Ese pedacito de mundo

Respirar

Skay sonrió al ver su currículum ya terminado.

Y aunque ya sabía lo que decía de memoria volvió a leer el apartado de "habilidades y conocimientos". Esa era la mejor parte.

Idiomas: -Inglés avanzado -Español avanzado -Árabe promedio -Chino básico -Alemán básico -Francés básico -Italiano promedio -Portugués básico -Ruso básico -Coreano promedio -Hebreo promedio.

Apretó guardar y volvió a sonreír. Eran estos momentos cuando le encantaba tener memoria fotográfica.

Divago durante un par de segundos sobre los rostros de la gente que la acompañaba en la cafetería que se encontraba, escupiendo el agua que no estaba tomando al encontrar a ese chico con intensa mirada marrón mirarla desde el otro lado del local con casi la misma expresión de sorpresa que la suya.

Pestañeó con fuerza y volvió a abrir los ojos solo para asegurarse que no era una alucinación por falta de sueño.

Seth seguía ahí.

Tomó aire sintiendo que no le llegaba oxigeno a los pulmones cuando vio como el chico se acercaba a ella, cambiando la cara de sorpresa que tenía hace un segundo por una sonrisa.

Esa sonrisa que a Skay le parecía perfecta a pesar de que no lo era. Divisó a lo lejos las distintas direcciones que tomaban sus dientes y al mismo tiempo la sonrisa más segura que jamás había visto.

Skay se recordó a si misma que significaba respirar justo en el momento en que Seth se sentó en frente y al hacerlo solamente pudo reír.

Reír porque al parecer el destino la encaminaba a conocer a ese extraño de intensa mirada marrón y sonrisa imperfecta que la volvía loca y hacia que la palabra respirar perdiera todo significado para su cabeza.

Escuchó a Seth reír junto a ella y supo, en ese preciso momento, que jamás volvería a no necesitar amigos.