Capítulo 7. (Editado)

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Anna.

— Bájate del auto — me ordena.

— ¿Para qué me trajiste acá? — hago la pregunta que rodea mi mente desde que nos montamos en el auto.

— Para hablar contigo de unos asuntos — responde sin mirarme.

— Si te soy sincera, no sé qué necesitas hablar conmigo — respondo confundida.

— Créeme son muchas cosas — dice para a continuación abrir la puerta del auto dispuesto a bajarse, enseguida yo copio su acción haciendo lo mismo que él.

Una vez abajo, me pongo junto a él y empezamos a caminar hasta la gran entrada. Él abre la puerta y camina dentro de esta conmigo detrás de él.

<< ¡Vaya! >> pienso anonadada.

Si por fuera era hermosa, por dentro lo es el triple, claramente puedo decir con firmeza que está casa es sin duda una fabulosa edificación, sin contar lo lujosa que se ve.

— ¿Te gusta, Luna? — pregunta Alexander sacándome del trance en el que estaba.

— Si, es hermosa — digo mirando a mi alrededor — espera... ¿Luna? ¿andas por ahí acosándome y ni siquiera te acuerdas de mi nombre? — respondo volviendo mi atención a él dándole mala cara.

— Te digo luna porque eso eres — responde dejándome confundida.

— ¿Seguro que esto es tuyo? — preguntó desconfiada cambiando el tema drásticamente.

— Ya te dije que sí, Luna — responde con fingido enojo.

— Seguro que no eres un... matón o un gigoló — digo haciendo que el suelte una sonora carcajada.

— ¿Gigoló? ¿Es enserio? — dice divertido.

— No te conozco, eres joven y además tienes una mansión que dices que es tuya... puedes ser cualquier cosa —digo encogiéndome de hombros.

— Tienes razón, pero... ¿gigoló? — dice aún con diversión en su voz, por lo que solo me encojo de hombros — Bueno ahora sí, sígueme — dice empezando a caminar.

Caminamos hacia unas enormes escaleras y empezamos a subir por ellas. Una vez arriba caminamos por un largo pasillo el cual tenía cuadros de lobos en las paredes.

— ¿Te gustan los lobos? — preguntó extrañada por la cantidad de cuadros que había.

— Me encantan — responde con una enorme sonrisa — han sido parte de mi vida desde que nací — dice sin detener su paso.

— ¿Parte de tu vida? — pregunto confundida.

— Si, mis padres también son apasionados con los lobos, así que desde pequeño me enseñaron a amarlos — dice finalmente cuando estamos frente a una puerta.

Alexander abre la puerta, se adentra a la habitación, prende las luces y hace un movimiento con su mano indicándome que entre. Camino dentro de la habitación, encontrándome con un lindo estudio muy moderno. Él toma asiento en una gran silla detrás de un escritorio y me indica que me siente en la que frente a este. Rápidamente le hago caso y espero a que él comience a hablar.

— Bueno, ahora sí empecemos — dice poniendo su rostro serio.

— ¡Habla rápido! ¿quieres? — digo cansada — me quiero ir ya — digo suspirando sonoramente.

— Bueno, te preguntarás ¿Por qué te sigo tanto? — pregunta a lo que yo asiento — Bueno, esto sonará raro y tal vez no me creas per la verdad es que yo soy un... — no pudo terminar de hablar ya él chico que se llevó a Mike entró alarmado al estudio.

— ¡Alfa, tenemos una emergencia! — dice el chico.

— ¡¿Qué pasó?! — Exclama Alexander parándose rápidamente.

— Hay Rogues en la frontera, y están atacando — dice el chico rápidamente.

— ¡Llama a todos los guerreros! — dice empezando a caminar rápidamente a la puerta — ¡no vayas a salir por nada en el mundo! — me dice volteándose hacia mí, para a continuación salir rápidamente junto al chico, cerrando la puerta tras él, dejándome con montón de dudas en la cabeza.

***

Si, si lo se, este capítulo fue aburrido y lo lamento chic@s es que estoy sin inspiración 😓😓
Este capítulo lo escribí un poco forzado, pero prometo poner más emoción e inspiración en el próximo. Bueno ahora si me despido.
L@s amo ❤️
Besos 😘

Alexander©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora