Two Words...

Capitulo 7

- ¿En serio me amas? -pregunte temerosa.

-Si Hope -contesto tomando mis manos- todo el tiempo que he pasado contigo me abrió los ojos, eres especial, eres la chica mas fuerte que he visto, lograste superar todo lo que se te puso en el camino y bueno, eres muy linda.

Me reí por lo ultimo y el me imito, se acerco lentamente acariciando mi mejilla, termine de cerrar la distancia entrelazando mis labios con los suyos, sentí una patada y me aparte, otra vez, sonreí y tome la mano de Corey poniéndola donde sentía las pataditas.

- ¿Lo sientes? -él solo asintió y vi como una lagrima se deslizo por su mejilla, alargue mi mano y la quite.

-Hope, permíteme ser el padre de tu bebé, por favor.

Asentí lentamente y Corey me sonrió, se acerco una vez mas y me beso una, dos, veinte veces.

La vida me sonreía nuevamente, doy gracias por el hecho de que Corey se cruzara en mi camino, sin él no sabría que seria de mi, me apoyo desde que me conoció y ahora me daba su amor incondicional, era domingo y estaba en el sofá leyendo y sobre mi vientre tenia mis auriculares con música, Corey había salido casi corriendo al enterarse de que hoy era mi cumpleaños "¿¡que!? ¿Por qué no me lo dijiste antes?" después de que tomo sus llaves y se fue a comprar un pastel, me había quedado dormida cuando sentí unas manos sobre mi vientre sonreí al ver a Corey.

- ¿Que escucha? -Me pregunto tomando mi iPod- ¿Jonas Brothers? ¿Es en serio? Pondré buena música -antes de que pudiera replicar Corey saco su iPod y lo conecto.

- ¡Dame eso! -lo desconecte y volví a poner mi música- a ella le gusta mi música.

-Si claro -me dijo mostrándome la lengua, solo negué con la cabeza y seguí leyendo- ¿porque me ignoras? -me pregunto después de un rato.

-Estoy leyendo, no te ignoro -replique, cerré mi libro y me acerque a él- ¿feliz?

-Mucho.

Me acerque a abrazarlo y sentí sus manos acariciando mi espalda, me acurruque contra él sintiendo su calor corporal, su aroma masculino, me encantaba.

-Tocan la puerta, iré a ver -murmuro separándose, solo asentí y después escuche la voz de Alee llenar la estancia.

-¡¡Feliz cumpleaños!! -Chillo emocionada abrazándome- te tengo un regalo, pero no puedes verlo, ¿donde esta tu habitación?

-Por allá -señale la puerta del cuarto.

-Corey llévala a la cocina -exigió Alee él solo me tomo de la mano y me arrastro hasta la cocina- ¡no vean nada! -dijo y cerro la puerta de la cocina.

-Tu amiga esta loca -me susurro Corey.

-Pero así la quiero -le dije abrazándolo- y a ti también.

- ¿Me estas diciendo loco? -pregunto besando mi nariz.

-Tal vez...

Corey tomo mi rostro entre sus manos y me dio pequeños besos por toda la cara, eran estos momentos los que quisiera congelar y que nunca se acabaran, que duraran para siempre, sin preocupaciones, sin problemas, solo felicidad.

-Ah... ¿interrumpo? -la voz de Alee hizo que nos separáramos, ella cruzada de brazos me sonrió- ven, ¡te va a encantar!

Alee tomo mi mano y me llevo hasta donde estaba mi habitación, abrió la puerta y entre. Oh santos bebés.

Al lado de mi cama había una hermosa cuna blanca junto con una mecedora del mismo color, camine por inercia hasta ella tocando la madera, adentro habían almohadones de un color rosa pálido, todo era tan hermoso.