Siempre te amaré II (Neji y Tú) [#NarutoAwards]

No... esto no...

Su rostro inexpresivo, su frente descubierta no muestra marca alguna. Sus ojos color perla, con su cálido brillo. No puede ser... ¡Es él! Mi paralizado cuerpo no me permite siquiera respirar o parpadear.
-Ayame...- dice Misuzu con un hilo de voz. En cuanto mi cuerpo reacciona, corro lo más rápido posible, abrazo a Neji. -¡No puede ser! ¡Neji!- exclamo. Luego de eso comienzo a llorar. -Neji... por favor no vuelvas a irte nunca más.- susurro. Me parece raro, él no corresponde a mi abrazo. Me separo de su pecho y levanto la mirada. Él está inexpresivo, ni siquiera me mira.
-¿Neji?- pregunto. No hay respuesta.
-¡¿Neji?!- repito. Nada. -¡Neji! ¿Podrías siquiera verme? Me... ¡Me duele que no lo hagas!- admito. Creo que debería elegir mejor mis palabras. -¡Neji!- grito con todas mis fuerzas. Recibo una bofetada de su parte. Me pongo la mano en el lugar. Duele. -¿Neji?- pregunto tristemente. Puedo verme reflejada en sus ojos. La marca de su mano se ha puesto roja en mi rostro. Puedo sentirlo. No sé si seré solo yo, pero ya no siento que mire de la misma forma en que solía hacerlo.
-¿Acaso tú... me recuerdas?- pregunto, pero no me responde. Tomo aire para poder continuar.  -¿Acaso tú... me extrañaste?- pregunto, pero nuevamente no hay respuesta. Por favor no me hagas esto. -Yo sí te extrañé...- hablo con un hilo de voz.
-¿Acaso tú... me amas?- pregunto entre sollozos. Veo que baja la mirada levemente. No sé si lo habré imaginado. -¿Acaso yo... te olvidé?- pregunta por lo bajo. -¡¿Neji?!- pregunto. -¿Acaso yo... debería extrañarte?- pregunta. -Por favor... por favor no me hagas esto- pido en voz baja. -¿Acaso yo... te he dejado de amar?- termina. -Maldición. ¿Qué te hicieron, cariño?- digo tristemente. Lloro en su pecho. - ___... Por favor perdóname.- susurra. Acerca sus labios a los míos, pero se queda antes de tocarlos. Siento un dolor terrible en el centro de mi cuerpo. Bajo lentamente la mirada, mi ropa manchada con sangre, su mano sosteniendo un kunai. -¿Por qué me haces esto?- pregunto entre sollozos.
-Yo no... tengo el control aún.- explica.
-¿A qué te refieres?- pregunto. -En pocas palabras, él tiene mis recuerdos, así que él puede manipularme a su voluntad.- responde dejándome en el suelo.
-¿Quién te hizo esto?- pregunto.
-No lo sé, pero no fui el único.- responde. Todo se comienza a poner negro hasta que ya no sé si estoy despierta o dormida.

No puedo ver nada. Todo es oscuridad. ¿Dónde estoy? No lo entiendo. No veo nada, pero puedo escuchar una voz. ¿De quién será? Es de un hombre. ¿Será posible...? Talvez la voz de mi señor. -¿Está muerta?- pregunta. -Así es, señor.- responde Neji. -¡No estoy muerta idiota!- grito, pero sólo escucho eco. -Maldición- digo mientras me pongo de pié. Comienzo a caminar sin rumbo fijo.
-¿A dónde vas?- escucho una voz de una mujer. -¿Quién dijo eso?- pregunto.  -Me llamo Kazumi.- responde. -¿Quién eres?- pregunto.
- Soy muchas cosas, pero en estos momentos soy tu guardiana.- responde. -¿Guardiana?- pregunto. -Si, eso mismo. Me encargo de ayudarte a tomar una decisión importante.- responde. -¿Qué decisión? ¡No entiendo qué está pasando!- exclamo alterada. -Déjame  explicarte todo. Primero que nada, recibiste una herida de muerte y has perdido el conocimiento. No puedo decir que estás muerta, pero tampoco estás viva. Estás en medio de la vida y la muerte. Esa es la decisión que debes tomar. ¿Vida... o muerte?- explica haciéndome temblar. -¿Y Misuzu?- pregunto. -No lo sé. Como verás yo no soy parte del mundo físico. ¿Porqué no lo ves tu misma?- pregunta disipando toda la oscuridad. Veo a Misuzu, está atada. Su boca está atada también. -¡Misuzu!- grito acercándome a ella. Intento tocarla, pero mi mano la traspasa. -¿Qué rayos?- pregunto. -Te lo dije. No estás viva, pero tampoco estás muerta.- dice regresando a la oscuridad.
-¿Qué hay del otro lado?- pregunto.
-No puedes verlo. Si eliges ver, morirás. Ya sé que aquí es muy pacífico, pero tienes que decidir rápido, de lo contrario, o tu elección será la muerte por defecto.- explica.
-¿Cuánto tiempo me queda?- pregunto. -Quince minutos- responde.

Tic, toc. Tic, toc. ¿Vida... o muerte? ¿Vida... o muerte? Quedan 13 minutos. ¿Vivir con Lee y Guy? No puedo hacer eso más. Dejé la aldea. ¿Morir e ir con mi familia? Puede ser.
Tic, toc. 12 minutos. Si llegase a morir aquí... ¿Después de eso qué? Tic, toc. 11 minutos. ¿Neji está vivo? Y si lo está... ¿Me recuerda? Con lo que pasó no lo sé. Tic, toc. 10. Maldición. ¿Debería morir? ¿Acaso soy... muy joven? Tengo... 19. Tic, toc. 9 minutos.
¿O es que acaso... he hecho suficiente? Tic, toc. 8. Su sacrificio sería en vano, ¿Cierto? Tic, toc. 7 minutos. No. Definitivamente debo vivir. Tic, toc. 6. -¡Me he decidido!- exclamo. -Viviré- digo firme. -Entonces está bien.- dice con una voz tranquila. Tic, toc. Tic, toc. 4 minutos. Voy a salvarle. Voy a salvarle justo como él me salvó. Tic, toc. Tic, toc. El último minuto.
-Gracias por todo.- agradezco. -No fue nada, ___. Mira lo grande que te has vuelto. La última vez que te vi fue hace 14 años, ¡Y mírate! ___... por favor prometeme que todo lo que has experimentado no sea para que todo lo que hiciste fuera en vano, sino que para que seas cada vez más y más fuerte. Adiós hija.- termina. -¿Mamá?- pregunto al distinguir su silueta. El característico color de su aura. Corro a abrazarla y justo cuando voy a tocarla desaparezco.

Entreabro los ojos. Lo primero que veo es el rostro preocupado de Neji.
-Ne... ¡Neji! ¿Lograste escapar de su control? Por favor dime que estás bien.- pido. -Lo siento. Él aún me tiene bajo su poder.- se disculpa. -Hola, ___.- dice una voz desconocida. -¿T...tú quién eres?- pregunto sentándome en la cama, o eso intenté pero un dolor intenso me detuvo. -No hagas eso. Aún estás lastimada.- dice el hombre. -Yo soy tu señor.-