Hasta ahora me había permitido imaginar la imagen ideal de la persona a la que estoy destinado y que nunca había visto.
"Por favor, que sea una chica bonita y tierna".
Pero todas mis plegarias al meñique fueron en vano.
-¿Hoseokkie, de dónde eres? -pregunta una de sus compañeras, las cuales habían rodeado el pupitre del chico nuevo.
-¿Tienes novia? Seguro que si, ¡eres tan genial! -pregunta otra con un suspiro soñador.
Y pensar que la persona a la que estoy destinado es un chico también.
TaeHyung nota el peso del hilo rojo colgando entre él y Hoseok, quien al final ha acabado sentado en el pupitre que hay al lado suyo.
Estoy tan afectado que podría llorar.
El moreno suspira mientras mira el dedo meñique con el ceño fruncido.
No importa por donde lo mire, no puedo creer que éste sea mi destino.
Sigue mirando el dedo meñique, sin notar que su nuevo compañero le mira con curiosidad.
Y pensar que me voy a enamorar de Hoseok. ¡Un hombre!
TaeHyung se da cuenta de la mirada del azabache, y aparta la vista rápidamente, sonrojándose mientras tumba la cabeza entre sus brazos encima del pupitre.
-¿Qué te pasa TaeTae? -pregunta una de sus compañeras -Hoy estás actuando de una manera muy graciosa.
Me pregunto...cuando se enamorará él de mí...