Yo soy Yuri, el mentiroso [ Un fanfic de Yuri!! on Ice]

Capítulo 14: Rencor, verdad y mentira

Yuri indicó la navaja de Minami con el dedo. 

- Desde los tiempos ancestrales, los problemas se resolvían con los puños- sonrió- ¿No te parece? 

El pelirrojo rió y arrojó la navaja al suelo, arremangándose la camisa. 

- Como el caballero quiera- ironizó 

Minami dio el primer paso, pero tan pronto como se abalanzó sobre él, el moreno giró sobre sus talones y detuvo su puño con un solo movimiento. El Guardián Rojo lo miró desconcertado y atónito. "Gracias, JJ" pensaba Yuri mentalmente, recordando los momentos en que el castaño les había enseñado defensa personal en la oficina; mientras esquivaba todos los ataques de su oponente sin sudar. Minami se notaba distraído, y su enfado iba creciendo segundo a segundo. Harto, deslizó los dedos dentro de su manga y tomó un pequeño cuchillo. 

- ¡Esto se termina ahora!- rió, histérico 

- ¡Yuri, cuidado!- gritó Victor 

 No fue necesaria la advertencia. El moreno tenía varios secretos bajo la manga. Con un ligero giro hacia la izquierda, esquivó el ataque de Minami y tomándolo por la muñeca, logró quitarle el arma y arrojarlo al suelo con un simple golpe. El pelirrojo volvió a ponerse de pie, furioso, e intentó golpearlo con todas sus fuerzas. Sin embargo, gracias a lo aprendido en los barrios bajos de Tokyo (donde los criminales eran colaboradores y enseñaban sus trucos) y a lo que JJ les había enseñado, Yuri podía esquivarlo con facilidad. Minami estaba furioso, deseaba acabar de una vez por todas con él y la ira lo estaba cegando. 

¿Habría elegido él su vida? ¿O habría querido otra cosa, más se vio obligado a aceptar por mantener la tradición de su familia? 

Minami cayó al suelo por tercera vez. Yuri le sonrió con calidez. 

- Ya no sigamos- dijo con tono suave- Ya no quieres seguir, ¿verdad? 

El pelirrojo bufó, limpiando el sudor de su rostro, y fijando sus pupilas oscuras sobre el japonés, mirándolo con odio. 

- Entonces hazlo- gruñó- Mátame. ¿No es eso lo que tanto querías? 

Yuri soltó una risita. 

- Jamás dije que quería eso- replicó- Los dos hemos cometido crímenes imperdonables, Guardián Rojo... pero eso no quiere decir que la solución sea matarte. Debemos afrontar lo que causamos 

                                                                         *****************

Unas horas después, Minami yacía esposado en el asiento trasero de una patrulla de la central. Yuri, Victor y Yurio estaban siendo atendidos por unos enfermeros, más allá de no presentar heridas graves. Sentados uno junto al otro y cubiertos por mantas, los tres comían pirozkhi de katsudon; una receta creada por el abuelo de Yurio. El moreno suspiró. 

- Supongo que en unas horas, tendré que compartir celda con él...- dijo, pretendiendo parecer feliz 

En su interior, realmente no se sentía mal por el ir a la cárcel. Sabía que había cometido atrocidades durante 5 años, y debía pagarlas a todas. Pero esa no era la razón de su desconsuelo. La tristeza se reflejó notoriamente en sus ojos. 

¿Qué pasaría con Victor? 

Un trozo de pirozkhi de katsudon le pegó en la cabeza. Desconcertado, observó a Yurio, quien masticaba con expresión molesta. Nunca lo había mirado así. 

- ¿Eres idiota o qué?- soltó- No vas a pasar más de diez años en la cárcel. Es más... si tienes suerte, puede que solo tengas que realizar trabajo comunitario, Yuri-kun 

El japonés se sorprendió, y con él, Victor. El albino, mordiendo un pirozkhi y aferrado al brazo de Yuri, lo observó con los ojos abiertos como platos. 

- ¿A qué te refieres, Yuri?- dijo, balbuceando su verdadero nombre sin darse cuenta 

El rubio sonrió con picardía, hasta con un poco de malicia. 

- ¿Y si tus antecedentes se perdieran por arte de magia...?- sugirió con tono perverso, levantando el índice 

- ¿Estás loco? ¡Pueden arrestarte, Yurio!- gritó Victor, atorándose con la comida 

Yurio bufó, blandiendo el pirozkhi como si fuese un arma. 

- ¡Demonios! Victor, tú quieres quedarte con él, ¿no es así? No lo niegues; quizás hasta tenías la misma idea que yo en la cabeza- se exasperó- Y tú, Yuri-kun, serás un asesino y bla, bla, bla... ¡pero no voy a permitir que te alejes de él! Ya pasé demasiado tiempo esperando que dejara de ser un soltero empedernido y por fin se enamore de alguien que lo cuide... ¡Y si me deben arrestar, pues que me arresten! Tengo 15 años; no creo que puedan darme más de 5 meses. Tú, en cambio, puedes pasar el resto de tu vida en prisión. Y además... 

Los detectives observaron al rubio, quien amplió aún más su sonrisa maliciosa. 

- Ya hay demasiada corrupción, ¿verdad? Y solo beneficia a las malas personas- replicó- Y por encima de todo lo demás, Yuri-kun no es una mala persona. Un poco más ni siquiera se notará. ¿Y... qué es la vida sin un poco de riesgo? 

¡Gracias a todos por sus lecturas y votos! ¿Quien lo diría, Yurio? ¡Atención! ¡Mañana es el final! ¡Preparen pañuelos, cloro; lo que se les ocurra! Capítulo 15, "Un nuevo mundo" ¡Los quiero!

Lily