La Elegida

No eres la única

Empecé a abrir los ojos, los párpados me pesaban y la cabeza me dolia a horrores, al cabo de unos cuantos intentos consegui abrirlos, di gracias a que era de noche, al ser de dia seguramente la luz habria dañado mis ojos.

Observé a mi alrededor estaba rodeada por altos arboles y la luna llena se alzaba iluminando la noche, me intenté incorporar pero no pude, mis manos estaban atadas y estaba tumbada en una especie de manta, tenía una cuerda atada al extremo de ella y una figura que no parecía humana la sujetaba, me daba la espalda y parecia que me arrastraba a través del bosque. Una piedra me rozó todo el cuerpo a medida que me deslizaban por el suelo, no pude evitar emitir un gemido causado por el dolor, al oírme la criatura se dio la vuelta y dijo algo que no pude entender, parecía dar una orden a alguien, al segundo otra criatura se acercó y me volvió a poner aquel horrible líquido en el rostro hasta desmayarme.

Me volví a despertar, esta vez estaba sentada, y ya no me movía, unas ramas me rodeaban y me ataban a un árbol, intenté librarme de ellas pero era inútil, cuanto más me movía más se ceñían. Escuché pasos, se acercaban al lugar, fingí que estaba inconsciente.

-¿Estais seguros que es ella?- Una voz femenina comenzo a hablar- Si no es ella, esta conversacion no va a tener ningun sentido, tiene que ser ella.

Otra criatura gruñio. Abrí los ojos lentamente para ver a la chica y a la criatura. La criatura era como uno de los monstruos que ví cuando hice la prueba para ver si podía liderar un grupo, la chica estaba entre las sombras asi que no pude identificar su rostro. Ella se giró para mirarme, yo intente cerrar los ojos para que no viera que estaba despierta, pero no fui lo suficiente rapida.

-Se que estas despierta, no hace falta que finjas.- Dijo la chica con calma.

Levanté la cabeza y abrí los ojos, la muchacha seguia entre las sombras.

-¿Quién eres?, ¿Por qué me has traido aquí?, ¿Qué qui...

-Cálmate,- me interrumpió la chica- no te voy a responder a ninguna pregunta, te he traido aquí con un objetivo y es lo único que voy a hacer.

Yo sorprendida me intente calmar, pero mas preguntas surgieron, ¿objetivo? ¿Qué quería de mí?

-Mira Alaia, se que no llevas aquí mucho tiempo, mucha gente te odia-espera, ¿me odian?- tú llevas allí menos de una semana y sabes hacer lo que ellos llevan entrenando durante años, otros te adoran, creen que vas a ser su salvadora, pero están equivocados, no vas a salvarles, o al menos no tu sola.
No entendía nada, hace dos días me decían que iba a salvar a todo el mundo y ahora me dicen que necesito ¿ayuda?
-Seguro que estarás confusa.
-Claro que lo estoy, no entiendo nada de lo que está pasando.
-Solo puedo decirte algo más de lo que  se- en ese momento las nubes empezaron a moverse dejando la luz de la luna iluminar parte de el rostro de la chica, esos ojos, me resultaban tan familiares- lo primero es que tu profecía no es completamente cierta, y lo segundo es...- empecé a escuchar pasos, gente corriendo hacia donde estabamos- mierda, vámosnos de aquí, dormirla rápido.
Una de las criaturas se me acercó y me volvió a dormir, sentí que las ramas que me rodeaban se iban soltando, veía todo borroso, luces brillaban por todas partes, se iban acercando, no pude aguantar más y me dormí.

                   *         *          *
Empecé a abrir los ojos, me encontraba en una habitació, pero no me parecía familiar, últimamente había estado despertandome en sitios desconocidos.
La sala estaba iluminada por los primeros rayos de luz de la mañana, me incorporé sin hacer ruido, cuando me apoyé en mis brazos volví a caer, me sentía muy débil y tenía moratones en los brazos.
-Alaia, por fin despiertas, pensaba que te había pasado algo.
-¿Qué ha pasado?¿Dónde estoy?- Miré a mi alredeor, empecé a reconocer que estaba en la enfermería, miré mi ropa, alguien me había puesto una camiseta larga pero no llevaba nada para los pantalones así que me cubrí con la manta.
-Estás en la enfermería, te encontramos en el bosque inconsciente apoyada en un árbol.
-Espera, ¿me encontrasteis en el bosque inconsciente?
-Sí, ¿no recuerdas nada de lo que te paso?
-La verdad... creo recordar algo de lo que pasó.
-¿De verdad?- Dijo Luke sorprendido a la vez que se acercaba más a mí para poder escuchar mejor.
Me intenté incorporar, Luke me ayudó y me puso un almohadón para que fuera más cómodo.
-Gracias. Una chica me secuestró, y me llevó al interior del bosque.
-¿Sabes quién era?
-No la pude llegar a ver todo el rostro, pero llegué a ver sus ojos, me resultaron muy familiares. ¿Te acuerdas el día que fui a recoger las plantas para la prueba?
-Sí
-Vi unos ojos, por eso empezasteis a hacer guardia. Creo que eran la misma persona.
-Entonces alguien de La Sombra te sucuestró.
-No, ella parecía querer ayudarme. Me dijo cosas que según ella podrían ayudarnos.
-¿Qué te dijo?- preguntó Luke confundido.
-Dijo que la profecía sobre mí no era completamente cierta.
-¿A qué se refería con eso?
-No lo sé, pero también me dijo algo más. Que no soy la única que nos salvará.