Apenas tuvo oportunidad de dejar su puesto en su trabajo, Newt recogió todos sus documentos, los metió en su maletín y tomó un taxi que lo llevó directo a buscar a Josh. Dudó un poco de pie en la entrada de la escuela, con el teléfono entre el hombro y la oreja llamando al chico por trigésima vez en todo el día, porque al otoño le había dado ganas de aparecerse como de la nada con una lluvia pesada que le decía que tenía que irse directo a su casa y rezar porque Josh sí asistiera al trabajo al día siguiente.
Porque sí, Joshua no estuvo en el colegio ese miércoles y tampoco hizo una llamada a su jefe para explicar su ausencia, y Newt, más allá de estar enfadado, estaba preocupado. Es aquella misma preocupación que le ganó a la lógica y le obligó a dar la dirección del edificio de Josh al taxista. La situación era que el chico teñido tenía antecedentes. Era secreto para muchos el transtorno neurótico que padecía, el cual le daba ataques de ansiedad cada tanto, pero no para Newt: él había lidiado con Josh no queriendo salir de su casa por días seguidos y con Josh llamando sumamente alterado a medianoche, él había ido ido a buscar a Josh quien temblaba a mitad de la calle, con ojos abiertos asustados y la cara de un venado acechado por un cazador. Newt temía que Josh hubiera pasado por otra de estas circunstancias de nuevo, y con justa razón, pues a veces al chico le gustaba guardarse sus ataques para él mismo para no molestar a su jefe.
Josh nunca era una molestia, sin embargo. Si no le apasionara tanto la música, Newt habría elegido Medicina como carrera, por el carácter altruista y desinteresado que lo caracterizaban, siempre dispuesto a ayudar a su amigo, tranquilizarlo, decirle que todo estaría bien.
Al llegar al edificio con las gotas cayendo con mayor intensidad en el techo del taxi, Newt preguntó el precio de los servicios de transporte, recibiendo una respuesta lacónica y entregando la cantidad exacta de dinero; su paga venía a la siguiente semana y no estaba para darse el lujo de darle propina a nadie. Sin acordarse de llamar a su novia para decirle que llegaría tarde ese día a casa, salió del taxi, envolviendo su maletín con su chaqueta para evitar que le cayera cualquier montón de agua, y corrió hacia el edificio. Las suelas de sus zapatos de vestir hicieron sonidos en las escaleras de piedra, que estaban empapadas, y empujó las puertas de cristal, demandante.
En aquel edificio había una muy pequeña recepción, con apenas un par de cuadros, un foco ahorrador en el techo y un par de macetas de hojas verdes simples a los costados, mas para Newt fue más de lo que podía pedir: al menos estaba caliente, seco y resguardado de la precipitación que tenía lugar en el exterior. Subió las escaleras con prisa, sin escatimar energías, hasta el cuarto piso donde Josh tenía su pequeño departamento. Probó llamar otra vez mientras subía, y al escuchar los cuatro tonos de llamada recibir el contestador como respuesta, las arrugas en su frente se hicieron más notorias y empezó a saltar los escalones de dos en dos. Cuando llegó al cuarto piso, ligeramente cansado, se abalanzó sobre la puerta de Josh y la tocó con los nudillos, exasperado.
De la puerta del departamento contiguo salía Lily, alertada por el ruido de los fuertes golpes que propinaba el hombre. Newt había oído hablar de la dulce vecina de Josh, que tenía ojos grandes y rizos bonitos y estudiaba Derecho, y apenas la vio, resolvió preguntar.
"¡Lily!" casi gritó, logrando asustar a la chica. "Lo siento."
"Está bien, eh, eres Newt, ¿cierto?" rió graciosamente Lily, acomodando dos rizos tras su oreja. Newt supo que Josh le habría contado sobre él.
"Sí." asintió rápidamente. "¿Está Josh?"
"Em, sí." Ella asintió con la cabeza rápidamente, y resolvió agregar más información después de que Newt volviera a tocar la puerta. "Huh, si te sirve, hoy en la mañana tuve que irme a la facultad temprano, y Josh apenas llegaba."
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touch [joshler]
FanfictionPUENTE: (del lat. pons, pontis). 17. Parapsicol. ant. Conexión que se da entre dos dimensiones o realidades, a la que se llega usando antiguas técnicas como la meditación y la ingesta de sustancias alucinógenas; en ciertos casos, sucede con espontan...