Nota de autora: La flor se usa para diferenciar cuando Yuuri es quien habla, o mejor dicho, los simbolos se usan para expresar en quien se centra más lo escrito. El capítulo no es tan largo, de hecho creo que lo más largo ha sido el prólogo. Supongo que los capítulos serán relativamente cortos, o eso acordé conmigo misma. Aunque no se sorprendan si me alargo, nunca me hago del todo caso xD
¡Gracias por los comentarios en la primera parte!
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"Algún día, tú tomarás nuestro lugar" Eran las palabras que mis padres me repetían constantemente cuando era niño.
No, no lo hacían para poner presión sobre mis hombros, respecto a trabajar en la mansión Plisetsky. Usualmente era su respuesta, cuando luego de un arduo día de trabajo, ellos llegaban agotados a casa y yo preguntaba que podía hacer para aliviarlos.
Esa era la rutina de nosotros, los hijos de los sirvientes de esa familia. Vivíamos en las casas colindantes a los territorios de la mansión. Nunca abandonábamos los territorios, pero tampoco era como si fuéramos prisioneros.
La familia Plisetsky era muy amable. Contratando institutrices que se encargaran de enseñar a los hijos de sus empleados y a niñeras que los cuidaran mientras sus padres trabajaban en la mansión.
Querían sirvientes letrados, con los cuales fuera ameno pasar el rato. No simples títeres dispuestos a seguir órdenes. O eso es lo que había escuchado hablar a mi padre con sus amigos durante algunas de sus reuniones.
Todos los niños teníamos claro lo que seríamos de adultos.
La única diferencia, es que yo era el primer omega que nacía en mucho tiempo.
Mi familia llevaba más de diez generaciones sirviendo a esa familia. La historia de cómo terminamos trabajando en esa mansión me era repetida de vez en cuando, cuando el frío era intenso y tenía que sentarme frente a la chimenea junto a mis padres.
Al parecer hace mucho tiempo, cuando un Katsuki salvó la vida de un Plisetsky allá en Japón. Hasta esa época mis parientes se dedicaban a administrar aguas termales, pero siendo estafados por una de las familias más poderosas de la región, terminaron en la calle perdiendo todo.
Fue allí cuando impidieron el asalto de la cabeza al mando de la familia Plisetsky de esos años.
A cambio se les concedió un empleo y el derecho de poder viajar a Japón a visitar a otros de sus parientes de vez en cuando.
Allí fue cuando mi padre conoció a mi madre, una joven omega a la cual se llevó con él en busca de un buen trabajo.
Entonces ocurrió.
Mi nacimiento fue una noticia que impactó profundamente a mis padres y a mis, entonces vivos, abuelos.
Yo no era un beta como mi padre, sino que era un omega.
Un inútil omega.
Que había sido enviado a la mansión por primera vez, ya que eran necesarios más sirvientes, y no hizo más que arruinarlo todo.
¿Cómo pude ser tan mediocre?
Había practicado mucho para eso. En todos los ensayos podía servir y actuar como un sirviente a la perfección.
Sin embargo, estando allí con todas esas miradas denunciando mi condición. Esas manos tocándome de una manera indecente cuando nadie parecía ver. Esos alfas que se encargaban de usar tonos de voz más autoritarios de lo normal solo para hacerme sentir nervioso.
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❀ Brotes de Invierno ❆ 【 Omegaverse】「𝒴𝓊𝒴𝓊𝓊」
FanfictionEn esa mansión había dos chicos compartiendo nombre. Por un lado, estaba el joven heredero de la renombrada familia Plisetsky, Yuri. Un alfa con un carácter demasiado difícil según su abuelo. Por otro lado, estaba Yuuri. Un omega que acababa de...