Relatos cortos

Diario del futuro

20/12/22XX

Estalló la Revolución Autómata, hace meses que estamos luchando contra robots y ciborgs, pero vamos perdiendo terreno.

Mi nombre es Liv y yo, junto al resto de la humanidad, estoy uniendo mis fuerzas para que salgamos victoriosos de esta batalla. ¿La verdad? No lo veo posible.

Hace cosa de unas semanas que no veo a mi hermana pequeña, Kuriette. Esta vete a saber dónde incomunicada. No hay forma de contactar con ella.

Hoy he perdido mi ojo derecho en una pelea, aquel maldito androide me lo ha arrancado de cuajo. Odio a todos aquellos seres inhumanos, me dan asco.

Mamá y papá están nerviosos y muy inquietos. Llevamos como dos horas buscando a Kuriette intentando que los autómatas no nos vean. Maldita enana, ¿dónde diablos se habrá metido ahora?

Papá la ha encontrado, estaba en un taller. Cuando ha salido tenía la ropa manchada de aceite y un líquido azul. Parecía tóxico, pero no me importaba. He ido corriendo hacia ella para abrazarla con algunas lágrimas en mis ojos. Ya me había imaginado lo peor que le podría haber ocurrido.

24/12/22XX

Así que, noche buena es hoy, ¿no? Pues esta noche no tiene nada de bueno, los militares han podido captar unas ondas las cuales hablaban de una emboscada en el distrito norte de la ciudad en la cual estamos viviendo. Esto pinta cada vez peor, ¿por qué no nos dejan en paz? Nosotros somos los dueños de este mundo. No entiendo porque no lo comprenden.

Mis familiares y yo hemos huido como hemos podido de la encerrona. Bueno, todos menos Kuriette. Ha vuelto a desaparecer, pero me ha parecido escuchar su voz en alguna parte. No estoy segura, pero su voz es diferente a las demás. No me puedo confundir, es mi hermana, al fin y al cabo.

27/12/22XX

No estoy segura de lo que acabo de ver. Ha pasado tan rápido... pero, era ella. Es imposible que fuera otra. Llevaba su característico moño hecho con un par de lápices. Pero lo que no me acababa de cuadrar del todo es que estaba hablando con un ciborg, ¿o era un androide? Qué más da.

Si mi memoria no falla, estaba enseñándole unos papeles enormes con un montón de números.

Kuriette, ¿qué eres realmente?

31/12/22XX

Estaba en lo cierto, aquella que creía mi hermana, está en el bando enemigo. Está con esos asquerosos seres, aquellos autoproclamados "superiores a la raza humana". ¿Eres una maldita traidora? Te creía más lista, maldita sea.

3/1/22XX

Mamá me lo ha contado todo sobre Kuriette. Ella es un androide. La adoptaron porque no podían tener más hijos por problemas de esterilidad. No sé cómo me siento. He estado compartiendo mi vida junto a un androide. No me lo quiero creer. O sea, ¡ella tiene emociones y sentimientos como los demás! Es imposible que sea una inteligencia artificial, ¡imposible!

Solo tengo ganas de llorar y negarme eso de que mi hermana es un condenado robot.

Llevo dos horas investigando los pocos documentos que hay en casa y he encontrado algo. Una factura. Al final he aceptado eso de que mi hermana. ¡No! Ella no tiene nada que ver conmigo, somos enemigas en combate.

7/1/22XX

Creo que esta es mi última entrada. Estoy escribiendo esto como puedo, queda poco tiempo. Kuriette está aquí, el puto androide con el cual he compartido parte de mi vida ha venido a por mí y mis padres.

Esto no acabará así, me vengaré.

La chica dejó caer el bolígrafo y escondió la pequeña libreta en un hueco entre una pared y la estantería.

Salió de su escondite y gritó con todas sus fuerzas.

>> ¡ESTOY AQUÍ HERMANA! —dijo con furia y una sonrisa de autosuficiencia en sus labios.

La otra chica se giró, quedando así enfrente de la humana. Sacó una especie de aguja del tamaño de su pierna mientras se reía.

>> —Por fin te encuentro Liv—alzó aquella fina estaca mientras se dibujaba una sonrisa cínica en su rostro—, ¿sabes? Creo que la "Muerte" está en busca tuya.

De un solo movimiento clavó el poste en el pecho de Liv, dándole así en un punto vital: el corazón.

La muchacha se desplomó en el suelo y la androide, se sentó encima suyo y empezó a clavarle repetidas veces aquella espada tan fina hasta comprobar que su "hermana" no tenía pulso.

Kuriette salió de la casa la cual había pasado tantos años con aires victoriosos mientras que el edificio estaba recubierto de llamas.

Así fue como se avivó la Revolución, la cual años más tarde acabó. Salieron victoriosos todas las inteligencias artificiales.

N/A: ¡Hola! Espero que os gusten estos pequeños relatos:3

Este, por ejemplo, lo hice para la clase de castellano. Me lié mucho T-T pero al final me salió esta cosa que lo reamo*^*