00:11

14 2 0
                                    

Los ojos rojos y no precisamente por llorar.
La mente en otro lugar y no precisamente por pensar.
La risa suena y no porque algo gracioso sucedió.

El humo está en la habitación.
La música es superficial.
No huele bien.
Tampoco huele mal.

Un toque.
Dos.
Tres.
Y la piel se eriza.

Sus miradas se encuentran.
Sus manos se juntan.
Sus latidos se aceleran.

Se acercan.
Sus labios se chocan.
Se besan.

Se tocan sobre la ropa.
Se tocan sobre la piel.
Cabello.
Sudor.
Gemidos.

La tensión se acumula.
Siguen moviéndose.
Ella gime 
Él gime.
Ambos estallan.

Se ven.
Se observan.
Se vuelven a tocar.

Ella le sonríe.
Él la vuelve a besar.

Y así siguen.
Toda la noche.
Hasta que el sol vuelve a salir.

Se visten.
Se despiden.
Y no se vuelven a reunir.

EscritosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora