XIII

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"Mangel" Ruben llamó la atención del peli-negro, ambos caminaban por el parque, y es que Mangel quería que Ruben no se deprimiera más, así que lo invitó a pasear.

Una ola de sentimientos se movía de allá hacia acá en su cabeza sin hallar respuesta de que lo hacía actuar así con este chico.

"¿Qué pasa?"

"¿Por qué tú no estas tan delgado como yo?"

Eso Mangel no lo vio venir.

"En Internet... vi una página que decía que algunas personas con bulimia tiene por un tiempo un peso normal, pero obviamente tienden a bajar mucho con el tiempo"

"Uhmm" Ruben se interesó en unas personas que a lo lejos venían en su dirección caminando, cuando las reconoció reaccionó alarmado "Vamos por otro camino Mangel"

"¿Por qué?" él no captaba el motivo de su reacción, hasta que esos chicos (tres) estuvieron lo suficientemente cerca, y rápidamente el castaño se escondió detrás de Mangel.

"Miren quien esta aquí, el niñato anorexico y su novio golpeador" dijo uno de esos chicos.

"Hey, cuida tus palabras estúpido" le advirtió Mangel, mientras cuidaba que no se acercaran a Ruben.

"¿Qué? ¿Me vas a golpear a mi también?"

"Lo haré si no dejas de joder"

"Calmate, ya tenemos suficiente con que ese esqueleto nos haya metido en problemas, porque no se puede defender por si mismo, como en una pelea"

"¡Sí puedo!" dijo saliendo detrás del peli-negro, exponiéndose.

"Oíste Mangel, el saco de huesos quiere que le de una paliza, ¿nos ayudas? Porque demostraste que puedes golpearlo y no te entrega con los maestros"

"Dejen a Mangel, eso fue sólo una vez, fue un error que no volverá a cometer" Ruben también lo defendía.

"¿Qué Mangel, si es tu noviecito?" dijo el chico mientras sus amigos se reían.

"¿Y que si sí es mi novio?" respondió firme Mangel, y le brindó un puñetazo al chico, casi haciéndolo caer, y enseguida de su nariz comenzó a salir sangre.

La gente adulta comenzó a acercarse, viendo si era necesario separarlos.

"Que chorrada, vamos" dijo el chico molesto por el golpe y porque si seguía el pleito los arrestarían "me las vas a pagar" apuntó a Mangel, pues lo hizo pasar una vergüenza.

"E-eso, estuvo cerca" dijo Ruben mientras veía a los chicos alejarse, volteó buscando a Mangel, pero ya no estaba "¿Mangel?¡Mangel!"

Lo veía alejarse por el trayecto hacia sus casas, y lo siguió corriendo, llegaron a un lugar del camino despejado donde no había mucha gente, y había mucho campo a los lados del camino.

"Mangel, ¿por que no me avisaste de que ya nos íbamos?"

No respondió.

"Mangeeel"

Hizo que se detuviera. Lo alcanzó y al hacer que volteara se encontró con su rostro en lágrimas.

"No llores, no te hicieron nada"

"Es que no es por mi, es por ti, es horrible escuchar esos estúpidos comentarios, y parte de ellos son por mi culpa"

"Mangel..."

"No debí despreciarte, no debí golpearte"

"Pero no me molesta ya eso"

"Perdóname Ruben" gimió Mangel mientras lo abrazaba, en su voz el arrepentimiento de corazón de podía sentir.

Ruben le devolvió el abrazo, con muchas fuerzas.

"No pienses en lo malo, sino en lo bueno, tu me defendiste y eso fue muy lindo" Ruben dijo.

"Supongo..."

"Estoy seguro de que me puse como un tomate cuando dijiste '¿Y que si sí es mi novio?' "

Mangel rió "Bueno, sólo quería que se callaran"

"Jaja sí. Sonríe Mangel"

Pronto comenzó el castaño a hacerle cosquillas y así se inició una guerra hasta que cayeron rendidos en el césped al lado del camino, aun riendo.

Veían al cielo,y Ruben sin mirarlo dijo: "Te quiero Mangel"

Mangel si volteó a verlo, pues lo tomó por sorpresa.

"Yo también comienzo a apreciarte Ruben"

Ambos se pararon.

Ruben le dio un beso de repente a Mangel en la mejilla, y éste reaccionó de buena manera sonriéndole, y siguieron su camino hacia sus casas, mientras Mangel tomó su mano.

Ana y Mia | Rubelangel Donde viven las historias. Descúbrelo ahora