Estoy aquí, recordando tu ausencia, entre los brazos de la oscuridad de mis cuatro paredes, que albergan el dolor, lágrimas y tristeza que mi ser emana por tu ausencia.
Cada noche es un suspiro que me persigue, para darme cuenta que es tu ausencia la que me duele, ausencia que proviene de no mirarte', no sentirte, no escucharte y no verte.
Pasa el tiempo, es verdad, pasan las horas sin poder olvidarte, ven de nuevo a mi vida por que me he vuelto tan pequeña en medio de la inmensidad de tu recuerdo, soy tan diminuta para este mundo.
Esa mirada tan fragil, llena de amor y con tanta sinceridad era la fuente de energia que impulsaban mi vida. La forma tan delicada de seguir mis pasos, aun cuando las prisas me arrastraban a aumentar la distancia entre nuestros cuerpos, esa manera tan sutil de reclamar mis ausencias con una sola mirada, una sola caricia que me devolvia la vida.
Como no seguir extrañando a quien te enseño que tener una lagrima en el rostro no era una debilidad, era aprender a vivir. Mi vida comenzó cuando tu presencia se compaginó con la mia y me enseñaste a disfrutar cada minuto de mi existencia, a disfrutar el dolor tanto como la alegria.
Es la oscuridad ahora quien me hace recordar que tú no estas, que me hace olvidar que no estoy sola, ¿como realizo un cambio tan grande en mi vida? Si eso involucra decirte adios, ¿como hago para no sentir tu ausencia?, ¿como seguir viviendo en la inmensidad de tu ausencia? Si eso es lo mismo que aceptar que he muerto aunque mi corazón este latiendo.
Dejarte marchar es mi manera de devolcer un poco de aquel amor que tu me diste al dejarme volar.....
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pensamientos de una simple mortal
De TodoMil caminos....Un laberinto....Una vida.... ¿Sabes cual es tu camino?