SEIS

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"Cuando por fin supimos que te andaba pasando... Todo empeoró. ¿No podías confiar?"





Los tres lo miraban exhaustos.

El moreno se encontraba pálido como la cera, sus ojos estaban rojos, los cual indicaba que había llorando. Su cabello se encontraba despeinado y transpirado. Tenía cierto olor extraño, y su ropa se encontraba totalmente sucia y manchada. Manchada por una sustancia realmente extraña.

Mangle fue la primera en reaccionar.

—¿Pero que demonios te ha pasado?— Exclamó totalmente desesperada, era extraño de ella, solía enojarse, pero nunca se alteraba.

Bon no entendía o tal vez quería creer que lo que pasaba no era cierto.

—¿Qué te pasó?— Quiso saber Joy.

Bonnie no decía nada, su mirada hablaba por él.

Bon seguía mudo.

No era el mejor momento para visitas, y menos suyas.

Pero el ojiverdes no sabía que excusa decir esta vez.

Sonrió algo nervioso.

—Puedo explicarlo.— Replicó.

—Más te vale que lo hagas ya.—Esta vez la voz que dijo aquellas palabras fue la de un petizo de cabellos morados, ese tono en su voz era demasiado serio y autoritario, tanto, que logró poner más nervioso aún al peliturquesa.

Las chicas asintieron, y sin preguntar, los tres entraron a la casa.

Bon simplemente rogaba porque se fueran.

—¿Por qué hay un plato de fideos frío?¿Acaso no cenaste?— Esta fue Joy.

—¿No es demasiado temprano para cenar? ¡Apenas si son las siete!— Dijo Mangle.

Bon contuvo el aire, carraspeó un poco ya que le dolía la garganta y buscó alguna mentira convincente.

—Es que pensaba acostarme temprano, mañana debo levantarme muuuuuy temprano.—Mintió.

—Pero apenas son las siete.— Bonnie era el único que sabía que el moreno mentía. Todo era demasiado extraño.

—Sí, pero tengo deberes que hacer.

—¿Y por qué no terminaste la comida? Está fría. — Inquirió Mangle.

—Porque me dolía la panza.

—¿Por qué te hiciste de comer si sabías que no lo comerías?— Las preguntas comenzaban a desesperar al chico.

—Oigan, ¿No pueden dejarme en paz? Sólo me dolía el estómago, no es nada serio.

Los tres lo observaron preocupados.

—¿No... Confias en nosotros?— Bonnie parecía triste.

—No es e...— Bon fue interrumpido por el mayor.

—¿Ya no te importamos?

—Bonnie, n...

—No te excuses, ya me voy.— Se dirigió a la puerta y antes de abrirla se volvió hacía Bon.— Y que sepas, que no me trago tus mentiras.

Y así no más se fue.

Mangle también lo hizo, de la misma forma. Desesperada, preocupada y... enojada.

Joy fue la única que lo miró compasiva, pero igualmente se fue.

Bon se sentía solo.

Ni siquiera le habían dicho el por qué de su repentina visita.





"Esto me pasa por estúpido"











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Ya he dicho que no me odien? :3




🐰

Hungry (FNaFHs Sick)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora