia ser una locura.

Corrió hasta el altar y cogió a Scorpius de la mano.

Era un impulso idiota, un impulso del que no iba a arrepentirse nunca.

Salieron corriendo, hasta que a los dos les faltaba el aire y las respiraciones eran agitadas.

Pararon en el pequeño parque, aquel que habían recorrido tantas veces.

-Lily tu...-Scorpius la observó, anonadado, buscando las palabras que decir.

Y Lily rió-Ellos no pueden amarme como tú.