Take me home- Camren (Parte 1)

Capitulo 2

 Hoy tan solo nos dedicaremos a una sesión de fotos. Esperamos a aproximadamente 8 modelos de una nueva agencia de publicidad llamada "180°".  Su central se encuentra en New York, pero prefieren realizar las fotos a las fuera para que no se filtren. Suena lógico, además de cómodo para mí ya que no tendré que transportarme con todo mi equipo y por supuesto no tengo que dejar a Sophie.

El par de horas que nos quedan no dedicamos a armar el estudio. No sabemos qué es exactamente lo que nos van a pedir, así que solo armamos lo básico y a la hora pautada llega el productor con 3 modelos. 

Como pensamos, no era nada exagerado. Posaron con 3 cambios cada una, a las dos horas llegaron 2 modelos más pero la tercera se retraso por algún motivo, así que comenzamos con las que ya estaban, realmente la ropa era bonita, y mi amigo estaba en su salsa sugiriendo algunas poses y colores de fondo para lucir mejor el outfit, una vez que terminamos no piden concretar otra cita al día siguiente, ya que hay 3 modelos que aun no hay posado.

- Hey Laur, creo que deberías ver esto. – dice mi socio desde la puerta.

- ¿Olvidaron algo?

- Mmm, no precisamente, solo quieren presentarte a la protagonista de la campaña... - dice algo inquieto.

- Es fea? ¿Le faltan dientes? ¿Tiene granos?

- Ojala... Pero deberías verlo tú misma

- Dios, puedes dejar de dar vueltas señor moda- digo dejando mi cámara en el trípode para pasar por su lado..

- Espera – dice tomándome del brazo – solo, tómalo con calma, ¿está bien?

Me pareció ver un estribo de preocupación en su mirada. Si no fuese Shaun"la Reyna de la exageración" tal vez me preocuparía.

Pero sigo sin entender su advertencia, y me acerco al mostrador y veo un hombre de unos dos metros parado.

Él no puede ser, dijeron que eran todas mujeres.

- Me gusta secuencia de aquí – dice una persona cerca del ventanal del otro lado del mostrador.

Giro mi cabeza hacia esa voz sonándome familiar. Veo una mujer mirando las fotos promocionales de la vidriera. No debe estar hablándome a mí, si estuviese loca diría que es....No. No puede ser. No me permito ni siquiera pensar en ella.

Demonios, me dan escalofríos de tan solo imaginarla.

- Podríamos probar algo como esto, ¿verdad? – pregunta señalando una foto mirando al grandulón delante mío.

Y cuando finalmente se gira mi corazón se detiene, palidezco completamente.

No.

No, otra vez.

No puede estar sucediendo.

Sus ojos, sus increíbles faroles castañol se posan sobre mí y al parecer ella tampoco me esperaba.

Su mirada la delata, siempre lo hizo.

Quiero correr, gritar, llorar lo que sea. Pero mi cuerpo se congela.

- Laur...en – dijo ella completamente tensa.

No puedo hablar, aunque quiera, esta mujer parada frente a mí, fue la causante de muchos problemas en mi vida.

Perdí, gane y volví a perder gracias a ella.

Camila, Camila Cabello, la mujer que me abandono hace poco más de dos años.

- ¿Que... que haces aquí? – digo como puedo. Mi voz me traiciona.

- Lo.. lo siento, no sabia que era... que tu..

- ¿Se conocen? – pregunta el alto.

- Niall.. ella es Lauren. Lauren Jauregui una...... antigua amiga.

Ni siquiera me molesto en ocultar mi cara de incredulidad.
"Antigua amiga".

¿En serio ella acababa de decir eso?

- ¡Genial! ¡Las cosas saldrán mucho mejor por aquí! – Exclamo el tal Niall – Por cierto, Liam pidió exclusivamente su sesión de fotos para ti. Las demás pueden esperar...

¿Una jornada de trabajo? ¿Sola con Camila?

No. Definitivamente eso no puede suceder.

- Tengo algunos compromisos para mañana – digo esquivando su mirada – pero puedo pedir a mi socio que realice las fotos.

- Me temo que no va a ser posible. Te quieren a ti – contesto él.

Mierda, se que tiene razón.

- Niall, puedes esperar en el coche? – pide Camila sin quitar sus ojos de mi.

- ¿Qué?

- Solo espera en el auto NIall, me gustaría tener una charla con Lauren, ya sabes, de mujer a mujer – dice guiñándole su ojo derecho.

- Entiendo. Iré afuera. ¡Te veré mañana, fotógrafa! – saluda antes de retirarse.

- Lauren, lo siento – dice después de un momento – ¡no sabía que tu... que tenias todo esto!

- Sabes perfectamente de mi trabajo, y viniste a Lima, Ohio ¿sin siquiera pensar que podía ser yo? Tu empresa me contrato,¿ ni siquiera te dijeron mi nombre?

- No soy la encargada de eso, ¡perdón!

- No te quiero aquí, Camila.

- No me pues pedir eso, Lauren...

- ¿Desde cuando me dices que puedo pedir y que no? ¿Tu? ¿Justamente tu?

Intento mantener la calma pero es imposible.

- Lauren, no tenemos excusa, debemos hacer este trabajo. Es importante para mí, y para ti. Que se supone que voy a decirles?

- ¿La verdad? Oh, lo siento, quizá tu nueva pareja desconozca tu historia. Tu amante, ese por el cual nos dejaste conoce tu pasado, Camila?

- Laur – dice mi amigo tomando mi brazo para contenerme – tranquila.

- Debí suponerlo – dice Camila soltando una especie de sonrisa – Hola Shaun, un gusto verte.

Mi amigo solo hace un gesto educado con la cabeza.

Le pegare si habla.

- Mira Laur...en, Lauren. Nada... - dice luego de un suspiro –Podemos hacerlo. Lo sé. – tiene ganas de decir algo mas pero vuelve a suspirar pesadamente - te veré mañana. – dice para luego retirarse de mi estudio.

Necesito pellizcarme, ¿en serio acabo de tener a Camila frente a mi?

¿Realmente tengo que hacer una producción con ella mañana durante toda la puta tarde?

¿Solas?

De ninguna manera, Shaun debe estar conmigo.

No vaya a ser cosa que... ¡demonios!

Me suelto del agarre de mi amigo y voy rápidamente a tomar mis cosas.

- ¡Lauren, espera! – Shaun dice siguiéndome.

Cierro todo como puedo dejando cámaras y los demás equipos como están y corro hacia mi casa.

Necesito hacer algo con suma urgencia, es la única forma de la cual me pueda tranquilizar. Abro la puerta lo más rápido que puedo, sin siquiera quitarme mis cosas o al menos cerrar la puerta, corro hacia su encuentro, si no está mirando la tv solo puede estar en un lugar.

Bingo.

Plácidamente duerme con su chupete en la boca mientas abraza a su muñeca. Nunca va a ningún lado sin ella, yo me acerco lentamente para no asustarla y tomo el pequeño bulto en brazos.

Aspiro su aroma a colonia de bebe mientras la abrazo contra mi pecho.

Sophie solo se acomoda y sigue durmiendo.

Esa paz que me transmite es lo que tanto necesito en este momento.

La necesito a ella.

Desde el encuentro con Camila lo único que quería era correr para tener a mi hija en brazos. Ella causa ese efecto en mí. Durmiendo en paz, tranquila, ajena a todos los problemas.

- Nadie va a quitarte de mi lado cariño, te cuidare más que a mi vida. Estaremos siempre juntas, lo prometo – le susurro mientras dejo suaves besos en su frente.

"La única persona que realmente te ama es aquella que tiene la fuerza para aceptar tus errores y perdonarte, aquella que no te aleja ni se va, aquella persona que te quiere y no te cambiaría jamás, te ayuda a mejorar"

- ¿Estas mejor? – pregunta mi amigo sentado en la cocina junto a mi mama con sus famosas tazas de café.

- Si, lo siento. Necesitaba verla. – digo quitando mi abrigo.

- En serio, ¿ella volvió? – pregunta mi mama.

- Mama, ella no volvió. Tan solo necesita las fotos y volverá a su perfecta vida. No hace falta que te hagas ilusiones.


- ¿Ella dijo eso? Preguntó por...

- No! No y no mama, por favor no sigas con eso. Camila no volvió,¡ fue solo una inoportuna coincidencia!

Le exclamo antes de que ella comience con sus historias con finales felices. Las creía en su momento, pero ya no más.

- ¿Que piensas hacer? – pregunta Shaun.

- Tengo un contrato firmado. Es imposible no realizar este trabajo. Les sugerí que lo hagas tu, pero...

- Te quieren a ti.

- Exacto. – digo tomando mi cabeza con las manos.

- Puedes hacerlo, cariño. Pasaste peores cosas antes.

Suelto el aire que estaba conteniendo y miro a las dos personas frente mí. Odio sus miradas en estos momentos. Son como de... compasión. Las vi varias veces en mi vida. 

- Estaré bien. – exclamo intentando mostrar una sonrisa – solo fue el shock del momento. Pueden estar tranquilo. La supere hace mucho tiempo, y aunque quiera, no puede quitarme nada. Así que le daré sus fotos y luego se irá olvidando este mal momento. Es lo mejor para todos. – digo parándome.

- ¿Estas segura que estas bien?

- ¡Perfectamente! iré a tomar una ducha, fue un largo día. Te veré mañana –digo a mi amigo antes de darle un gran beso a mi mama.

Detesto hablarme mal. Me giro para caminar lo mas pasivamente a mi dormitorio y me refugio allí y dejo caer las lagrimas contenidas, puede que quiera que esté todo bien, pero definitivamente no lo está.