Girly Direction

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Los chicos salieron la noche acordada con el fin de que Theresa se distrajera un poco del tormento que había en su cabeza.

Liam hablaba con una chica en un sofá, Louis y Niall solo se centraban en quien bebe más chupitos, Harry y Theresa solo hablaban a pesar de que hace una semana estaban enfadados, cosas del alcohol, todo normal, típico de cuando salían de fiesta.

Sonó la canción favorita de Tessa y no se resistió a levantarse del banco y empezar a bailar, Harry se apoyó en la barra contemplando como bailaba, ella le hizo un amago para que fuese a bailar. Él no puso negaciones y fue a bailar con la castaña. 

En un movimiento de abrir y cerrar de ojos las respiraciones se juntaron y a Theresa no le faltó ni un minuto para sonreír y unir sus labios. Los ojos impactados del rizado se fueron cerrando poco a poco y aumentó el nivel del beso. De un salto Tessa se subió encima de Harry y este con disimulo consiguió salir del bar. La apoyó en la pared y se separaron para poder respirar, Tessa se bajó y tiró de él hasta llegar al coche de Harry, lo abrió y surgió la magia, para que decir más. Sus cuerpos se unieron en uno, en los asientos de un Audi R8.

En ese coche solo fue el comienzo, decidieron parar y conducir hasta el piso, y al llegar, el sueño de Harry de tener a Theresa bajo sus sábanas se cumplió, la expectativa de Theresa de no acostarse con ningún miembro se esfumó, por segunda vez, y la regla de Simon se rompió. 

Entre besos y gemidos, llegaron al clímax, ambos cayeron rendidos, Tessa abrazó a Harry y él con un beso en la frente se despidió de ella hasta la mañana siguiente.