Loco - クレイジー

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Existe un mito que cuando llega la persona indicada todo pasa en cámara lenta. Te fijas de cada detalle.

Yuri lo aprovecho cada segundo.

Observo cada fibra de cabello gris ondeando por el viento de invierno. Lucía tan sedoso, tenía ansias de pasar los dedos para acariciarlo. Sus ojos como zafiros, impactantes, deslumbrantes y lo mejor, lo miraban él. Lo miraban con cierto asombro, pero no dejaban de mirarlo. Su rostro tan fino y detallado, como un pulcro monumento hacía un dios. Y su boca, entre abierta, como apunto de decir algo.

Pero al parecer a nadie le importaba lo que estaba aconteciendo con tales individuos. Solo ellos, solamente esas dos personas que estaban presentes entre esa pequeña manifestación de emociones.

Su vista no despego de esos finos labios.

Y entonces hablo algo casi como un susurro, un susurro que el escuchó.

— Nit' (нить)

Yuri sin pensarlo dos veces, respondió con toda seguridad.

— Ito (いと)

Estaba tan centrado en lo que pasaba, hasta cierta ventisca de aire frio golpeo hacía la dirección de él. Dando de lleno en su cara. Pudo por fin salir de ese trance para darse cuenta de lo que pasaba.

A pesar de tanta gente, tantos olores mezclados, pudo sentir cierto olor.

Ese olor, un olor.

Un olor a Alfa.

Y su interior lo reconoció. Lo reconoció como tal. Su alfa.

SU alfa que olía a las mejores cosas combinadas.

Un ligero Café, un toque de Menta y extrañamente, tan embriagante como toda su presencia a Vino Tinto.

Estaba sumergido en esas cosas que su cuerpo empezó a querer moverse hacia donde estaba él. Quería tocarlo, sentirlo y estar con él.

Antes de dar un paso, una avalancha de gente emocionada inundó el lugar más de lo que podía estar. Impedían el paso y perdió de su vista a la persona que tenía enfrente. Tantas personas aprisa se debían a que el festival estaba a punto de comenzar.

Intento buscar de nuevo con la mirada aquella persona.

Estaba desesperado, lo quería, lo necesitaba, lo necesitaba tanto.

REALMENTE LO NECESITABA.

Como un látigo, la verdad le azoto.

Estaba perdiendo la razón, por una persona que no conocía. Representaba lo que tanto temía.

El miedo regreso, haciendo presencia por lo que él solo sabía. Al encontrarlo tenía que sacrificar ciertas cosas, dejarlas, tener que abandonarlas, hacerlas a un lado, como lo era: El patinaje.

Un omega patinando seguía siendo algo difícil. La sociedad avanzaba y la mentalidad de las personas con ella igual. Los omegas tenían más privilegios. Y eso era bueno. Podían incluso estar en el medio artístico, lo que antes no era permitido y era mal visto. Podían vivir a su placer. Pero siempre y cuando no tengan lazos, en otras palabras, no estén marcados.

Y ciertas cosas seguían intervenidas por la ley.

La ley declara que un Omega al unir lazos con un Alfa, el Alfa tiene el poder de decir si el Omega puede seguir ejerciendo su trabajo o profesión.

Algo absurdo y tonto. Estúpido.

Así como otras cosas el gobierno tenía estrictamente establecidas. Había más protección, pero igual restricciones.

Ito - nit' (いと - нить)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora