Itachi, aparte de ser muy responsable e inteligente, tiene un único "pero": conmigo, es un celoso. Cualquiera de mis amigos, por buenos estudiantes y personas que sean, a sus ojos siempre van a ser posibles violadores o yo qué sé. Ninguno de mis hermanos, ni siquiera Kisame, son capaces de saber cómo piensa él. Lo único que sabemos, es que especialmente conmigo es un sobreprotector, a veces hasta cargante.
Flashback
Suigetsu tuvo que venir un día a casa para hacer un proyecto de Biología que consistía en crear, con materiales reciclados, una representación móvil del aparato digestivo. Imitando la comida, usaríamos tres canicas, y ya el recorrido debíamos hacerlo a base de cajas de cereales, plásticos, botellas, etc.
Apenas tocó el timbre, yo ya iba derecha a abrir la puerta, y recibí a mi amigo con una gran sonrisa, dejándolo entrar. En cuanto me saludó de vuelta, el tono grave de su voz fue la llamada para Itachi. Se asomó por el pasillo y nos cerró el paso. Se cruzó de brazos y se apoyó en la pared.
- ¿Quién eres y qué haces aquí?- fue el saludo hacia Suigetsu.
- Eh...- se puso nervioso él.
- Suigetsu, viene a hacer un proyecto de Biología conmigo- Itachi abrió la boca, pero como ya me conocía la siguiente pregunta, lo corté-. Y no, no es del aparato reproductor.
- ¿Entonces?
- No seas pesado. Es largo y se nos echa el tiempo encima.
Lo empujé, cogiendo a Suigetsu de la mano y llevándolo escaleras arriba conmigo hacia mi habitación.
- ¿Por qué lo coges de la mano?- protestó Itachi desde abajo. Gruñí y grité en respuesta.
- ¡Pelma!
Cerré de un portazo, le ofrecí asiento a Suigetsu y empezamos a hacer el esquema.
Ya cuando teníamos todas las partes hechas, pasada casi una hora y media, nos dispusimos a montarlo todo junto. Pero el cargante de Itachi abrió la puerta de golpe, dándonos un susto e muerte a los dos.
- ¿Por qué cierras la puerta?
- ¡Porque si no mi queridísimo Nii-San azabache me va a dar el coñazo!- me exasperé-. ¡Cierra la puerta, que en media hora lo terminamos!
- ¿Y se puede saber por qué estáis sudando los dos?- alzó una ceja inquisitivamente.
- Primero: estamos cansados. Segundo: ¡Suigetsu es 100% agua, por eso suda más que yo!
Me levanté, empujé a mi hermano fuera de la habitación y cerré con otro portazo, furiosa. Respiré hondo un par de veces hasta que me calmé y pude sentarme de nuevo.
¡El sistema digestivo había quedado perfecto, pintado como en el libro de texto y todo! Sin duda, lo más complicado había sido hacer los intestinos con rollos de cartón del papel de cocina e higiénico. Pero estábamos satisfechos con el trabajo. Ya lo habíamos puesto a prueba un par de veces, tirando una canica tras otra cada dos segundos. ¡Y no se rompía ni se tambaleaba ni nada! Estábamos muy orgullosos del trabajo.
- ¡Seguro que nos sacamos un diez!- reí contenta, chocando la mano con mi amigo-. Mira, será mejor que te lo lleves tú: con mis once hermanos, tengo un 99'9% de que me lo rompan.
Bajando las escaleras con el aparato digestivo entre sus manos, Suigetsu casi se muere del susto cuando Itachi apareció de golpe en el vestíbulo. Pero como intervine enseguida, pudo marcharse "tranquilamente" a casa.
Fin del flashback
Aunque a veces tenemos nuestras peleas (porque se piensa que sigo teniendo cuatro años), sin duda con él es con el que mejor me llevo. Itachi Akatsuki, mi favorito Nii-San.

ESTÁS LEYENDO
Yo y mis hermanos Akatsuki
Fiksi PenggemarEn esta historia, Akira Akatsuki nos contará cómo vive el día a día en su casa, con sus diez hermanos y su única hermana. AVISO: Este libro fue escrito y publicado en mis primeros años de Wattpad, pido por favor respeto y que se abstengan de cualqui...