When We Were Young

Capitulo 47

Alison

—Lo que haces con las manos lo destruyes con los pies —Aylin estaba de brazos cruzados mirándome junto a la barra.

—Ay no me jodas —subí hasta la habitación llena de rabia pero... conmigo misma.

—No te jodo, Alison. Eres una completa imbécil ¿Por qué dices y actuas como si no te importara tu mamá?

—Aylin, no quiero hablar de esto. Ya bastante mal me siento con haber dicho lo que dije —sorbí mi nariz y entré a la cama, ella al poco tiempo se fue, supongo que debe estar harta de mi. Encendí la luz de la habitación que siempre estaba apagada y vi el collar "A&A" ¿Alex y Adele? Lo mas probable.

Recuerdo

Caminaba de la mano de Angelo por toda la casa, me daba miedo soltarlo y perderme aquí, paredes blancas, mesas de cristal, una casa muy lujosa.

—Mamá —gritó Angelo

—¡En la cocina, amor! —se escuchó al final de un largo pasillo, era la voz de una mujer, caminamos por ahí hasta que llegamos a la cocina. Una mujer muy alta que vestía de jean y un abrigo azul claro estaba de espaldas a nosotros, era la mamá de Angelo.

—Hola mamá. Ella es Alison, la chica de la cual te hablé. Alison, ella es mi madre —volteó a vernos y yo algo insegura le extendí mi mano.

—Un gusto en conocerla, Alison Cooper —ella estrechó mi mano pero ella solo clavó su mirada en mi, en mis ojos y eso no lo soporto, voltee a ver a Angelo quien me miraba confundido, era como si se hubiera quedado congelada en el tiempo y con ella mi mano, aun no la soltaba.

***

Nunca me imaginé que esa mujer hoy en dia fuera mi madre, jamas me hubiera pasado por la mente. No miento cuando pensé antes de todo eso que mis padres estaban muertos, para mi era lo mejor pensarlo asi, no quería pensar en su existencia ni en el porque no crecí junto a ellos ni nada de eso. Limpié las lagrimas que estaban en mi rostro y tomé mi teléfono, busqué entre mis contactos y la primera persona que me salió fue Adele, dude un momento en marcarle pero lo hice, después de varios tonos mandó a buzon, entiendo que no quiera hablar conmigo. Seguí bajando hasta que encontré a la persona que buscaba.

—Hola Ellie...si Alex está contigo no le digas que soy yo, por favor —dije rápidamente

—Okeey, pero ¿Pasa algo? —preguntó desde la otra línea.

—Mmmm...bueno si, quizás es muy tarde para llamar, pero necesito hablar con alguien —me tumbé en la cama con el teléfono en la oreja,

—¿Quieres que vaya a tu casa?

—Si, por favor —pedí y mis lagrimas empezaron a correr.

—Llego en media hora —colgué y tiré el teléfono, preparé algo de café como me lo había enseñado Adele.

La media hora pasó como si fuera una hora, me coloqué una sudadera por el frio que empezaba a hacer, tocaron el timbre y Zeus salió como caballo desbocado ladrando hasta la puerta, lo tomé y la abrí ahí estaba Ellie, quien me abrazó y yo le permiti la entrada.

—Me tienes el alma en un hilo, pequeña ¿Qué paso? —dijo inmediatamente y se sentó en el sofá, Zeus no dejaba de olfeatearla como a todos.

—No me pasó nada malo, estoy bien... creo —dije mientras le entregaba su taza de café.

—Cuentame, no me llamaste a estas horas de la noche para decirme que estas bien...¿O si? —me miró entrecerrando los ojos y yo negué con la cabeza. Por alguna razón confiaba mucho en ella, era la madre de Alex por lo tanto mi abuela.