Rentando a mi ex (camren)

Capitulo 4

Todos los recuerdos de esa noche se habían tatuado en mi mente, no podía sacarlos por más que lo intentara y no quise que otra persona entre a mi corazón después de Lauren, le había dado todo de mí y ella solo lo tiro a la basura.

3 años antes...

—Camz, te tengo una sorpresa. Pero antes tienes que cubrirte los ojos—asentí y ella me cubrió la vista, me subió a su auto y cuando llegamos no tenía ni la menor idea de en donde estábamos. Me ayudo a bajar y caminamos un par de minutos, ella me guiaba hasta que me hizo sentar en lo que parecía ser un tronco. La suave melodía de Thinking out loud-Ed sheeran sono en la guitarra, su grave y ronca voz comenzó a cantar, me quite la bufanda que tapaba mi visión y ella se veía preciosa, estaba con su típica chaqueta de cuero negra, su camiseta de 1975 y unos pantalones rotos de color claro. Cuando terminó, me tomo de la mano y me hizo caminar hasta una cabaña que estaba llena de pétalos y sobre una cama un gran ramo de rosas, ella me tomo de la cintura pegándome a su cuerpo y me besó, se tomó el tiempo de recorrer toda mi boca y de ser muy delicada, cuando el beso acabo por falta de aire, mire a mi alrededor y ahora todos nuestros amigos estaban alrededor nuestro con un gran cartel "¿quieres ser mi novia?"
—espere mucho para que lo dijeras, claro que quiero ser tu novia Lolo—la volví a besar de forma tierna y todos aplaudieron. Después de pasar un tiempo con ellos, Lauren y yo habíamos tenido nuestra primera vez juntas, yo tenía 16 y ella uno más que yo

Ahora las lágrimas no dudaron en escapar y correr por mis mejillas, habíamos tenido momentos tan bonitos, más de un año de relación, y poco más de tres de conocernos antes de separarnos. Y ahora la tenía aquí, probablemente ahora está recostada en "nuestra gran cama" durmiendo plácidamente, pero todo esto solo era una farsa de la vida que nos hubiera correspondido juntas.

—hija ¿estás bien?—sentí una mano en mi hombro acariciarme, era mi madre. No podía decirle la verdad, pero tampoco podría mentirle, nunca lo había echo.

—si ma, estoy en mis días sensibles y tuve una pequeña discusión con Lauren, sabes lo llorona que me pongo en estos días—me besó la frente y limpio mis lagrimas, yo le di una falsa sonrisa

—deberías ir a descansar, mañana tendremos un largo día. Tu padre insiste en ir a ver a los delfines y no sé qué más se le vaya a ocurrir—me sonrió y se quedó de pie a mi lado—ve a hablar con Lauren, desde aquí sentada no creo logres hacer mucho para arreglar lo que haya pasado entre ustedes dos. Y calma un poco tus hormonas, ella no merece tu mal humor—me levante y ella me acompañó hasta la puerta de mi habitación, me dio un beso en la mejilla como despedida y me dejo sola.

Suspire y entre, Lauren no estaba dormida, era tarde y no la esperaba despierta, estaba sentada mirando a la ventana con las manos en su cabeza, como si estuviera pensando. Se giró a mirarme, luche contra mis sentimientos y la ignore. Entre al baño, me cambie de ropa y me recosté dándole la espalda. Me sentía cansada por el viaje y el haber llorado me debilitó más, caí dormida en unos minutos.

Cuando desperté mire al otro lado de la cama y vi el espacio de Lauren totalmente vacío, mire por la habitación y no había rastros de ella. Por una parte me alegré al saber que no vería lo hermosa que es al despertar, porque me dolería y si en caso de que ella inténtase algo, sabía que me sería imposible el resistir querer todo con ella ¿quién no caería rendido en esos ojos verdes?.

La puerta sonó y levante mi vista, Lauren apareció con una bandeja llena de comida y una sonrisa en su rostro

—buenos días, ayer te vi algo mal. Y pensé que sería bueno de mi parte traerte el desayuno para que recuperes energías, en un par de horas saldremos con tus padres—me pregunto ¿qué demonios intenta?—se lo que piensas, no intento hacer nada. Solo pensé hacerlo—dejo la bandeja al lado de la cama en un pequeño mueble y se lanzó a su lado del colchón, prendió el televisor y puso el canal de noticias. Siempre tuvo una pequeña obsesión con la política y las cosas que suceden en el mundo, desde que la conocí es la persona más informada que puede existir en el mundo.

—no creo tener mucha hambre, pero de todas maneras gracias—apago la televisión
—entonces no lo comas—se levanto y salió de la habitación

Aceptó que tuvo un lindo gesto al traer mi desayuno a la cama, pero su reacción es bastante infantil. Solo tome un poco de la fruta que había y me termine el jugo, las tostadas y el café las deje en la bandeja. Me levante y me puse un bikini azul de dos piezas, todavía tendría un par de horas para relajarme aquí en casa, tome una toalla y baje a la piscina.

—¿cómo está el bebe?... Si... aja... tranquila... estaré un par de días en casa, pídele dinero a Christopher el debería hacerse cargo, luego hablamos. Adiós—Lauren estaba de pie en el borde de la piscina hablando por teléfono, supuse que con Lucia, ella no desaprovechó ni un segundo de que Lauren ya no estuviera conmigo para buscarla. Y se decía llamar "mi amiga". Lanzó su teléfono a la toalla que estaba encima de una silla, se saco la camiseta dejando a la vista su brassier negro y su tonificado abdomen. Aun, sin darse cuenta de mi presencia, todavía no se quitaba el short que traía puesto.

Como impulso me acerqué a ella por la espalda y la lance a la piscina, antes de caer sujeto mi mano y ambas caímos al agua. Cuando salió a tomar aire comenzó a reír y yo acompañé su risa.

—¿porque hiciste eso?—me miró cambiando su expresión de risa por una más seria

—solo te di un empujón, vi que ibas a entrar a la piscina—negó

—de haber sabido que tu también entrarías hubiera regresado a la habitación

—¿te molesta que esté cerca?, somos una pareja ¿lo recuerdas?

—solo cuando tus padres nos vean lo somos, y estoy tratando de hacer lo que ayer me pediste, mantendré mi distancia contigo—intentó salir pero se lo impedí, de un golpe la acerqué a mí y sin pensarlo la bese, los primeros segundos ella estaba bastante tensa, pero al ver que no la deje separarse correspondió al beso y pasó sus manos por mi cintura y yo rodee mis brazos por su cuello.

—me encantan juntas—escuche decir al fondo, era la voz de mi padre, ella se separó de golpe y lo miro con las mejillas un poco rojas—las dejare solas, venía a decirles que se me presentó un problema en la empresa que tengo que arreglar, si quieren pueden ir a la playa o esperar a mañana para ir con nosotros.

—ya veremos qué haremos hoy papa—Lauren estaba tensa pero aún con sus manos en mi cintura. Cuando se fue mi padre se relajó un poco pero se separó de mí y salió de la piscina sin siquiera mirarme.

No me arrepiento del beso que acabo de darle, realmente lo necesitaba. Y tenía que aclarar si todavía siento cosas por ella, por mi mala suerte confirme que mis sentimientos nunca desaparecieron. Ahora tendría que enfrentarme a que quizá me sienta incómoda con ella, recién había pasado un día y quedan muchos por delante que no sé cómo los manejare.

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A todos los que ya están leyendo esta nueva historia, espero que la disfruten.
Estate actualizando bastante seguido estos días ya que estoy en exámenes (nunca estudio para eso) y no me mandan deberes, por eso tengo mucho tiempo libre y porque estoy en rehabilitación por una caída, eso quiere decir que si les gusta me verán seguido por aquí.
Un abrazo,
Tami ❤️