Más Que Mi Mascota [TERMINADA] [UFFoncest]

Does the Night Sky knows everything?

He estado. . .

Me he estado preguntando mucho últimamente. .

Si. . Preguntas. . Preguntas sin respuesta.

P-Papyrus. . .

La suave brisa contagió sus pequeñas cuencas vacías, sumergiendose en su inexistente piel para dar paso a unos escalofríos individuales.

No voy a mentirte. .

Se está muy solo aquí. .

Nunca había experimentado esta sensación. .

Sentado en su cama y tapado con una manta de pies a cabeza, Sans se encontraba mirando por su ventana. . Era un hermoso cielo nocturno. . .

Tan hermoso como. . .

É-Él. . .

Tan hermoso. . .

¿E-Eh? N-No, no hablo de /él/. . ¿O sí?

Del otro lado de una puerta, del otro lado de una pared, del otro lado de sus pensamientos yacía un esqueleto realmente arrepentido. . ¿De qué? De todo, y de nada.

Verás. . Nunca he sido muy sociable. . Las únicas fuerzas que uso para hablar es cuando soy requerido o cuando tengo que insultar a mi hermano, mayoritariamente. No puedo decir mucho de mí mismo, si. . Soy un tirano, pero tengo mis razones, escondidas al fondo de la pútrida capa roja, oscura y desdeñada. . Nuestro Padre murió hace justamente XX años. Estaba solo, y a mi hermano lo había consumido la desesperación.

Nadie cree cuando le digo que, ese flojo y sensible esqueleto es mi mayor, nunca he desarrollado una conducta que pueda ser superado por este, ni mucho menos criticado. . Soy la perfección, pero no para él.

¿Por qué le llaman perfección si nunca establecerá unos gustos ajenos a los de uno mismo? A Sans no le gusto de esta manera, pero no debo cambiar, no. . No debo dejar que mis sentimientos se interpongan entre lo mucho que protejo a Sans. . Y si, es combatir sentimientos contra sentimientos. . Triste pero cierto.

Suspiró mientras miraba el mismo cielo nocturno del otro lado de la ventana, preguntándose que querrá Sans de las estrellas. . Que querrá su pequeño hermano. . Sus guantes bajaron a su entrepierna, donde el esqueleto menor se empezó a frotar suavemente, emitiendo unos suaves sonidos, era relajante. . Y pensar de Sans de esta forma lo hacía extrañamente excitado. Era un mounstruo, pero esto no lo paraba de seguir frotandose, ahora ya bajo el pantalon. . Pensaba. . Lo recordaba. .
Se llenaba de memorias de él. .

Se daba asco.

Solo podemos decir que Papyrus golpeó su cama con una fuerza no tan suave, preguntandose por qué debía de dar tanto asco. .

Que hermoso cielo nocturno. .