Capítulo 11

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Le miro y no es nada menos que Henry, me alegro mucho de verle, después de todo no llevo ni una semana en este estúpido internado y ya le echaba de menos. Oigo un carraspeo de garganta echo a propósito y no es nada menos que Katti mirándome con cara de.. ¿no me lo vas a presentar estúpida? Rio por a verme imaginado a Katti diciéndome eso y me preparo para presentarlos.

-Henry ella es Katti mi compañera de internado y Katti el es Henry mi novio- sonrío al decir eso, la verdad es que sonaba bastante bien, veo a los dos hablando de nose que y río, la verdad es que no me esperaba que fuesen tan amigables los dos, después de todo Henry es a veces muy tímido

Tú lo dices Jane.. a veces

Estúpida conciencia siempre tiene que estar arruinándolo todo, de no ser por que me siento observada empezaría a pelear con mi conciencia, miro a todos lados y veo a mi hermano mirándome y pasando una mirada rápida a Henry, y si os preguntáis que a mi hermano le caía mal, eso es muy poco comparado con el odio que le tenía y la verdad no entiendo porque, nunca me lo a contado

-¿Puedes dejar de mirarme así? Pareces un loco recién salido del manicomnio

-¿Se puede saber que hace ese aquí?- espeta con odio

-En primer lugar tiene nombre, y en segundo lugar visitando a su novia, ¿qué tiene de malo?

-No es como tu piensas Jane, te va a hacer daño, solo esta jugando contigo

-Deja de decirme estupideces, ¡siempre estas igual!- noto como mi respiración está agitada, y mi voz llena de oído al dirigirme hacia él- Siempre estas igual, ¿no lo ves Jack? Ya no soy una estúpida niña como tu piensas que soy, me tienes arta- Le grito, le grito todo lo fuerte que puedo mientras unas lágrimas corren por mis mejillas.

Siempre me ha hecho sentir que soy una niña y que no puedo cuidarme sola, se que es mi hermano y que se preocupa por mí pero no puede decidir de quien me puedo enamorar y de quien no, y mucho menos de juzgar a una persona sin conocerla.

Siento como unos brazos me rodean y me pegan hacia el, puedo saber de quien se trata con solo oler aquella colonia que siempre utilizaba

-No llores pequeña, todo va a estar bien ¿si? No pasa nada, ya estoy acostumbrado

Aquellas palabras son las que realmente me hacen quererle cada vez más y más siempre está ahí para apoyarme pase lo que pase y se lo agradezco muchísimo.

Cae la noche y Henry se había tenido que regresar ya a su casa, y me quedé viendo series o películas como solía hacer cuando estaba en casa, no era de esas chicas que todos los días salían ni mucho menos, pero si que de vez en cuando no está nada mal.

Veo que alguien entra a mi habitación y enciende la luz, veo a Katti con el pelirrojo dandose el lote y me dí cuenta que no habían notado mi presencia

-Eh vosotros,¿porqué no lo hacéis en privado?-Se separan corriendo y yo no puedo evitar reírme, me miran mal y paro de reirme

-Yo.. creía que estarías en la fiesta que daban hoy de bienvenida, todo el mundo esta allí- Jorge no para de sonreir, y los miro son tan monos..

-Bueno bueno si solo queréis privacidad solo tenéis que decirmelo, no pasa nada- río y me pongo una sudadera que me había regalado mi hermano, en estos momentos lo oidaba, pero eso no quitaba el echo de que esta sudadera no fuese calentita.

(...)

Me siento en unos de los bancos del campus, me pongo mis cascos y los enchufo a mi móvil para ponerme un poco de música, veo a un chico y una chica a lo lejos pero no les doy importancia ya que seguro que serían de la fiesta, estában sentados en en el árbol comiendose los labios, me fijo mejor y veo que es el estúpido de Dylan y Paola hago una mueca de asco y sigo a lo mío.

No Soy Un ChicoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora