La chica de mi hermano. (Chris Pine, Armie Hammer Y Tú)

Capítulo 6

Chris me dejó un momento con las chicas, había ido por bebidas, a lo lejos vi a Armie, él no noto mi existencia o eso supongo.

-¿Esa que viene es Lisa?.- gritó Mariana para escucharla, la música estaba muy fuerte.

Y así era, Lisa estaba en la fiesta y lo que colmó mi paciencia era con quien estaba, la rubia me miró y se acercó a mi con una gran sonrisa y su fiel acompañante a un lado.

Lo que me faltaba, tenía que lidiar con ésta tipa.

-Hola _____.

Ni siquiera contesté a su saludo, la gente comenzaba a mirarnos.

-Vámonos Lisa.- habló por fin Chris, quien venía con ella.

-No, ¿por qué debería irme amor?.

¿Amor? ¿acababa de llamarlo amor? Ellos ya no eran pareja, ¿por qué se refería a él así?

-¿Por qué lo llamas amor?.- la rubia comenzó a reírse de mi y yo seguía sin entender nada. Chris soló me miró apenado.

-Mira, te mostraré algo.- sacó su celular buscando lo que quería enseñarme.

-Lisa dejalo así, es mejor que te vallas.- intentó arrebatarle el celular pero ella fue más rápida.

-Toma.- me entregó el móvil y yo solamente me dispuse a leer.

Todo alrededor de mi era fuego, estaba tan molesta que dejé de escuchar cualquier sonido proveniente, mis ojos comenzaron a arder, sentía mis mejillas calientes, la decepción, el enojo y la irá recorrían mi pecho, ni siquiera podía mirarlo a los ojos, cada mensaje me destruía más, al punto de llegar a sentirme débil.

Todas las promesas, todos los besos, los abrazos, todo se había ido ala mierda, estoy tan enfadada que lo único que quiero hacer es correr y no detenerme hasta que me falte el aire.

"Te amo Lisa"

"_____ soló es mi amiga"

"Te extraño mi amor"

"Esta noche fue la más increíble, hacerte el amor fue espectacular"

Esos y muchos más mensajes había leído.

-_____...- quiso tocarme pero sólo me hice a un lado.

-¡No quiero volver a verte!.- le grité furiosa, la sangre me hervía, mi pulso estaba a mil por hora, mi mandíbula apretada y mis manos hechas puños, tanto era el coraje que mis uñas lastimaban mis manos por la presión que ejercí en ellas

Sin pensarlo le arrojé el celular de Lisa al pecho y salí corriendo de la fiesta, intentó seguirme, pero no lo logró, no pude ver quien había sido el tipo que lo de tuvo y con quien comenzó a discutir. Mis amigas quisieron alcanzarme pero les pedí que me dejaran sola, no quería ver ni hablar con nadie, sólo quería llorar, gritar, desahogarme.

Aproximadamente eran las 2:00 de la madrugada, estaba caminando sola por las calles vacías, mientras las lágrimas corrían por mis mejillas y mi nariz estaba roja, vi un pequeño parque muy cerca y decidí sentarme junto a un árbol que a decir verdad era enorme.

Recordé cada momento, cada cita, cada beso, el día que fui a su casa a ver películas, sus mensajes, las llamadas a medía noche diciéndome que no podía dormir, que amaba mi sonrisa, mis ojos, todo eran mentiras. TODO.

Mantenía mis piernas estiradas sobre el pequeño césped que adornaba el parque, mis tacones a un lado, mis manos en mi rostro, sabía que me veía faltal, podia imaginar que tenía el maquillaje escurrido y el pelo alborotado.

Escuché el motor de un auto, pensando que tal vez era él, pero si así se trataba, me iría sin dejar que me dijera ni una sola palabra.

Me sorprendí al levantar la cabeza y ver quien era el tipo que se acercaba a mi.

-¿Necesitas que te lleve?