Lunch » L.T

"Cena con Zusi Cox"

—¿Como te fue?— le cuestioné a Zusi cuando supe que su papá ya había salido de la habitación y yo recién entraba en ella.

—Bien, supongo— dijo en un suspiro— Mañana tendrá que estar a primera hora en dirección y no es como que le agrade mucho.

—Pero se lo tomó con calma y es lo importante—la alenté sobando delicadamente su brazo y ella asintió.

—Sigamos con esto Louis, necesito que aprendas como resolver las fórmulas— dijo y esta vez me tomó de la mano y me guió nuevamente hacia las sillas de su escritorio, bien ordenado y todo.

—¿Hay fórmulas en química?

—Por Dios Louis, eso es lo que te están pasando— comentó rodando los ojos, se veía tan linda haciendo eso— ¿Te gusto, Louis Tomlinson?

—¿Ah? ¿Qué? No, loca.

Abrí un poco los ojos de sorpresa y ella solo soltó una carcajada para luego volver a explicarme en como funcionaba la "entalpaya". Esta vez si estaba poniendo suma atención y entendía todo lo que salía de la boca de la chica.

Una vez terminada su explicación, me invitó a cenar con ella y su padre a lo que gustosamente acepté. Conversaciones de temas triviales salían de repente, mientras que yo comía con sumo entusiasmo mi carne con papas doradas.

—Chico idiota, beso, Zoey— canturrea el loro entrando al comedor y veo en como el señor Cox frunce el ceño.

Zusi me mira algo asombrada y puedo notar en como se sonroja levemente, sin saber que responder y gira su cabeza para ahora ver al ave posado sobre mi cabeza y picoteando mi cabello.

—Chico idiota, beso...

—Estúpido y hermoso loro— le interrumpe ella sacándolo de mi cabeza e ir a encerrarlo en su jaula, seguramente.

El papá de Zusi suelta una gran carcajada y niega con la cabeza para luego volver a concentrarse en cortar su carne.

—Y dime Louis, ¿Ustedes dos son compañeros de curso?— cuestiona él.

—En realidad no, solo compartimos la clase de biología— le respondo y tomo un sorbo de mi bebida.

Él solo asiente y en ese momento llega Zusi, con una sonrisa de oreja a oreja, le quise responder con el mismo gesto pero el tono morado que ahora alojaba en su pómulo no me lo permitió. Me dio rabia ver aquello.

—¿Te duele?- le cuestioné, señalando su mejilla.

—No pero siento adormecido, debe ser por la crema de la enfermera— responde ella encogiéndose de hombros— Supongo que mañana seguiremos con las clases, Tomlinson.

—De hecho si, mañana también empezaré con tu proyecto de biología— la miré y ella tenía una gran sonrisa relajada en sus labios, se veía tan linda así. Salí de mi pequeño trance de observarla de esa manera y comí otra papa.

El papá de Zusi miraba la situación en silencio, bebiendo de su copa de vino tal cual Sherlock Holmes observador, como analizando cada movimiento que Zusi y yo hacíamos.

Luego de la cena— la cual no fue para nada incómoda—, Zusi me fue a dejar hacia el auto el cual estaba estacionado a la entrada de su casa. Me dijo que estudiara los valores de los elementos químicos a lo que asentí de mala gana.

—Supongo que no irás mañana— le dije acariciando levemente su mejilla.

—Voy a ir igual— dijo frunciendo el ceño—No le voy a dar el lujo de verme débil a ese idiota de mier...

—Bien ya entendí— la interrumpí soltanto una pequeña risa— Nos vemos mañana entonces, tonta Zusi.

—Adiós estúpido Louis— me acerqué hasta ella y dejé un casto y corto beso en sus labios, para luego subirme al vehículo de mi papá y emprender camino a casa.

(...)

—¿Y entonces que pasó?— cuestionó mi papá, luego de que les haya contado el suceso ocurrido el colegio. Mis padres por supuesto se preocuparon más de lo normal en cuánto les comenté que el otro idiota le había pegado a la prima de Harry.

Les conté todo, incluido la parte en que también golpeo al chico y que el director me lleva a su oficina a lo que mi mamá me mira fulminante y mi papá orgulloso.

Estuve jugando un rato más con Alaska y ayudé a la pequeña de Pheobe a hacer su trabajo de artes, mi única hermana y quién solo tenía doce años. Aproveché también de estar un rato hablando con los chicos por WhatsApp y aguanté las burlas de los otros cuando me molestaban con Zusi.

Más de alguna vez eliminé a Andrew del grupo.

La alarma sonó al rededor de las seis de la mañana y no me di ni cuenta cuando ya estaba tomando locomoción para asistir al colegio debido a que mi padre necesitaba el auto.

—Hoy iré al taller a ver que es lo que pasa y lo más probable es que tengas ya el tuyo mañana por la mañana— escuché decir a mi papá antes de salir de casa.

"Más te vale que ya vengas en camino mierda, el entrenamiento es a primera hora"

—Lindo mensaje, Niall— susurré más para mi mismo.

Llegué a eso de las ocho menos cinco, justo cuando el timbre ya estaba por tocar y me dirigí rápidamente a mi casillero en donde una chica muy conocida, recostada sobre él, llama mi atención.

Iba vestida con un vestido de mezclilla en forma de jardinera y unas zapatillas color blancas a juegos, su cabello estaba atado en una media cola y éste tenía ondas que llegaban por debajo de su busto.

—Louis— dice cuando se da vuelta.

—Zusi— susurro llegando a su lado, sin dejar de mirarla.

Se veía tan bonita.

—Te estaba esperando, mi papá está hablando con el director y lo más probable es que no te vea hasta la tarde— dice y relame sus labios— Te iba a pasar dinero por los materiales.

—No hace falta, tengo lo necesario en mi casa.

—No, te voy a pasar dinero Louis— dijo y de su mochila sacó unos cuantos billetes- Corresponde.

—No corresponde Cox, ya tengo los materiales— contesto y ella rueda los ojos y guarda el dinero en el bolsillo de mis jeans.

—Además te iba a pasar esto...— dice ahora sacando dos hojas con unos cuantos dibujos y letras con colores llamativos en ellas, era bastante femenino a decir verdad— Aquí hay un resumen general de la materia, lo hice anoche.

Tomé entre mis manos el material e increíblemente estaba todo tan bien explicado como si se tratara de hacerle entender a un niño de primero básico.

—Ni tenías porqué molestarte Zusi— le respondo, algo conmovido y la miro con ternura.

—Es solo un gesto de...

—Eres hermosa— le digo de repente y ella frunce el ceño— M-me refiero a que... Hoy e-estás hermosa.

—Gracias, Louis— susurra. Se acerca y me da un pequeño beso en la mejilla— Te veo después entonces.

Pero antes de que se vaya, tomo su mano con firmeza y me importó una reverenda mierda de que los otros estaban observando la escena.

—¿Quieres ir a tomar un helado o algo en la tarde?— le preguntó, sin despegar mi mirada de la ella. Su cara estaba menos hinchada ahora y sus lentes blancos disimulaban un poco el moretón.

—¿Es una...?

—Es una cita, si, ¿Te gustaría tener una cita conmigo?

—Me encantaría, Louis.