Seduciendo al Alfa (Luna Roja)

Capítulo 16

Me mire por milésima vez frente al espejo, mi cara estaba pálida y las ojeras sobresalian de mis párpados.

Vomite nuevamente mi desayuno, en los últimos días era lo único que podía hacer. Ningún alimento era retenido por mi estómago.

La única idea que rondaba mi cabeza me daba miedo.

"Repite nuevamente, soy Anna Moore y no estoy embarazada, tengo una infección en el estómago y por eso los vomitos" llevaba repitiendome lo mismo y aún así no mejoraba.

Estaba vomitando de nuevo cuando la puerta de mi habitación se abrió de repente, empuje la puerta del baño evitando que me vieran acostada con la cabeza adentro de la taza del baño.

"Cariño Alyosha y yo saldremos a dar un paseo por la aldea, no quieres salir con nosotros" dijo mi tía Ayleen desde el otro lado.

"No tía, me duele la cabeza me quedaré aquí a dormir tal vez se me calme un poco" dije tratando de sonar tranquila.

"Esta bien cariño, si te sigues sintiendo mal me llamas" sali de mi recámara y me dirigí a la de mi tía en cuanto escuche la puerta del frente ser cerrada.

Hace medio año mi tía pensó que estaba embarazada nuevamente y compro una prueba de embarazo.

Poco a poco abrí los cajones del tocador de mi tía, pero ahí no había más que maquillaje.

Me metí a su armario y busque en un pequeño mueble. Ahí había sólo camisas de Alyosha. Busque un rato más hasta que sólo me faltaba un cajón.

Al abrirlo tire muy fuerte de el y este se cayó esparciendo todo su contenido, que eran sólo unas ropas viejas, poco a poco las acomode y encontré envuelta en una camisa una pequeña caja café.

La curiosidad pudo más conmigo y la abrí. Adentro había una foto de mis padres. Una pequeña lágrima resbaló por mi mejilla al recordarlos.
La foto estaba doblada por la mitad justo donde estaba la cara de mamá.

Busque más fotos de mis padres en la caja pero sólo encontré fotos de Alyosha y mi tía Ayleen. Esa foto le pertenecía a mi tía Leen. Pronto le preguntaría sobre ella.

Acomode todo de nuevo en su lugar y volví a buscar pero esta vez en el baño. La prueba estaba escondida entre las toallas.

La tome como si me quemara las manos y me la lleve a mi cuarto. Seguí todas las instrucciones al pie de la letra.

Cinco minutos después observé el resultado con mucho miedo.