Rentando a mi ex (camren)

Capitulo 2

Eran casi las dos de la mañana y yo no podía dormir, esto sería más difícil de lo que pensé. La imagen de Lucy invadió mi mente, debe estar odiándome en estos momentos, solo un par de semanas y listo. Cuando por fin el sueño intentó llegar a mi, escuche un golpe fuerte, me asusté y salí de la habitación lo más rápido que pude a ver qué sucedía.

—pero qué demonios—Camila estaba sentada en el sofá y el piso estaba lleno de vidrios. Parece que había estado bebiendo,  frustrada vi que se levanto tambaleando y se agachó a intentar recoger el desastre que había echo, pero al parecer se lastimo, me acerqué cuando vi un poco de sangre caer por su brazo—ven acá, vamos a curarte eso—sus ojos estaba entre abiertos y su aliento tenía una fuerte concentración a licor, nunca la vi en ese estado

—aléjate—lo dijo con un tono suave y arrastrando las letras—no necesito tu ayuda

—tienes sangre, no quiero que luego me acusen por dejarte morir—la tome del brazo sano pero ella se echó para atrás—no hagas esto difícil Camila, mira cómo estás y se supone por la mañana tendremos que ir al aeropuerto

—no quiero ir y estoy bien. Casi no he tomado—yo reí porque apenas podía mantenerse en pie—solo necesito esa botella—señaló los vidrios rotos—y todo estará bien

—acabas de romper esa botella Camila, ven acá estás muy mal—comenzó a balbucear cosas que no logre entender, parecía una niña pequeña. La lleve a la que supuse era su habitación y la senté en el borde de su cama. Fui a buscar en el baño un botiquín para poder limpiarla, parecía una herida un poco profunda. Cuando salí la vi sentada en el piso llorando.

—mi mano saca algo rojo y me duele—yo reí

—es sangre Camila, te cortaste—me agaché y comencé a limpiar su brazo, ella hizo muecas de dolor—respira, ya casi está listo

—¿porque jugaste conmigo Lauren?—lo dijo tan bajo que apenas escuche, eso me tomo como un balde de agua fría, preferí no hablar y vende su herida

—Creo que tienes que descansar, ven te ayudaré a acostarte

—me ayudas con la ropa, no puedo—me reí al ver como intentaba desabotonarse la blusa, al final no era la primera vez que la veía desnuda. Pero esta vez solo sería por su estado, para nada más. La ayude con sus zapatos y el resto de su ropa, me indicó en donde guardaba una de sus pijamas y también le ayude a ponérsela.—iré a traerte agua, no quiero que mañana amanezcas con dolor de cabeza—fui lo más rápido que pude y ella se acabo de un solo trago el agua—de acuerdo, ahora a dormir.

—no te vayas, ¿puedes quedarte unos minutos?—trague—solo hasta que me duerma, por favor —hizo un puchero y ella sabía que no me podría resistir si hacía eso, accedí solo por unos minutos, me obligó a recostarme a su lado y me abrazo, no pude moverme hasta que cayó dormida, intente salir de la cama lo más lento posible para que no se despertara. Apague la luz de la habitación, respire hondo y susurre un "buenas noches Camz, dulces sueños preciosa"

Había dormido apenas un par de horas, el "¿porque jugaste conmigo Lauren?" Resonaba en mi cabeza. Porque todos pensaban eso, nunca les di motivos para que pensaran que yo no la quería. Nuestro vuelo saldría pasado el medio día y seguramente ella estaría de mal humor después de todo lo que tomó. Tome una ducha y salí con una ropa cómoda. Tendría que limpiar el desastre de la madrugada y levantar a Camila para que se alistara.

Salí se la habitación y me encontré con la gran sorpresa de que todo estaba totalmente limpio y olía a pancakes recién hechos. Alcé la vista y ahí estaba ella, arrimada al mueble del lavabo con una taza en su mano.

—buenos días Lauren—me dijo y se veía algo cansada

—buenos días—me limité a responder

—quería disculparme y agradecerte por lo de anoche, no volverá a pasar—solo la mire y asentí—te prepare el desayuno, sé que te gustara—me senté y ella hizo lo mismo, me acerco el plato y lo probé, estaba realmente bueno. Cuando ella se quedaba en mi casa preparaba con ayuda de mi madre este desayuno, sabía que me encantaba. Sentía su mirada pero intente concentrarme en el desayuno—¿te comió la lengua un ratón?

—prefiero no decir nada. Pero gracias por el desayuno—tome otro bocado de mi comida

—solo intento ser amable contigo Lauren. Pero mejor me iré a cambiar, no se para que hice esto—se levanto y desapareció del comedor, al finalizar lave mi plato y regrese a la habitación en la que estaba. Me quede ahí hasta que Camila solo grito un "nos vamos" para avisarme que ya era tiempo de salir.

El camino hacia el aeropuerto fue bastante incomodo porque ella se mantenía concentrada en el camino y  yo miraba a la ventana. Así nos mantuvimos hasta llegar al avión, nos sentamos en primera clase.

—mis padres estarán esperándonos en el aeropuerto, tu trabajo comienza desde que bajemos de este avión. Finge como siempre una relación conmigo y estaremos bien. Al regresar del viaje eres libre—asentí, pero me molestaba que cada que  mencionaba algo sobre nosotras decía las típicas palabras "finje" "como siempre" "juego". Me estaba empezando a cansar pero preferí no decir absolutamente nada.

Bajamos del avión, tomamos nuestras cosas y yo como iniciativa tome su mano entrelazando nuestros dedos. "Respira Lauren respira" me dije a mí misma tratando de que mi corazón dejara de latir tan rápido, ella me miró sin ninguna expresión pero pude ver un pequeño brillo en sus ojos.

—Lauren, un gusto verte después de tanto—me abrazo su padre

—señor Cabello, el gusto es mío. Gracias por invitarme—el río

—volvemos a lo mismo Lauren, dime Alejandro. Eres de la familia no podías faltar—me sentí incomoda

—un gusto verte—me abrazo su madre

—el gusto es mío Sinu, me alegra estar aquí—me sonrió

—vamos, tienen que alistarse para la cena. Ira gente importante de la empresa y necesito que Camila—la señaló—estés lista porque en un par de meses una de las empresas estará a tu nombre—la regrese a ver y ella se vio nerviosa.

Comenzamos a caminar, ellos delante de nosotros y yo de la mano de mi "prometida"

—saldrá todo bien, relájate un poco—ella sonrió levemente—no perderás nada ni te casarás con Mahone

—gracias por acceder a ayudarme—asentí

—solo te pido algo aparte del trato—me miró para que continuara—antes de terminar el viaje, solo quiero que me dejes hablar sobre lo que pasó esa noche. Solo quiero aclarártelo.

—de acuerdo, pero no es el momento. Tenemos una relación que aparentar—eso me dolía más que nada, fingir algo que realmente siento por ella.