Aún conservo las flores que me diste: esa única planta de buenas tardes que trajo color a ese jardín vacío que se explayaba en mi pecho, que impregnaban con su aroma a esperanza cada recoveco solitario de mi templo.
Durante este tiempo se han convertido en un espejo resquebrajado que refleja las promesas y palabras caídas en combate antes de atravesar tus labios y cada vez que intento recoger los cristales rotos termino abriéndome viejas heridas.
Sigo sin entender porque sigo dándole el poder de ilusionarme a imágenes eidéticas de mentiras pasadas. Tal vez se deba a que pensé que serias un héroe (tranquilo, ya no espero que vengas a salvar el día [tan seguido como antes])
Fueron tantas las veces que me hundí... y me observaste ahogar en un río de lágrimas, perdida entre ilusiones rotas y verdades halladas.
Pero nadé contracorriente y encontré la fuerza para entender que el río de lágrimas me limpió profundamente.
Entonces me di cuenta de que las piedras, por pequeñas que sean, permanecen en el fondo; y los cuerpos, incluso muertos, flotan.
Ahora me di cuenta de algunas flores sin importar lo bonitas que sean; se arrancan.
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Lore, si lees esto: no me pegues (y no mandes a Maru :c) lo último no es literal, las plantas no se cortan :c
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Respirando Letras.
PoesíaEs cierto. Es cierto que lo que grita nuestra mirada es un torrente de pensamientos y sentimientos que se acumulan en nuestra garganta. Es cierto que las palabras se quedan atascadas en el fondo de nuestra traquea calcinándonos la mente. Llega un...