C a p í t u l o 6.

97 8 0
                                    

~Una semana después.~

Estábamos en el restaurante, desayunando como siempre.
Ya habíamos pedido la orden, sólo faltaba a que la llevaran.

Alonso: Jos, acompáñame al baño.
Jos: Claro, vamos.

Nos levantamos y fuimos al baño. Hice mis necesidades al igual que Jos. Nos estábamos lavando las manos, cuando sentí unas gotas en mi cara. Jos me había aventado agua.
No había nadie, más que nosotros, no me quede atrás he hice lo mismo. Le aventé agua, Río y empezó una guerra de agua.
De pronto se me había ocurrido embarrar en su rostro jabón.
Así que me acerque y puse un poco en mi mano, me acerqué a él y se lo embarre en su cara.

Jos: Es jabón, No se queda así, Villalpando.

Hizo lo mismo que yo y me embarro jabón en la cara. Empezamos una guerra, el jabón y el agua se juntaron y se hizo espuma. Nosotros reíamos al ver como quedábamos él uno y él otro. El agua está regada por el suelo, nuestras caras con jabón. Podía suponer que las risas se escuchaban fuera del baño.
De pronto se abrió la puerta y entro un hombre, un poco grande.

Hombre: ¿Qué están haciendo? Esto es un desorden. Iremos con sus mamás. No puede ser que hagan esto.

Estaba molesto. Salimos con él del baño. Señalamos a nuestras mamás y fuimos hasta ellas.

Mamá: Al fin llegan. Tardaron muc... -Volteó a vernos.- ¿Que les paso?
Alonso: Mamá...
Hombre: ¿Ustedes son sus mamás?
Marina: Sí, ¿Usted quien es?
Hombre: Soy el dueño de este restaurante. Sus hijos hicieron un gran desorden en el baño.
Mamá: ¿Que? ¿Como?
Hombre: Jugaron con el jabón y el agua, hicieron espuma, estaban haciendo una guerra. El agua está regada por el piso. Les pido de la forma más atenta que hablen con ellos. Por favor.
Mamá: Una gran disculpa, señor. No volverá a pasar. -El señor no dijo nada y se fue.- Nos iremos al hotel, ahora mismo.

Estaban enojadas, se notaba en sus miradas. Salimos del restaurante y fuimos al hotel. Entramos a nuestra habitación.

Mamá: Por eso tardaron tanto. El señor los tuvo que poner a limpiar el baño.
Jos: Perdón, en cerio.
Mamá: Debieron haberse disculpado con el señor, no conmigo.
Marina: Ella tiene razón. Ahora olvidemos eso. Vallan a lavarse la cara.

Asentimos y fuimos al baño.
Nos empezamos a reír, fue gracioso. En verdad.

"Mejores amigos."Donde viven las historias. Descúbrelo ahora